El decreto tenía fecha del 24 de setiembre de 1936, y lógicamente al ponerse en práctica recuperaba vacíos jurídicos e institucionales con la legitimación de poderes públicos como deseo y mandato del Gobierno de la República. Era una forma de recuperar el banderín de enganche del gobierno de Madrid y superar en materia cotidiana las irregularidades que se acrecentaron por los conflictos de mantener un frente de guerra.
En materia de enseñanza la preocupación había sido continua y anterior al decreto mencionado. Ya en el número dos, con fecha 31 de agosto, la Delegación de Instrucción Pública advierte a los maestros nacionales y profesionales de la enseñanza, la necesidad de ir poniéndose a disposición del Gobierno para reanudar las tareas escolares tras acabar el periodo vacacional. La misma delegación dejaba constancia de la obligatoriedad de pedir informes de los maestros para reanudar el curso pues el constante trasiego de gente y los movimientos poblacionales hacían imprescindible el conocimiento de posiciones ideológicas del colectivo de educadores: “Pero habréis de entender que dichos informes vendrán avalados por todos los componentes del Frente Popular que integren los respectivos comités y que en ellos no habrá nada que signifique presión, o sea amistad o enemistad personal sino atendiendo a los altos intereses de la República y de la enseñanza popular” (25).
Es evidente que todas aquellas pesquisas retrasaban ostensiblemente el comienzo del curso escolar, pero a finales de setiembre la Delegación de Instrucción Pública disponía una serie de medidas que pretendían reorganizar la vida escolar de la zona. Cuatro eran los puntos del programa:
1. En la zona leonesa no insurrecta se crean dos Subdelegaciones de Instrucción Pública, en sustitución de los Consejos Locales y de Inspección de Primera Enseñanza.
4.) Se nombra Subdelegado de la zona 1.ª a D, Florentino Rodríguez Rodríguez y de la zona 2.ª a D. Laureano Nepomuceno Matanzo.
Con la excepcionalidad que supondrían los ruidos, constantes bombardeos, y la idoneidad dudosa de los locales destinados para estos fines, el curso escolar comenzaba a funcionar, pero los informes políticos y profesionales con respecto a algunos maestros, disponían el cese en sus cargos con pérdida de todos los derechos a varios miembros de colectivo. Eran los siguientes:
Junto a la enseñanza pública, los temas de sanidad y política de donativos configuraban un aspecto importante de la cotidianeidad de esta franja norte leonesa. A principios de setiembre comienza de una forma ininterrumpida la acción de donativos para el frente (27). El tema se nos muestra parejo al sanitario por ser la Delegación de Sanidad y Asistencia Social quien aglutina ambas competencias. Esta acción ocupaba tantas alabanzas en el BGFPL como las dedicadas al gran servicio que prestaba el Socorro Rojo Internacional en la lucha contra el fascismo en el montaje de pequeños hospitales en la retaguardia y la asistencia social a enfermos, heridos y desamparados (28). Supone siempre en las páginas del boletín un filón de innumerables recursos de solidaridad y propaganda el hecho de publicar día a día los listados de donantes.
Como el problema era muy acuciante en hospitales, el sacrificio de la población civil fue importante a juzgar por el número de donativos recibidos. El 26 de setiembre se publicaba en el número 15 del BGPFPL el total de lo recibido —es sólo un ejemplo más— del pueblo de Santa Lucía con destino a los hospitales de sangre y el frente. Se consiguieron 103,85 pesetas en metálico, además de 67 gallinas, 15 conejos, 73 huevos, una botella de Jerez Quina y otra de manzanilla. Sería muy interesante discernir en la política de donativos entre la buena voluntad y la presión o amenaza ante lo que eran requisas regulares. Sea como fuere, lo cierto es que en la endémica escasez de medios con los que se cuenta, existe una importante contribución de donativos que el boletín de guerra se encarga de incluir en todos sus números con evidentes fines publicitarios.
Un último aspecto completa el contenido del BGFPL. Se trata de la vertiente político-sindical que impregna la vida del frente y retaguardia. No podía ser de otra manera cuando en esta franja de tierra leonesa se aglutinan los restos de las diferentes opciones políticas y sindicales que operaban en la provincia entera. No obstante, las dos grandes ideologías que respiran a través del boletín serán el socialismo y el anarcosindicalismo; las mismas que tenían una relevante vida pública en el Frente Popular. Siempre hay un hueco en el BGFPL para estampar la gestión del grupo socialista en los designios de la guerra y la altura humana de sus bases o incluir, por ejemplo, unos versos dedicados a la figura humana y política de Buenaventura Durruti (29).
De todas las enseñanzas que se desprendían de la sublevación militar, la más destacada en el sector fiel a la República era la necesidad de una fuerte unión sindical que ante el enemigo común se hacía imprescindible. Nótese siempre que son los afiliados sindicales el mayor número de combatientes que forma la milicia. Ello exigía portar un modelo de conducta que cualquier republicano debía tener presente: “No puede tolerarse por más camaradas que se discuta en plena calle y quizá ante nuestros enemigos, la actuación y hasta la autoridad de los hombres en quienes las organizaciones respectivas han depositado su confianza dotándoles de la máxima autoridad (...) Fuera de las asambleas cada afiliado a cualquiera de las organizaciones sindicales y políticas que forman el Frente Popular, tienen el deber ineludible de defender la autoridad de los Comités y de cada uno de los hombres que los integran y denunciar al primer miliciano que encuentre a los difamadores para que sean detenidos” (30).
Incluso se insiste en el futuro que espera a esa acción sindical una vez ganada la guerra a los fascistas. Ese es el título de un artículo firmado por Carlos Mauriz en Busdongo en setiembre del 36 donde el autor señala que tras los momentos de acción bélica (ganar la guerra), el problema de máxima importancia para todos los trabajadores es lo que él denominaba “problema social”: “Aunque hasta hace poco se luchaba contra la burguesía reaccionaria para aranceles y mejoras que aliviaran al proletariado, los logros nunca fueron totales”. Mauriz cree en el triunfo frentepopulista ante la intentona militar, hecho que llevaría consigo la desaparición total de un régimen que se basaba en la injusticia y en el privilegio. Ello porque son las organizaciones obreras las que, a su juicio, defienden la República: “Ahora tendremos la ocasión de demostrar a los magnates de la Banca, del Ferrocarril y de todas las grandes industrias, cómo es posible que el trabajador perciba íntegramente el fruto de su trabajo y la industria viva prósperamente, porque ya no tendrá que pagar pingües sueldos a los parásitos que tenían como lugar preferente para preparar sus planes criminales los Consejos de administración, covachuelas de miserables y de traidores. Se terminaron los patronos intransigentes que tenían siempre en boca la “economía nacional”, como si la economía nacional fuese la de aquellos tiburones que derrochaban en noches de orgía lo que miserablemente robaban al trabajador, se terminaron los jornales de 1,50 y las jornadas para los campesinos de sol a sol, se terminó en fin la explotación del hombre por el hombre” (31).
Para cubrir esos objetivos manifestados con hirientes palabras, diseña el autor un plan de estudio y capacitación de trabajadores y escuelas profesionales, Con respecto a la UGT y CNT de la provincia de León, “las dos potentes sociedades que controlan todo lo viril y consciente del proletariado se preparan para la difícil labor que como directoras de la inmensa masa de productores les corresponde. Ayudemos a todos los demás a la gran obra en beneficio de los oprimidos, pongamos todo lo que nos es posible por el triunfo de la causa del proletariado, sin fijarnos ni reparar en aquellas diferencias ideológicas que puedan separarnos y hagamos porque sean una realidad las últimas estrofas de nuestra Internacional”.
