La idea de la creación del “Museo de Máquina-Herramienta”, surge en 1982, como consecuencia de los primeros pasos para la creación del “Museo de la Ciencia y Técnica” en Barakaldo (Bizkaia). Nos dimos cuenta de que la nueva revolución industrial que se estaba produciendo en los últimos años, como consecuencia del desarrollo de la electrónica y la informática, obligaba a la renovación casi inmediata de un parque de maquinaría, que respondía a modelos básicos nacidos en los primeros años de la máquina de vapor, desarrollados en el transcurso del siglo XIX y parte del siglo XX y que pronto iban a ser simplemente historia. Tomamos conciencia de la importancia que tendría para nuestro País la recuperación de máquinas del siglo XIX y en concreto los modelos más representativos, fabricados por nuestros pioneros a finales del siglo XIX. Sentíamos que estábamos a tiempo de recuperar muchas de estas máquinas. Pensábamos que podían representar un Patrimonio Industrial de incalculable valor, y que quizás podrían ser la base de un museo especializado.
Aunque el proyecto de Museo de Barakaldo ya había recogido varias máquinas antiguas y había catalogado la existencia de otras muchas en diversos talleres del País; fue a partir de 1991, cuando el Instituto de Máquina-Herramienta de Elgoibar inició la recuperación de los fondos más representativos de máquinas fabricadas en nuestro País a principios del siglo XX y algunas máquinas americanas, inglesas y alemanas de especial significado.
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