Alma de herrero: Museo Histórico Militar de La Coruña

El Museo Militar está situado en un lugar de especiales resonacias históricas, ocupando parte del que fue solar del antiguo Convento de San Francisco. El actual edificio, que data de del año 1.940, destaca por su aspecto sobrio y señorial integrado en el entorno de piedra de la Plaza de Carlos I. En la planta baja destaca la máquina del reloj del Palacio de Capitanía General que data de mediados del siglo XVIII; es una pieza única, expresamente construida para el citado palacio. El museo ofrece una de las más importantes y completas colecciones de armas de fuego: rifles, mosquetones y carabinas, con la presencia de los míticos Winchester 73 de las guerras indias y del revolver Colt de la conquista del Oeste, así como de los Mauser y Remington de la Primera y Segunda Guerra Mundial. Suscitan curiosidad las pistolas de Jolgar, al parecer diseñadas para el inválido General Millán-Astray, y el mosquetón de Foucellas, utilizado por este guerrillero en la Postguerra Civil Española. Cuenta además con una colección de cañones de bronce que poseen la rara peculiaridad de que al ser disparados con salvas cada uno da una nota de la escala musical. Es asimismo notable la amplia colección de maquetas de diverso material artillero.

El origen de este museo nos remite al gusto por el coleccionismo y al cuidado del material del secular y hoy desaparecido Parque y Maestranza de Artillería de La Coruña. El embrión del Museo se encuentra en 1858, cuando se constituye una colección a escala de maquetas de piezas, carruajes y máquinas que se suman al armamento recogido durante las Guerras Carlistas. Tras la Guerra Civil se enriquece con una importante colección de armas cortas y largas de todo tipo y nacionalidad. Nuevas incorporaciones banderas, recuerdos e instrumentos procedentes de Unidades de la antigua Región Militar Noroeste que desaparecieron con motivo de la reorganización del Ejército a mediados de los años 80, completaron la colección, proporcionándole la suficiente entidad como para que en 1988 se le concediera la categoría de Museo Regional Militar. La disolución del Parque y Maestranza de Artillería obligó a buscar un nuevo emplazamiento para el Museo, trasladando éste al edificio cercano que ocupaba la Jefatura de Artillería y que había sido desde el siglo XVI, sucesivamente, convento, almacén de municiones, cuartel de veterinaria, presidio, cuartel de la Guardia Civil y comandancia de Artillería. El Museo entró en servicio en sus remozadas instalaciones de la Plaza de Carlos I el 27 de mayo de 1992.

El Museo ocupa una superficie total de 1.235 m2 y se articula en zaguán, escaleras y cuatro salas, en las que se distribuyen los más de 1.500 fondos que componen su colección permanente. Abarca ésta un periodo de dos siglos, desde mediados del siglo XVIII hasta mediados del siglo XX. En el ámbito espacial se centra en hechos y aspectos del Ejército español, con especial dedicación a lo relacionado con la propia ciudad de La Coruña, con Galicia y con unidades de Asturias y Castilla-León, dada su vinculación original con la antigua Región Militar Noroeste. Es intencionada su variedad tipológica, tan peculiar del entorno castrense y en la mejor tradición polimórfica y heterogénea de la vida militar. Así, pueden encontrarse en sus salas tanto armas e instrumentos de medición, escultura, mobiliario y artes decorativas, como vexilia y uniformes, documentación, cartografía, etc. Como el edificio que lo alberga, su museografía está en proceso de remodelación para mejorar su discurso expositivo. No obstante, en él se han aplicado ya criterios expositivos modernos, tales como la unidad organizativa en gráfica y expositores, la coherencia de las salas, la combinación de iluminación de ambiente con iluminación de acento o la sistemática en el orden y utilización de dos tipos de exposición, el formal y el didáctico, tanto con objeto de comunicar como de instruir.