Mauriz como buen militante socialista estaba muy familiarizado con todo el programa revolucionario-sindical, pero las necesidades momentáneas del verano del 36 eran otras. De hecho socialistas y anarquistas se preocupaban por esas fechas de sus respectivas reorganizaciones, elecciones de comités y —tema urgente— la decisión de militarizar las milicias porque el objetivo prioritario en todos los órdenes era ganar la guerra, o si se prefiere, en el caso de la franja norte, contener al enemigo. Así, fueron convocados por su comité provincial las Juventudes Socialistas de León, celebrando una asamblea en Pola de Gordón para tratar de la reorganización de los cuadros juveniles revolucionarios de la provincia. Asistieron responsables de León, Astorga, Colle, Villablino, Huergas de Gordón, Santa Lucía, Busdongo y Palanquinos. Se nombró un comité provincial compuesto por Leandro Aroca, José Arija y Joaquín del Palacio, fijando la sede, mientras durasen las circunstancias bélicas, en Villamanín.
Además, de plena conformidad, fue aprobado el decreto de militarización de sus milicias como la mejor medida posible para hacer frente al enemigo (32). En parecidos términos se desarrollaba la asamblea hermana de UGT. El día 26 de setiembre, convocados por el Sindicato Minero Castellano y el Sindicato Nacional Ferroviario (Consejo Obrero de León), se celebró una magna asamblea para tratar los temas de militarización y reorganización de la UGT leonesa. Fue aprobado todo lo concurrente a las disposiciones militares de sus afiliados en el frente, a la vez que se nombraba una Comisión Ejecutiva Provincial que asentaba la sede en Villamanín y tendría como misión la reconstrucción de sindicatos locales. Sus componentes eran Valentín Fernández (ferroviario), Bareutidio Díez (minero) y Zacarías Boces (albañil).
En los últimos números que conservamos del BGFPL también hay noticias del anarcosindicalismo en la provincia, En Cármenes se reunían los afiliados de la CNT con el siguiente orden del día:
Días después se organizaba el sindicato anarquista en Villamanín donde figuran los acuerdos mencionados para la formación de los grupos de nueve compañeros y un delegado, primer paso para la creación de lo que ellos denominaban la columna CNT de León. “El que se acordara crear los grupos o escuadras por organización (sin excluir los simpatizantes) no obedece más que, en Asturias, así se está organizando porque la experiencia ha demostrado que será más eficaz para cuanto antes, aniquilar el fascismo” (33).
Sabemos que el Frente del Norte aún durará un año más en caer pero el debilitamiento de la zona cada vez resulta más evidente, a pesar de los esfuerzos por lo contrario, por lo que hay que desconfiar en un grado elevado de la efectividad de estos últimos. No conocemos los motivos —si los hay— que inducen al corte repentino que hemos constatado en la publicación del BGFPL; desde luego que el cúmulo de conjeturas que podamos tener presentes sólo confirma los vacíos documentales de las fuentes contemporáneas, las penurias económicas y el hecho de evidenciar día a día que cada vez más los designios de esta franja norte de León dependen más del Consejo Interprovincial de Asturias y León aprobado por el gobierno republicano en diciembre del 36 y que incluía el punto de gravedad fuera ya de la provincia leonesa, sacrificando una identidad uniprovincial por los imperativos que el frente de combate va demandando. Más que nada el BGFPL retrataba un momento crucial de la guerra mantenida en el verano de 1936 visto desde un lado de las líneas de combate.
Los contenidos de las páginas del Boletín de Guerra del Frente Popular de León que hemos sintetizado brevemente no deben condicionar la valoración última de lo que es la publicación en si misma, el órgano de divulgación como tal. Es evidente que intenta —lo consigue— reproducir las constantes vitales del reducto frentepopulista leonés, pero por encima de todo el boletín supone una identificación de la zona que abarca; la delimitación expresa de unos ideales comunes que son contemplados en un órgano de divulgación oficial. Probablemente se necesitaba esta reafirmación o seña de identidad. Tal vez por eso no hay, ni se busca, una erudición literaria exquisita. Se prefiere el impacto psicológico de quien necesita ver en el boletín un reflejo de la unidad de acción. De hecho es una divulgación pobre, con deficiencias formales, con erratas de impresión, con aportaciones insulsas. Lecciones interdisciplinares como la sociología política o la psicología social nos aportarían sin duda infinidad de matices que aquí se pasan por alto.
El BGFPL era un medio más que un fin en sí mismo. Sus contenidos desgranan un doble cometido: la información y las componendas moralizantes en un ambiente de guerra inusual y asfixiante. La subjetividad se acentúa en sus páginas tanto más cuanto el tema se salga de la oficialidad de noticias puntuales. La realidad de muchos artículos se sustituye por la verosimilitud: esta diferencia supone el aporte necesario para decir lo que se necesita porque autoconvence el hecho de hacerlo así y es extensible a quienes participan de unas mismas circunstancias externas, No significa un dirigismo institucionalizado por parte de los responsables de la publicación, pero sí el necesario argumento de la persuasión de quienes buscan —necesitan— la coherencia de todos los miembros de una comunidad variopinta para unificarla en una tarea común: la resistencia ante un enemigo que cada vez resulta más fuerte y amenazador y con más medios materiales y humanos.
En los quince números objeto de estas reflexiones se constata una diacronía y una sincronía informativas. Diacronía porque se mide en dos meses solamente la evolución de los diferentes comités locales, sindicatos, agrupaciones y entidades que tenían peso específico en la zona. Sincronía porque número a número se reflejan los temas preocupantes y las deficiencias endémicas de la franja norte, esto es, abastecimientos, orden público, requisas, donativos, llamamientos a la población...
Con la caída del Frente Norte moría la esperanza republicana de quienes alargaron ese anhelo hasta el final. El BGFPL como órgano de la Historia algo nos aporta en esa búsqueda del pasado que el presente debe asegurar moral e intelectualmente.
En todos los frentes que controla la Columna de Pola de Gordón, existe absoluta normalidad. En las descubiertas verificadas por nuestros milicianos se observa que el enemigo sigue en la misma actitud.
Todos los días se presentan a nuestras líneas, fugitivos de León que nos dan a conocer las monstruosidades del fascismo, y se calcula que en León llevan fusilados más de un millar de compañeros.
En el frente de Valdeteja nuestros compañeros siguen dando batidas a las fuerzas facciosas que operan por las inmediaciones de Matallana.
Se sabe también que en León los fascistas procuran evadirse de los frentes y muchos se fingen enfermos y otros se hieren ellos mismos para no ir al frente.
Pola de Gordón 26-9-36. La Comandancia.
Sigue habiendo absoluta normalidad en todos los frentes de Pola de Gordon. Ayer un aparato enemigo bombardeó una de nuestras posiciones sin obtener resultados positivos. Después arrojo dos bombas sobre el pueblo de Llombera, inmediato a la referida posición, causando cinco muertos y tres heridos Todas las víctimas estaban en la calle, pues de lo contrario no hubieran causado ninguna víctima las bombas arrojadas por los aparatos rebeldes.
Por la Comandancia.
(2) Archivo Histórico Nacional de Salamanca (AHNS), B 51/3.
El doctor Calandre, de Madrid, ha recibido de un amigo suyo, médico que se halla en Pola de Gordón (León) una tarjeta concebida en los siguientes términos:
«Señor don Luis Calandre. Querido maestro:
¡Salud! Me encuentro al frente del hospitalito de la Cruz Roja que se ha establecido en este pueblo, en el frente sur del Ejército del Norte.
La importancia de esta tarjeta es que demuestra la magnífica situación de las fuerzas leales, que se adentran por la provincia de León. El citado pueblo de Pola de Gordón se halla a 25 kilómetros de la capital leonesa, y la columna allí destacada se encuentra en perfecta comunicación con Asturias y otros puntos del frente del Norte.
