El alumide es un material que se obtiene por la fusión de poliamida con partículas de polvo de aluminio. Esta unión da un acabado único, de aspecto metálico, poroso, rugoso y ligeramente áspero. Este material puede ser pintado o barnizado, y destaca sobre ningún otro material imprimible por su dureza, siendo ideal para proyectos de diseño donde el acabo necesite rigidez y de aspecto metálico. Además, es un material resistente al agua.
Los modelos se imprimen sinterizando una fina capa de polvo, capa por capa. Si bien es mucho más rígido que otros materiales utilizados en la impresión 3D, también puede soportar cargas térmicas mucho más altas, manteniendo su forma a temperaturas que harían que los compuestos termoplásticos como el ácido poliláctico se derritieran.
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