miércoles, 19 de noviembre de 2008

Las guerras del Congo

Este miércoles 19 de noviembre de 2008 un miliciano rebelde del CNDP se pasea por el mercado de carbón vegetal en Rupango, en el este de la República Democrática del Congo. Los vendedores de carbón van cada día de Rupango a Goma, llevando una bolsa de 40 kilos a sus espaldas, o hasta tres si van en bicicleta, con su venta pueden llegar a ganar unos 5 euros.

Soldados gubernamentales transportan mercancía, fruto de los saqueos, sobre una bicicleta de madera, después de un día de lucha en el pueblo de Kayna durante el día de ayer.

Los habitantes de la ciudad de Kanyabayonga (Kivu Norte) miran como un tanque de Naciones Unidas entra en su base ayer martes 18 de noviembre. Cientos de familias huyen de la ciudad, que está siendo saqueada por los soldados gubernamentales, antes de abandonarla en su camino hacia el norte.

En la siguiente fotografía se pueden ver unos soldados de la misión de la ONU (MONUC) inspeccionando una pieza de artillería en un desfile de las tropas del General rebelde Laurent Nkunda, celebrado el 17 de octubre de 2008. Estas armas se las arrebataron a las Fuerzas armadas congoleñas (FARDC) en un ataque a una base en Rumangabo, al norte de la ciudad de Goma.

Según informaciones aparecidas en el diario El Periódico, la guerra que se está librando en Kivu (este de la República Democrática del Congo) podría estar provocada por los intereses de las empresas multinacionales mineras con el objetivo de separar la región para transformarla en un estado independiente o en un enclave autónomo bajo la influencia de algunas potencias occidentales a través de Ruanda, Uganda, Angola y Nigeria. Parece ser que con el aparente objetivo de defender la etnia de los tutsi se está intentando separar la región más rica del mundo en minerales y metales estratégicos, indispensables para la informática, la aeronáutica y las telecomunicaciones.

Es probable que las disputas entre el general rebelde Nkunda y el Gobierno de la República Democrática del Congo tengan un origen mucho más complejo que las pretendidas luchas étnicas entre tutsis y hutus. En este, como en tantos otros casos, la ONU se aferra a los acuerdos de paz firmados por todas las partes (Acuerdos, por otra parte, incumplidos) porque no sabe cómo acabar con un conflicto, en el que se mezclan las luchas de las grandes multinacionales y ejércitos diversos y las de pequeños grupos armados que quieren controlar las minas ilegales y el contrabando de minerales.

Muchos temen que todo ello acabe en un golpe de estado en la República Democrática del Congo, que hace poco celebró unas elecciones generales, propiciadas por la Unión Europea (UE), con el apoyo de unos 17.000 cascos azules, la mayor fuerza jamás desplegada bajo la bandera de la ONU. En ellas participaron todas las etnias y fueron consideradas las más transparentes que se han realizado en África. Poco después, el general Nkunda, que se presentó a la consulta y fue derrotado, se rebeló. En otro orden de cosas resulta pradójico que estos 17.000 cascos azules no sean capaces de impedir que los 4.000 combatientes de Nkunda aterrorizen a la población civil. Al parecer, el general español Vicente Díaz de Villegas dimitió como jefe de la MONUC a finales de octubre, al no poder llevar a cabo su cometido por las presiones de algunos paises no africanos.

Un elemento importante en este conflicto, pudiera ser, el hecho de que el Gobierno de la República Democrática del Congo haya firmado recientemente un acuerdo con China que prevé unas inversiones de unos 10.500 millones de euros, destinados a explotaciones mineras e infraestructuras (Grupo de empresas del entorno del Exim Bank).

La República Democrática del Congo es 80 veces mayor que Bélgica (La antigua metrópoli) y posee el 34% de las reservas mundiales de cobalto, el 10% del oro, el 50% del coltán (Mineral necesario para la fabricación de aparatos electrónicos como los teléfonos móviles y los ordenadores) e importantes yacimientos de diamantes, uranio, casiterita y niobio, además del 70% del agua dulce de África. Además, en Goma se ha hallado petróleo. Una ojeada al mapa permite constatar que desde Nyunzu (norte de Katanga) hasta el valle de Djugumagi, en Uturi, las zonas afectadas por la guerra son también las de las minas y donde hay más oro.

El pasado 29 de octubre, cuando los rebeldes tomaron Goma (capital de Kivu Norte), los soldados del ejército gubernamental se desquitaron saqueando la provincia. El este de la República Democrática del Congo también se ve afectado por la inestabilidad creada por los millones de refugiados que llegaron desde Ruanda tras el genocidio de 1994, en el que fueron asesinados por miembros de la etnia hutu más de 800.ooo tutsis y hutus moderados.

Según informaba WORLD NEWS, los rebeldes de Laurent Nkunda se encontraban el viernes a algunos kilómetros de la ciudad estratégica de Kanyabayonga, en el este de la República Democrática del Congo, dónde la situación era tranquila. La información provenía del portavoz militar de la MONUC, el teniente coronel Jean-Paul Dietrich.

Aquí podemos ver otro video sobre la batalla de Goma en www.congovideos.com

1 comentario:

Nómada dijo...

Me ha interesado muchísimo tu información sobre el conflicto centro africano. Me ha recordado a artículos sobre el mismo tema de Kapucinsky. Encantada de haberte conocido