Descarrilamiento provocado en la madrugada del 20 de diciembre de 1936 por los rojos entre Matallana y La Vecilla. Tren carbonero del F.C. de La Robla. Foto F. Cubillo, León (TARJETA POSTAL, UNIÓN UNIVERSAL DE CORREOS, (Carte Postale, Union Postale Universelle))
Detalle del carril levantado por los rojos entre Matallana y La Vecilla el 20 de diciembre de 1936 y que provocó el descarrilamiento de un tren carbonero. Foto F. Cubillo, León (TARJETA POSTAL, UNIÓN UNIVERSAL DE CORREOS, (Carte Postale, Union Postale Universelle))
Según una información de Pola de Gordón, la aviación rebelde bombardeó en la mañana de ayer el pueblo de Llombera, causando víctimas entre la población civil. Este ataque ha provocado una gran sorpresa, pues se trata de un pequeños pueblo sin importancia.
Por otra parte la aviación leal ha bombardeado el aeródromo de la Virgen del Camino, en la provincia de León.
En los sectores de Pola de Gordón los milicianos han realizado, en los alrededores de Matallana, una incursión en dirección a la linea del Ferrocarril de La Robla. Un tren de carbón ha sido detenido y el personal ha sido hecho prisionero.
Recurso número 7 de 1938. (
Don Ricardo Brugada Urcullu Secretario del Tribunal Provincial de lo Contencioso-Administrativo.
SENTENCIA NUM. 1 Señores: D. Higinio García, Presidente; D. Félix Buxó, Magistrado; D. Teodosio Garrachón, idem.
En la ciudad de León a veinte de Enero de mil novecientos treinta y ocho.—Segundo Año Triunfal.
Visto ante este Tribunal el recurso contencioso administrativo de plena jurisdicción promovido por el Procurador D. Pedro Pérez Merino, en nombre y con poder de D. Arsenio Cueto Lozano, mayor de edad, casado, industrial y vecino de La Pola de Gordón, contra acuerdo del Ayuntamiento de La Robla, notificado al recurrente por comunicación fechada en 19 de Abril del pasado año de 1937 en el que se determina desestimar la petición que como arrendatario del arbitrio de Consumos hizo por medio de escrito de 13 de Marzo del año ante dicho pidiendo una rebaja del precio o tanto alzado estipulado, proporcionada a las pérdidas motivadas por la guerra; en cuyo recurso ha sido parte demandada la Administración y en su nombre el Sr. Fiscal de esta jurisdicción y como coadyuvante de la misma, el Ayuntamiento de La Robla, representado por el Procurador D. Manuel Menéndez Ramos, bajo la dirección del Letrado D. Alvaro Tejerina.
Resultando: Del expediente administrativo y documento que como complemento del mismo se han aportado: Que el Ayuntamiento de La Robla, en sesión que tuvo lugar el 2 de Diciembre de 1934, acordó que para cubrir el déficit del presupuesto municipal de los años 1935-36 y 37 se llevase al arriendo el impuesto sobre las carnes frescas y saladas, vinos y alcoholes, para lo que se procedería por la Comisión de Hacienda a la formación de la Ordenanza municipal y tarifa para la exacción de dichos arbitrios, así como a la formación del oportuno expediente en el que se harían constar las condiciones a qué habría de sujetarse el arrendatario de la exacción o cobranza de los impuestos: Terminadas las Ordenanzas y tarifas que quedan referidas y establecidas las condiciones que habían de regir en la provisión por concurso de la plaza de Gestor Recaudador de los impuestos aludidos, en el pliego que sirvió de base para la contratación del servicio de recaudación de mentados arbitrios, se figuró, entre otras, que no se precisa recoger a los fines de esté litigio, y bajo el número 12 la siguiente cláusula o estipulación: Este contrato se hace a riesgo y ventura para el rematante, y este no podrá por ningún concepto pedir rebaja de precio ni rescindirlo, así como tampoco aumentar los derechos fijados en la tarifa adjunta.»
D. Arsenio Cueto Lozano con fecha 26 de Diciembre de 1934 presentó en el Ayuntamiento de La Robla, un pliego en el que hacía la manifestación de que enterado del pliego de condiciones a que se refiere el anuncio inserto en el BOLETÍN OFICIAL de la provincia, número 295 de fecha 10 dicho mes, lo acepta y ofrece la cantidad de 23.774 pesetas por la subrogación en su favor de recaudación de la imposición municipal de bebidas y alcoholes, carnes frescas y saladas para el año de 1935 e igual cantidad para cada uno de los años siguientes de 1936 y 1937. En sesión celebrada por supredicha Corporación municipal el día 30 de Diciembre de 1934, se adjudicó la cobranza de los arbitrios municipales el señor Cueto Lozano, comunicándoselo por oficio del mismo día.
Acompañado de ellos, a visitar los parapetos. A ratos
hay que correr un poco, o
agacharse para no ser blanco
de los tiradores rusos. ¡Y cómo transforman estas carreritas en una travesura de excursión dominguera lo que es
un juego con la muerte!...
Reímos como chiquillos por
aquel laberinto en que a cada
momento se tropieza con los
refugios en que duermen soldados y milicianos, y vigilan
otros, en una fraternidad sana. ¡Nos llevamos muy bien
todos! dice el de las treinta y
siete madrinas, aunque en
aquellas cuevas falta todo lo
que parece necesario en la
ciudad.
Por eso no debemos olvidar que cualquier cosa puede
ser allí útil o dar alegría. Yo
he llevado tres pipas viejas a Matallana, como pidió uno en Diario de León, y han sido
cogidas en el cuartel con algazara.
Excuso, pues, decir el regocijo que habrá en el Oliden,
con las cartas, periódicos y
fotografías que mandan las
treinta y siete italianitas,
siempre tan dulces y tan artistas en su poético lenguaje.
¡Oh mía carina Bruna Medini!
¿non é vero?
Hubo una, de Milán, que se
enceló al saber que tenía más
madrinas, y otra que le ha
mandado, en una pequeña fotografía de brillo antigua, (faldas largas con poisón y volantes, corpiño, capota) el retrato nada menos que de su
abuelita. ¡La pobre, qué ropas
usaba!...
Despedida
Cuando al despedirme, el
de las madrinas precisamente,
me dice a la puerta de la
alambrada que están satisfechos por mi visita, soy yo el
que tiene que responder que
la satisfacción es para mí al
contemplar con qué recio temple y alegre ánimo soportan
la guerra por Dios y por España.
LAMPARILLA
Del frente de Asturias
La 7.ª Bandera expedicionaria
de F. E. de León, por tierras
de Asturias
El parte oficial decía escuetamente:
"Frente de Asturias, ligeros tiroteos y cañoneo. En el
sector dé Cangas del Narcea,
rectificamos nuestras lineas
ocupando posiciones muy ventajosas".
A la 7.ª Bandera de F. E.
de nuestra querida tierra, le
tocó dar el «empujón», «rectificar». Como decía en una
de mis anteriores crónicas, es
ya grande la confianza que los
mandos militares tienen en
nuestros hombres, y, por eso el jefe director nos hizo el honor de designarnos para que
nuestra bandera sirviera de base a la operación que planeaba. Iniciando la ascensión a los altos de la
sierra Genestosa. Es penosa la
subida; nuestro capellán P. de la Mata y el médico, camarada Baquero, nos dan ejemplo de animosidad; parecen rebecos.
Ya en los altos, un querido camarada y teniente, con un capitán, otea desde una peña al enemigo, que desde sus bien situadas líneas de atrincheramiento, nos saluda con fuerte tiroteo.
Llegan el teniente coronel y el comandante que dirigirán la operación; traen con ellos
algunas piezas de artillería y
ametralladoras.
Saludamos a camaradas de
La coruña y Orense, que vienen a tomar parte en la operación. Mientras se emplaza la artillería, las ametralladoras silencian con sus fuegos a las del enemigo y los hombres de León y de Galicia descansan de la fatigosa ascensión.
Abre el fuego nuestra artillería y contemplamos el efecto que nuestros proyectiles causan en parapetos y líneas defensivas del enemigo. Contesta éste con morterazos y fuego graneado. El duelo se
prolonga y se da orden de tomar un ligero refrigerio...
