La empresa Pangea Propulsión fabrica motores cohete del tipo aerospike. Está desarrollando tres modelos, el U-Nyx es un sistema de propulsión de bajo empuje para mover los vehículos espaciales una vez están en órbita, el Arcos es un motor aerospike reutilizable de empuje alto, y el Kronos un motor de muy alto empuje en estudio en colaboración con la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Francesa.
Estos motores están fabricados con materiales especiales destinados a soportar entornos extremos que involucran presión, temperatura, oxidación o almacenamiento a largo plazo.
Las aleaciones de cobre ofrecen un equilibrio óptimo entre conductividad térmica y resistencia a altas temperaturas, lo que permite un enfriamiento eficiente de los componentes más cargados del motor.
Las aleaciones a base de níquel ofrecen resistencia a la oxidación y resistencia mecánica, funcionando de manera confiable desde temperaturas criogénicas hasta temperaturas extremadamente altas.
Las aleaciones resistentes a la combustión están diseñadas para soportar entornos extremos de temperatura, presión y concentración de oxígeno, donde las aleaciones convencionales arderían.
Tambien se desarrollan materiales compatibles con el peróxido de hidrógeno de alta concentración (HTP) utilizado en algunos sistemas de propulsión.
Para fabricar los componentes críticos de los motores se utilizan impresoras 3D de fusión láser en lecho de polvo (LPB-FLPB-F) que permiten una libertad de diseño incomparable para piezas complejas y optimizadas de tamaño pequeño y mediano.
Al bajo coste de la fabricación aditiva se añade la precisión de la fabricación sustractiva, manejada por un brazo robótico, para conseguir piezas complejas y económicas.
En 2018, el equipo formado por Adrià Argemí, Nicola Palumbo, Federico Rossi, Rasmus Bergstrom, Luis Bellafont, y Xavier Llairó diseñó su primer motor Methalox, que funciona con metano y oxígeno líquidos y dispone de una cámara de combustión con refrigeración regenerativa y construida con dos materiales, una aleación de cobre y otra de inconel.
En noviembre de 2023 la entonces llamada Pangea Aerospace, completó con éxito la fase de pruebas para varios componentes y subsistemas de su motor Aerospike ARCOS en el Centro Aeroespacial Alemán (DLR) en Lampoldshausen.
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