Durante el invierno del año 535-536 se produjo uno de los episodios de enfriamiento de la atmósfera más notables y prolongados en el hemisferio norte, en los últimos milenios. Este suceso podría haber sido originado por una gran erupción volcánica en los trópicos o el impacto de meteoros. Este cambio brusco del clima provocó malas cosechas, hambrunas, epidemias, una gran mortandad y la caída de varios imperios.
Sin que se pueda determinar con exactitud el origen de la bajada de temperatura si se sabe que en esas fechas se produjeron tanto grandes erupciones volcánicas como la visita del cometa Halley, que se acercó a la Tierra en el año 530.
Estudiando los anillos de crecimiento de los árboles enterrados en las cenizas volcánicas, por el procedimiento del carbono 14, se ha podido determinar que en el año 535 se produjo una gran erupción del volcán Ilopango, situado en el actual El Salvador. Esta actividad volcánica generó 84 kilómetros cúbicos de ceniza, en la que se considera sexta mayor erupción de los últimos 10.000 años. Se cree que en un radio de 200 kilómetros alrededor del volcán desaparecieron todas las personas, animales y árboles.
Por otra parte, los estudios de los núcleos de hielo de Groenlandia muestran una inusual alta concentración de esférulas metálicas de níquel y estaño, que data de alrededor del año 536.
En China la dinastía Wei del Norte desapareció y el 75 por ciento de sus habitantes murieron a causa del frío, las pérdidas de cosechas, el hambre y las sequías.
En Centroamérica, la población de la gran ciudad-estado de Teotihuacan también disminuyó.
En Europa Justiniano se afanaba en reconquestar el Imperio Romano de Oriente, mientras que sus súbditos padecían la llamada Plaga de Justiniano, una especie de peste bubónica que llegó a matar hasta 10.000 personas por día.
Con posterioridad, hacia 1275, se produjo la "Pequeña edad de hielo". La Pequeña Edad de Hielo comenzó repentinamente entre los años 1275 y 1300 d.C. tras sucederse cuatro erupciones volcánicas masivas en el trópico, unos episodios que duraron unos cincuenta años.
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