El
sol quema a aquellas alturas, pero aún hay nieve en abundancia. Detenidamente busco
en los rostros de nuestros bravos y buenos camaradas
algo que demuestre preocupación o temor, pero inútilmente, sólo alegría y deseo de lucha descubro en ellos...
A las dos, se inicia de nuevo el fuego de cañón y la Bandera Leonesa de F. E. recibe
la orden de prepararse al ataque y tomar por asalto las posiciones rojas del «Chandurrio». El teniente indicado
prepara a nuestros camaradas
y les anima, aunque ya a los
leoneses les sobran ánimos.
El camarada jefe da los consejos finales y se encarga de
controlar el fuego de protección de las ametralladoras, él mismo trasmite al teniente la
orden de ataque y éste, el primero, pistola en mano, se
lanza al asalto. Gritos de ¡Arriba España! y los leoneses, haciendo honor a su nombre
se «pegan» a su jefe.
Le sigue otro con la segunda, mientras la tercera, cantando el himno, ayuda con su
fuego a las máquinas de guerra. El enemigo contesta duramente y por momentos la serranía simula un volcán; buena parte toman en este concierto las centurias gallegas
que si no tomaron parte en el
asalto, no fue por falta de ganas.
El capitán manda al jefe de la tercera centuria que secunde a la primera y segunda y allá va la tercera
(y esto no es una charada)
que por su actuación se iguala al resto, en valor y entusiasmo.
Novecientos metros a la carrera, cuesta arriba, por zarzas y canchales; coronamos
al fin la cumbre; dos bombazos y el enemigo huye. El
capitán enronquece dando
gritos de ¡Viva León! ¡Arriba
España! (Este capitán es natural de la muy patriota tierra
gallega).
Todos los jefes, sudorosos,
roncos, abrazan a los camaradas. Logrado el primer objetivo, comunica el capitán al
puesto de mando que va a la
toma del segundo; se organiza la columna y al asalto otra
vez, con el mismo resultado.
El «Chandurrio» 1.° y 2.° es ya de los camisas azules de
León; a lo lejos, en el valle, el enemigo vil, huyendo, nos llama "cobardes" ¡Ellos!
Llegan a la posición conquistada el teniente coronel
y el comandante. Pide el primero voluntarios para reconocer el collado del «Chandurrio», donde se ven refugios
y atrincheramientos y supone
que han sido abandonados,
pues ya no se oye un tiro.
Once camaradas se encargan del servicio y regresan con palas, picos, armas, granadas, etc., etc.
El «Cabril» y «Chandón» se
ocupan y en ellos flamea también nuestra bandera; a lo lejos, Peña Ubiña se perfila y
esperamos con ansia...
Cantamos el himno; nos felicitan el teniente coronel,
comandante y capitán, emprendemos el retorno, bañados
por una fina lluvia (estamos
en Asturias). Hoy los generales Aranda y Martínez Alonso nos envían efusiva felicitación... y me encarga el jefe
que te la trasmita, camarada
capitán Mantecón.
Puedes tener la seguridad de que los
hombres de León procurarán
hacerse dignos de su jefe.
¡Arriba España!
¡Viva Franco el Caudillo!
EME DE EME EME
Cangas del Narcea, junio
del año II de la Era Azul.
CNT, órgano de la Confederación Regional de Asturias, León y Palencia, Gijón, 19 de junio de 1937
EL MILICIANO Jacinto Blanco Cachón, del Batallón Asturias 249, Compañía Ametralladoras, Pola de Gordón. Desea saber noticias de su hermana Valentina, que reside en Gijón. Contestar a dicho batallón a Pola de Gordón o por prensa.
Ejército del Norte - Tercer Cuerpo del Ejército
ESTADO MAYOR
Llamamiento a filas de los varones nacidos el año de 1918 que les corresponde ser alistados para el reemplazo de 1939
A partir de hoy y por los Negociados de Quintas correspondientes de los Ayuntamientos de esta provincia y de la de León que se encuentren libres de ocupación por fuerzas facciosas, se procederá al llamamiento de mozos nacidos en el año 1918 que les corresponde ser alistados para el reemplazo de
1939. Todos los mozos interesados en dicho llamamiento se concentrarán en el Sector de Reclutas que se señala a continuación para cada Ayuntamiento y en la fecha que también se determina.
Los jueces municipales encargados de los Registros civiles que no hubiesen remitido a los Ayuntamientos las relaciones de los nacidos correspondientes, lo harán seguidamente. Los Ayuntamientos procederán con la máxima urgencia a dictar las Órdenes necesarias para que los mozos comprendidos en dicho reemplazo puedan efectuar la presentación en la fecha que se indica. Los nacidos en Municipios en poder de fuerzas facciosas (que no estén militarizados) se presentarán igualmente en el Ayuntamiento del pueblo de su actual residencia en donde serán alistados.
Serán conducidos por los secretarios o por el oficial de quintas que los entregará en el respectivo sector de reclutas, con una relación en la que harán constar los nombres y apellidos de los presentados, nombres de los padres, fecha de nacimiento, domicilio, y profesión y oficio. Entregarán asimismo otra relación de los no presentados con expresión de causas.
Los medios de transporte que se emplearán son: por ferrocarril hasta el punto señalado si lo hubiere, o
por carretera hasta la estación más inmediata al punto de partida y desde ésta al de destino por ferrocarril. Los vehículos para el transporte por carretera han de ser facilitados por los Ayuntamientos respectivos, empleando incluso camiones de carga si no hubiera en la localidad de pasajeros. Únicamente en el caso de no existir vehículos de estas clases podrán solicitarlo en la forma más rápida de la Jefatura de Transportes Militares de la provincia, pero se exigirá responsabilidad a los Consejos Municipales que soliciten dicho servicio si existiera en el concejo el material suficiente para trasladar a los mozos aún empleando más de un viaje si fuera necesario. Una vez efectuado dicho servicio podrán reclamar de la citada Jefatura se les reponga la gasolina empleada para dicho fin, previa certificación del consumo hecho. Para los trayectos de ferrocarril irán provistos los encargados de expedición de las oportunas listas de embarque.
La Caja de Recluta de Gijón nombrará el personal encargado de recibir los mozos en los puntos señalados para su concentración.
Se comunica a todos los mozos que deben llevar consigo una manta de su propiedad que conservarán en su poder hasta que por Intendencia Militar les pueda ser facilitada otra reglamentaria, en cuyo caso será devuelta a sus domicilios.
Los puntos y fechas señalados para la concentración son los siguientes:
Al sector de reclutas de Mieres, el día 27 del actual — Los Ayuntamientos de Langreo, Laviana, San Martin del Rey Aurelio, Sobrescobio, Pola de Lena, Aller, Quirós, Riosa, Mieres, Morcín, Rodiezmo, Valdelugueros, Valdeteja, Valdepielago, Vegacervera, Cármenes, Pola de Gordón, Campo de Caso, Miranda, Somiedo, Teverga, Proaza, Tameza, Ribera de Arriba, Santo Adriano y Delegaciones Gubernativas de Trubia y Grado.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 183, 6 de julio de 1937, León
En el frente de León
Fuerzas combinadas de León y Asturias, han realizado un movimiento envolvente, sobre el Puerto de
Somiedo, copando un batallón asturiano entre Somiedo y nuestras antiguas posiciones de Vega de Viejos
$e le ha recogido al enemigo 300 muertos, entre ellos un capitán, dos tenientes y un sargento
CUARTEL GENERAL DEL GENERALÍSIMO
Sección de información.-Estado Mayor
Boletín de información, con noticias recibidas en este Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 5 de julio de 1937.
Ejército del Norte
Frente de León.—Fuerzas combinadas de Asturias y León han llevado a cabo el envolvimiento del Puerto de Somiedo, dejando acorralado y aislado un batallón asturiano, establecido entre Somiedo y nuestras antiguas posiciones de Vega de los Viejos. Todo intento de resistencia del enemigo, ha sido inútil, destrozándose dicho batallón, siendo dispersado otro batallón de una columna que intentó socorrer al primero.
Al enemigo le fueron recogidos en esta acción más de 300 muertos, entre ellos 5 oficiales, 75 prisioneros, 285 fusiles, 2 morteros y gran cantidad de material y municiones. Los barrancos de la cordillera se encuentran cubiertos de cadáveres, todavía sin recoger, por lo abrupto del terreno.
Como consecuencia de esta operación, han quedado en nuestro poder las 13 posiciones enemigas que constituían el frente de Somiedo.
Las bajas sufridas por nuestras tropas, han sido solamente trece.
La ocupación del Puerto de Somiedo
(De nuestro enviado especial)
En la madrugada del día 5, fuerzas de León divididas en tres columnas ocuparon a las 9 horas el Puerto de Somiedo.
La hábil maniobra llevada a cabo por el Jefe de las fuerzas, dio lugar a que el enemigo sufriera una gran desorientación. Pretendió hacer frente a las dos columnas que desde el Valle del Sil avanzaban hacia el Norte en dirección del Puerto de Somiedo, y decimos que pretendieron, por el decidido y rápido avance de nuestras fuerzas, desalojándolos sucesivamente de las posiciones que los rojos tenían en gran número fortificadas, no les daba tiempo a organizarse, y cual sería su asombro, cuando pretendieron querer escapar por el Puerto de Somiedo, una columna de nuestros soldados titularon "la columna fantasma" mediante una marcha prodigiosa por terreno accidentadísimo, y mediante un golpe de audacia, se había situado a retaguardia del enemigo ocupando la peña del Diente (altura al Este sobre la carretera en el mismo Puerto) y además el poblado del Puerto de Somiedo, cortando la línea de retirada del enemigo, que quedó cercado.
Tomó también parte en la operación una columna de Asturias que avanzó desde el Cornón, por la divisoria de las provincias de León y Asturias y que castigó duramente al poco enemigo que había conseguido escapar.
A la hora de dar el parte se llevan recogidos por la columna de León, 300 muertos, entre ellos 1 Capitán, 3 Tenientes y 1 Sargento.
65 prisioneros.
285 fusiles.
2 morteros del 81.
5 sacos de granadas de mortero del 81.
100.000 cartuchos de fusil.
Gran cantidad de granadas de mano, material de fortificaciones, de cocina, víveres, etc.
Ha sido el de hoy un gran triunfo para nuestro Ejército, que constituye otro paso más para la total liberación del Norte de España.
Del frente de Villablino
Dos importantes posiciones enemigas en nuestro poder
A las ocho menos cuarto llegamos a Lumajo, cuyas montañas son hoy el teatro de brillantes operaciones. Fuerzas nuestras coronan ya todas las crestas de "Muxiben', importantísima posición del enemigo al Sur del pueblo, la más avanzada de este sector. Fue ganada sin una sola baja por nuestra parte, en las primeras horas de la madrugada, después de un certero fuego de artillería que desalojó al enemigo de sus posiciones. "Muxiven", aparte de suponer una amenaza constante para el desenvolvimiento normal de la industria minera, suponía un alto interés estratégico. Se trata de una cota que rebasa los dos mil metros.
A las ocho y cuarto nuestras baterías colocan ya sus granadas en la cumbre de "Las Rebezas", con matemática precisión. Los rojos concedían a esa segunda posición más importancia que a la primera, pues en ella habían atrincherado con más esmero y allí tenían una especie de cuartelillo de
avanzadas. Más de cien granadas caen en menos de media hora sobre el cono sobresaliente de "Las Rebozas" y alguna de ellas levanta por los aires la fortificación enemiga. Menudea más el fuego y es
éste tan preciso, tan admirablemente exacto, que bien pronto vemos cómo el enemigo abandona precipitadamente la posición y se desmanda a monte traviesa amparándose en las vaguadas y por el boscaje próximo.
Calla la artillería y nuestras fuerzas emplean sus fusiles, desprendiéndose de las últimas estribaciones de "Muxiven" y escalando el macizo de la nueva posición, que ocupan también sin una baja, sin un rasguño...
Paquean ridículamente los rojos, desde bastante distancia y arrojan los nuestros granadas de mano explorando las cercanías de la posición conquistada, que parece increíble se haya tomado con tanta facilidad, pues estimamos se prestaba a una mayor resistencia, aunque, naturalmente, para defender esta altura, como todas, es preciso, entre otras cosas, coraje... Hemos dicho que el fuego de nuestros
cañones contra "Las Rebozas" dio comienzo a las ocho y cuarto de la mañana. Bien pues a lar nueve en punto la posición era nuestra.
Silencio hasta el mediodía, interrumpido de cuando en cuando por la plática frenética de nuestras ametralladoras, en labores de limpieza. El enemigo ha muerto, o al menos agoniza disparando algún tiro aislado, con el mayor aburrimiento.
Sabemos que en "Muxiven" se cogieron varios muertos y hasta un oficial rojo. En "Las Rebezas" suponemos que la carnicería debió ser gorda, pues se percibieron bajas a simple vista desde donde nos
encontrábamos.
Poco después de mediodía se reanuda, con bastante intermitencia, el fuego de nuestra artillería. El enemigo lanza algún morterazo contra la posición nacional de "La Fochosa", sin la menor precisión.
Al pie de una fuente donde las aguas brotan frías como el hielo, hacemos nuestro refrigerio y acto continuo subimos a la posición mencionada cuya cumbre ganamos a las tres de la tarde. Se trata de la posición más avanzada del sector, que nuestros bravos vienen defendiendo desde hace más de siete meses con un arrojo y una valentía Verdaderamente dignos de mención.
Observamos, pisando el terruño patrio de Laciana, hoy redimida totalmente, a dos mil metros de altitud. Nuestros hacen fuego, contra la primera posición enemiga, que anda un poco revuelta. Imponente el panorama: Al Sur, "Muxiben", cuyas vertientes son verdaderos y espantosos precipicios. Sobre sus crestas oscuras la enseña patria ondea airosamente. Nuestros ingenieros han levantado ya nuevos parapetos, Al Norte y Noroeste las montañas y paisajes de Peña Rubia y Somiedo y detrás de nosotros, hacia el Nordeste las posiciones nacionales de Vega de Viejos. Ofrece un aspecto doloroso y aburrido el campo rojo por donde aúllan, ensangrentadas, las alimañas de Moscú, pero nos interrumpe la observación un silbido hiriente y rastrero, ¿qué ha pasado? A pocos metros explota una granada de mortero lanzada por eh enemigo desde su cota del Poceirón, seguramenté; recojo un pedazo, de espoleta y lo guardo como recuerdo de la jornada.
Son las 3 y media. Nos situamos un poco al Este y a esperar. ¿Habrá hoy nuevos acontecimientos?...
Dan las cuatro en medio del más bucólico silencio y para que todo sea bucólico por la vereda montaraz que va a Lumajo sube cantando, una zagala, que viste camisa azul, y es hermosa y ágil como una gacela, y a escasa distancia de nosotros pasta un rebaño de cabras. Ya respiran ganados y ganaderos, que tanto trabajo parecía costarles separarse de aquellos montes y valles que ellos sembraron de odios y de blasfemias, y qué hoy abandonaron como almas que lleva el diablo...
Villablino 3 de julio de 1937
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 207, 18 de julio de 1937, León
El Alzamiento Nacional en León
Algunos recuerdos del tren rojo
¡Un año! De triunfos monstruosos, porque son victorias anormales, pues juzgando por los elementos que intervienen se sale de lo natural, de lo lógico, esta carrera jubilosa de reconquista .. ¡Un año! Y, sin embargo, no se ha olvidado por los leoneses de la capital aquella primera semana del Alzamiento Nacional.
Sin embargo, parece que hay algunos que han borrado de su recuerdo tales fechas, como quienes olvidan a Santa Bárbara en cuanto deja de tronar... A pesar de que la tormenta se ve por otros sitios...
Refresquemos, pues, un poco la memoria. Deben ser estos señores, precisamente, aquellos que el domingo diecinueve de julio se metieron en sus casas y no salieron ni a misa de doce... ¿Por qué?..
Porque por la mañana se nos había descolgado aquí toda la canalla de Oviedo y todos los mineros rojos que pudo embarcar el invicto general Aranda en dirección a Madrid, para salvar a la República.
Los mineros, dueños de León, campando a sus anchas, con mosquetones y cartuchos de dinamita, hartos de vino de tierra, establecieron su cuartel general en el Bar Central.
Serian las cuatro de la tarde cuando vimos aparecer por la esquina del Hotel Oliden, en Santo Domingo, un general, el traidor Gómez Caminero, que cruzó la plaza con su ayudante hacia Ordoño II. Fue un momento impresionante. Los centinelas rojos, fusil en mano, nos echaron de la parte del jardín. Avanzaron unos autobuses hacia la calle Ancha, que venían de San Marros. Entre la Diputación y la casa de San Marcelo se empotraron como una trinchera .. Los guardias rojos ocuparon la calle de Gumersindo de Azcárate.
¡Qué impresión, lector, ver guardias de Asalto en la puerta de Salvador de Palat del Rey y ser detenido por un minero con fusil que no dejó pasar al periodista por la calle de Gumersindo Azcárate (¿cuándo se borrará este nombre?) esquina a la Plaza del Conde!
Mientras tanto, en el lado de acá se esperaba serena, confiada y aun alegremente... Los guardias de Asalto patrullaban por las calles de Cervantes y Conde de Luna, la tropa esperaba en el cuartel, la Benemérita se hallaba sobre las armas vigilante y los cachorros de la Guardia Civil, como les llama este cronista, los guardias jóvenes de San Isidoro tenían unas ganas de jarana que hacía sonreír. El viejo caserón que fue Normal y Asilo de Beneficencia contemplaba un espectáculo curioso y alentador. Aquellos guardias encanecidos y aquellos jovenzuelos con tricornio permanecían en su lugar descansando, como en una parada tras las ventanas. Sin hablar, sin pestañear siguiera. Sólo cuando pasé, en mi revista periodística por delante de los jóvenes hacían algunos un gesto alegre de ánimo e impaciencia, como chiquillo que espera un pastel.
Yo traducía aquello: ¡Vamos a estrenar estos fusiles!... Nuestro bautizo de fuego y sangre será pronto... ¡Qué gusto!...
Los viejos camisas azules leoneses también esperaban el toque de llamada... Pero éste no sonó aquella tarde temerosa y preñada de bárbaras amenazas que traían consigo la horrenda imagen del Oviedo de la revolución de Octubre. Acabábamos de echar un vistazo a la Catedral. Como si temiéramos perderla. Como si no hubiéramos de ver ya más aquella magia aérea y luminosa de sus vidrieras sin igual. ¿Qué sería de aquella cristalería frágil e imponderable ante el ronco estruendo de la bárbara dinamita?
Cuando llegamos al Café Iris, unas arpías de Asturias, mujeres sin feminidad y sin decoro, sonreían desvergonzadas detrás de otros cristales .. En la esquina de enfrente se parapetaban unos guardias de Asalto. En el medio de la calle vigilaban otros y la calle Ancha, desierta hasta la entrada de Ordoño II, sólo autobuses asturianos, y algún centinela rojo, imponía. A la puerta del entonces Hotel París, que ha dado la pauta para quitar nombres antipáticos, dos o tres huéspedes temerosos.
De pronto, dos siluetas se dibujaron al lado de la Diputación. Una con mono azul del teniente de Asalto Alejandro García Menéndez, hasta hacía poco de esta plantilla de León y otra del ayudante del general
Caminero, un fuerte comandante de Caballería.
Subieron, saludaron a los guardias de Asalto y se encaminaron al cuartel de éstos. El teniente nos saludó en la calle de Cervantes.
— ¿Qué hay? preguntó el periodista.
— Vamos bien, contestó el que hacía de jefe de aquella infame tropa revolucionaria y destructora.
Muy bien, pero... el tren rojo no pasaba para Valladolid, como habían anunciado por la mañana y Gómez Caminero, ni siquiera atacaba aquel puñado de hombres del cuartel del Cid y a aquellas pobres fuerzas de la Benemérita y de Asalto que en total no sumaban la quinta parte de aquel "escogido" ejército marxista: la flor y nata de la Asturias roja...
Se les entregaron, a fin de que se alejasen de la amenazada capital, unas docenas de fusiles, y sobre las siete y media de la tarde, el tren rojo arranca de la estación del Norte con dirección a Astorga, para ir por Salamanca y Medina a tomar Valladolid y de allí a Madrid. Ahora que los del Regimiento de Infantería de Toledo, de guarnición en Zamora cambiaron el viaje. En Benavente dieron a los rusos-astures una soberana paliza: volvieron éstos a Astorga y de allí a Ponferrada, donde los guardias civiles del heroico capitán Losada escribieron la primera página ¡gloriosísima! y sangrienta del Movimiento en León. Comparable al sitio de Toledo, a Oviedo, etcétera, aunque sin tal duración. Pero algo de epopeya.
El jefe de la columna asturiana fue hecho prisionero. Días más tarde, en Puente Castro, presenciamos también la primera ejecución de los fallos de la Justicia Militar. Uno de los tres pasados por las armas fue el teniente García Menéndez. Cuando el jefe del piquete del también teniente de Asalto González irguió su figura, humeante aun su pistola de gracia para lanzar un ¡Viva a España! yo pensé en toda aquella farsa de aquellos pobres hombres de mitines en el Principal, banquetraido “esto” que tenía que
traerlo, y pensé: —¡ Ahora va de veras!...
Así empezó el Movimiento Nacional en León. Acordaos de ello los impacientes y roñosos de hoy, que no salisteis aquellas horas a la calle. Y hubierais dado la mitad de vuestra hacienda ante aquellos dinamiteros, borrachos de “vino de tierra”.
Recordad esto y no os impacientéis; hoy, como ayer, os repetimos aquellas palabras de la hoja “Diario de la Ciudad de León” que tiramos a la calle, como pudimos, el día de Santiago:
"El Movimiento tardara mátes con discursos en el Bar Azul de todo "aquello" que había o menos, pero triunfará"
Carmelo Hernández
Hace un año
LEÓN
En los primeros disparos
Cúmplese hoy el primer aniversario del triunfo del glorioso Movimiento Nacional. Hoy hace un año, salió el grito de ¡Arriba España! Empezaba en la Península el alzamiento nacional con el brío y el entusiasmo inmarcesible, con el coraje patriótico propios de los hijos de España. El alzamiento, que se encendía como una yesca prendía en todos los corazones llenos de efusión y de sangre española. Era la España ultrajada por tanta vergüenza y tanta indignidad por los Casares Quirogas, los Galarzas y los socialeros, la que se levantaba bajo el grito recio y limpio de ¡Arriba España!
León vivía los momentos más trágicos de su historia. Los mineros marxistas de Asturias campaban en la ciudad el día 19 de Julio, imponiendo el pavor y las amenazas de una revolución caótica.
Toda era espesísima congoja la que se cernía sobre la ciudad. Las gentes, atemorizadas, vivían las horas y los minutos más inquietos de su vida, recordando el octubre rojo invadido de locura y de impiedad. Los momentos de España eran de una desazón y de una incertidumbre espantosa. Todo el ambiente era de un fatídico vivir, esperando lo que el transcurso de las horas había de traer.
Al fin el día 20, a las dos en punto de la tarde, sonaron los primeros disparos de nuestro Ejército que se levantaba para despejar la trágica incógnita en la que estaba el pueblo sumido con la mayor zozobra.
Al grito de ¡Viva España!, ¡Arriba España!, León iba pasando al Glorioso Movimiento, a su salvación...
Radio León, que tanto ha sabido poner a la noble causa de España desde el primer momento, daba la noticia a través del espacio a todos los hogares leoneses para que secundaran al heroico Ejército, que se había alzado en noble causa para la liberación del pueblo y la reconquista de la Patria.
Fueron momentos de una emoción indescriptible. Los nervios tirantes como hilos de acero y los corazones queriendo salirse de sus pechos, vibraban ante el micrófono, llevando a toda la provincia la decisión grande y gloriosa de nuestro Ejército.
De la calle llegaban a nuestros oídos los ruidos de los disparos decisivos que se iban abriendo el camino de la Patria Una, Grande y Libre.
A las cuatro de la tarde, el valiente capitán Cosido, ya muerto por Dios y por la Patria en la reconquista de Vizcaya, dirigía por el micrófono de Radio-León, el primer saludo oficial al pueblo de León. La emoción iba en crescendo. El invicto capitán supo poner en sus palabras el corazón de España y su corazón de español.
Más tarde, a las seis y media, el teniente de Asalto, camarada González, uno de los principales promotores del alzamiento en León y que tanto ha salido y está dando por España, dirigía al pueblo desde el micrófono de Radio, frases que tanto elevaron el espíritu, tan llenas de fortaleza y de patrio amor, que León ya era todo él y la Causa Nacional era de España. Frases como esta: «Leoneses: España espera de vosotros cuanto seáis de españoles. Cuanto más quiero en León de su historia, es la figura de Guzmán. Si mañana no fuerais todos de España, poniendo en los balcones el lienzo blanco de la paz y de acatamiento, volaría su estatua, porque no sería digna de él.
León era de España. Y desde este momento hasta hoy y para siempre hará honor a la historia poniendo en esta reconquista su más alto linaje, su sangre y su amor.
J. CANTALAPIEDRA BARÉS
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 208, 20 de julio de 1937, León
El 18 de julio en León
¡BELLO ACIERTO!
Magnífico acierto el del sitio y la hora elegidos para la celebración de la misa de campaña para dar gracias al Dios de los ejércitos por las victorias obtenidas y pedirle por España.
Acierto por el lugar, el pintoresco jardín de San Francisco y acierto por la hora temprana porque en la nueva España, los modos castrenses y monásticos de que habló el Ausente deben hacer verdad la frase de Cervantes: "quien no se levanta con el sol no disfruta del día".
A estos aciertos se une el artístico del altar, sencillo, bonito, adecuado. Una gran bandera nacional de fondo, la de Falange al lado del Evangelio y la blanca tradicionalista con la cruz de Borgoña al lado de la Epístola, unidas las tres. Sobre el amarillo del fondo una sencilla cruz, grande y oscura. Y luego flores, tiestos, granadas, obuses, y dos cañones y dos morteros que hacen guardia. Todo ello tiene como fondo la fronda de los corpulentos castaños del lado del mercado de ganados en la glorieta del jardín. Al lado de la Epístola, una tribuna para la Sección Femenina de F. E. T. y demás señoritas y señoras invitadas. Y al lado del Evangelio la tribuna de autoridades. Ambas,cubiertas con colgaduras de Falange y adornadas con guirnaldas de follaje, en ambos extremos además tienen altos gallardetes con
las banderas de las naciones amigas. Delante del altar, hay abundantes sillas.
El conjunto ha gustado mucho y felicitamos a los directivos militares, municipales, monjas del Hospicio y obreros del Ayuntamiento que lo realizaron.
AUTORIDADES Y REPRESENTACIONES
Asisten a la misa el Sr. Gobernador militar, coronel Múgica Bohigas, con sus ayudantes y Estado Mayor, Gobernador Civil, Vicario Capitular de la diócesis, Presidente de la Diputación, Alcalde de la capital, fiscal de la Audiencia, juez de Instrucción, directores de las Escuelas Normal, Veterinaria y Comercio, y de la Prisión provincial, inspector de Primera Enseñanza, Sr. Rivero, delegado de Abastos, comisario de Policía, secretario accidental del Gobierno Civil, etc.
....
Del frente de León
Otro gran fracaso de los mineros asturianos
Un nuevo y fracasado ataque de los rojos asturianos, ha venido a romper la calma reinante en el sector de Somiedo. Tranquilidad debida, probablemente, al quebranto sufrido por el enemigo en la reciente conquista del Puerto.
Los mineros asturianos, quizá con el propósito de conseguir algún pequeño éxito que pudiera disminuir el desastre de la derrota sufrida en Somiedo. Han realizado algunos ataques contra la posición de Peña Salgada; pero todos sus esfuerzos sólo sirvieron para cosechar un nuevo y desastroso fracaso, con lo que el enemigo ha venido a aumentar la lista de derrotas sufridas en el frente asturiano-leonés.
Los ataques dirigidos contra la posición de Peña Salgada han sido duros, y con gran lujo de elementos bélicos, empleando en la ofensiva numerosos morteros y lanzabombas, así como tres "flamantes" batallones de mineros.
La última embestida contra Peña Salgada (que fue precisamente la más fuerte), se realizó aprovechando la oscuridad protectora de la noche, y este desesperado esfuerzo de los rojos fue rechazado con toda energía por nuestros bravos soldados que, percatados de la proximidad y propósitos del enemigo, les dejaron acercarse hasta nuestras alambradas, para recibirles con un nutrido fuego de ametralladora y fusilería, que causó gran número de bajas, en los batallones mineros, entre los que parece figuraba el batallón de "La Pasionaria".
El desastre sufrido por el enemigo ha sido rotundo, demostrándose una vez más, la esterilidad de estos coletazos rojos, que, más bien que ataques, son convulsiones agónicas, producidas por su grave situación, en los frentes asturianos.
Una columna procedente de Somiedo alejó al enemigo de las posiciones que tenía, causándole varios muertos.
En nuestras alambradas, fueron encontrados siete cadáveres de milicianos rojos, siete fusiles tres pistolas ametralladoras y diecinueve bombas de mano. Durante el ataque a Peña Salgada, se han pasado a nuestras filas dos milicianos, que confirman el gran descalabro sufrido por el enemigo afirmando que en este ataque tuvieron los rojos 35 muertos y 150 heridos. Por nuestra parte el número de bajas ha sido insignificante, y la mayoría son heridos leves, no obstante emplear el enemigo en su ataque numerosos morteros del 81.
Como detalle de interés, no quiero omitir que, durante este ataque, tomaron parte tres batallones de mineros que les decían a nuestros soldados: "Tomasteis Somiedo porque estaba defendido por un batallón de reclutas; pero a nosotros no nos venceréis, ya que somos mineros de Sama de Langreo". ¡Pobres rojos! ¿cuándo se darán cuenta de la diferencia que existe entre nuestro Ejército victorioso y ese conglomerado desastroso que forman sus milicias que no hacen más que perder terreno y apuntarse nuevos fracasos?
En las demás posiciones del sector de Somiedo, la tranquilidad y la calma han sido completas. Puede decirse qué el único enemigo de nuestros bravos soldados es esa niebla espesa, fría y húmeda, tan peculiar en este puerto en todas las épocas del año.
Salustiano Orejas
Puerto de Somiedo, julio de 1937.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 209, 21 de julio de 1937, León
El Alzamiento en León
LA MAÑANA DEL DÍA VEINTE
El aniversario del Alzamiento Nacional por lo que toca a León es hoy martes veinte, estas líneas escribo. Yo dije que el domingo diecinueve de Julio del año anterior, la escasa guarnición leonesa se vio “emparedada”, digámoslo así entre la avalancha de mineros de Asturias y la falta de apoyo y aun de noticias de Castilla.
Pero llegó el lunes veinte. ¡Qué día! Permitid algunos recuerdos de lo que vi en mi zascandileo periodístico.
La huelga general era... .obligatoria! Cuando llegué a la redacción de “La Mañana”, donde entonces: trabajaba, estaban tirando “Hoja Oficial del Lunes” y dijeron que se trabajaría en el otro, periódico... para el periodismo, sin embargo, no hay nunca descanso. Ha de recoger y guardar las impresiones hasta de los días de huelga, claro es. “Aquello” aun cuando ya veía cómo en principio de un movimiento formidable podía durar poco. ¡A trabajar, pues!
EN LA ESTACIÓN
Bajé a la estación. Obreros y empleados rojos, hacían el escaso servicio de la mañana, paralizados ya muchos trenes, armados de carabinas, escopetas, pistolas... Eran las armas de la Estación. Aquello era grave.
Pero me llamó aparte el activo “fascista” inspector de Tracción, D. Andrés González. Y me dio una noticia formidable. El tren rojo asturiano del día anterior no había podido pasar de Benavente. A aquella hora estaba entrando en Ponferrada.
— ¡Estamos salvados! le dije. El Ejército cierra desde la frontera franco-navarra hasta Portugal. ¡Estamos salvados!
— ¿Si eh?... En aquel momento irrumpieron donde nos hallábamos cuatro bigardos enormes, armados de carabinas. Menos mal que se contentaron con darnos los buenos días.
EN LA CALLE
Gente inquieta, temerosa, con dudas paseando por la calle de Ordoño. Tiendas cerradas, sirvientas que se proveen de víveres, guardias civiles a la puerta del cuartel que preguntan al periodista, curiosos y expectantes. ¿Que va a pasar en León?
Subí a las oficinas de la Guardia Civil. Buenos amigos del periodista, empezaron también a preguntarme... El capitán Venta, por aquellos días, hizo correr la especie de que yo tenía una novia (por lo menos) en Teléfonos y que, por eso, sabía la mar de cosas...
(Y entre el travieso capitán y el periodista, que imitaba un poco la fantasía de Queipo de Llano, le dábamos al teniente coronel “rojo” cada susto que cantaba el Credo. A la tercer jornada metí yo la “columna Franco” en Despeñaperros!.. Y decía muy serio el capitán Mosset, que en punto a guasa también tiene algo: —¡ Pues ya estarán a las puertas de Madrid!
Por la Gran Vía, hacia la maldicha (que es igual que maldita) Casa del Pueblo, grupos de mozalbetes, de obreros y aun de mujeres. De los pueblos de alrededor, éstos que toman de la ciudad lo malo del café, del cine de la moda y pierden las sanas costumbres campesinas y son algo insípido e híbrido, venían gentes y más gentes...
En el cuartel del Cid, vigilancia y expectación. El teniente de Asalto don Andrés González, de paisano y el teniente Revuelta me encontraron a la puerta. Como todos, pidieron noticias... Igual me ocurrió en el próximo cuartel de Asalto y en el mío, como yo le llamaba, que era el de los guardias civiles jóvenes de San Isidoro, tan próximo a mi casa.
Ansiedad por todas partes. El comandante Osset iba y venía del cuartel del Cid al de San Isidoro, impaciente y nervioso. Yo me bajé otra vez a Ordoño II. Iban los grupos y venían bacía la Casa del Pueblo. Como entre ésta y el Gobierno Civil había un gran movimiento, no dudé más y me metí...
EN EL GOBIERNO CIVIL
Lo cual fue meterme en la boca del lobo. Estaba aquello abarrotado, sobretodo de obreros que actuaban de enlaces. Saludé a los pobres guardias de Seguridad, estos veteranos, protagonistas del peor episodio de aquel día. ¡Y todavía no han desfilado por esas calles, ni hubo un aplauso para ellos y su labor callada de este año!
El suboficial, D. Santos González ve a venir la tremenda sin poder hacer nada. Estaban emparedados, como le dije en broma para animarle... ¡Pero saldría!
Subí a Secretaría. Tuve que abrirme paso ente grupos que me miraban hostiles y recelosos. Había tres sargentos. Confieso que cuesta sonreír en ocasiones. Pero sonreí y entré a las oficinas, como si fuese a hacer información...
El comisario de Policía y algunos oficiales del Gobierno estaban mano sobre mano. Bromeé un poco con todos y la señorita de Cuevas, eché un vistazo por los balcones y me dispuse a salir.
Uno de los sargentos, Montenegro, amigo de la infancia, me vio y vino hacia mí. Me saludó alegre, me dio la mano, y vi que aquella gente creía en el gozoso triunfo de su causa. Pero todos los que allí estaban han pagado ya con la vida la persecución insensata.
Como Pedrosa, el sastre y Custodio, el barbero, a quienes encontré en el primer rellano al bajar y que me saludaron un poco sorprendidos... Aunque el mas sorprendido era yo de haber salido con bien de aquellas garras... ¡Como estaba el Gobierno Civil al mediodía!...
Cuando volví al cuartel de San Isidoro, ocurrió el primer incidente del día. Hablaba yo con el suboficial D. Paco Martínez, jefe de la fuerza, un andaluz muy saleroso y con Eladio el simpático sargento. Lamentaban no recibir ayuda ni consejo del teniente coronel. ¡Bueno estaba este señor!... Y esperaban, confiados y serenos, las cuatro de la tarde, en que empezaría la juerga, según decían los del
Frente...
Bromeaban los guardias jóvenes con las chicas cuando un muchacho fascista, por cierto con un brazo medio inútil, llegó en carrera desenfrenada, sin aliento, por la cuesta de San Isidro. Venía perseguido por un enorme grupo de rojos. Y, lo que es peor, por un alférez de Asalto, con cara de bruto y dos guardias de Asalto. Sacó el suboficial la pistola. Agarraron los chicos los fusiles con tal gana de pelea, que se formó un pelotón de tres en fondo en la misma puerta, y entró el fugitivo, que no podía ni respirar.
Se retiraron a distancia prudente los perseguidores, mas el alférez y los guardias de Asalto avanzaron para coger la presa... Esta se les escapó de las manos por mucho que porfiaron. La Guardia Civil dijo que se hacía cargo del fugitivo y allí quedó... allí le dieron de comer y de allí salió pasa andar a tiros como todo un buen patriota.
Era ya la una y cuarto. Los guardias se ponían a comer, y yo pasé a mi casa a lo mismo y a esperar a las cuatro de la tarde.
Pero se adelantó la hora, como se verá en el capitulo siguiente.
LAMPARILLA
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 209, 22 de julio de 1937, León
El Alzamiento en León
La tarde del veinte
¿Una traición?
Seguiré refiriendo lo que sé
por mí de aquella interesante
jornada del alzamiento de la
guarnición leonesa, tan escasa
que no llegaría a los quinientos
hombres entre Asalto, Guardia
Civil y Regimiento de Burgos.
Acabé de comer y, para estar
preparado al "baile" de las cuatro de la tarde, me eché la siesta.
Acababa de cerrar los ojos,
cuando, en medio de las tinieblas de la habitación, sentí unos
brazos que me agarraban desesperadamente y vi una sombra que se agitaba convulsa. Era mi
hermana que había cogido tal
miedo que llegaba a la locura.
Entre lágrimas, sustos y sobresaltos, me explicó que volaban
aviones, que oían bombas, ametralladoras, y que la aviación
tiraba ¡¡allí cerca!! Yo, que no
oía nada, en mi absoluta sordera, que creía cosa fácil relativamente derrotar aquellas turbas, porque no tenían espíritu ni agallas, ni "estilo" revolucionario. (¡Oh estos obreros leoneses comodones y tardos, y los de la
vaca y el "prao" en los pueblos
cercanos!) y que sabía que en la base de Aviación había ciertos
elementos poco adictos y trabajos de zapa, así como la situación del aeródromo en terreno
comunista, temí una terrible traición y allí acabó el periodista
curioso para dejar paso al indignado patriota.
—¡Déjame salir!... dije furioso al ver cerradas las puertas, como si yo sólito ¡ ¡ y sin armas! pudiese solucionar aquello...
Pero el ataque de miedo de
mi hermana era terrible, como
epilepsia, como locura; por ello
comprendí la angustia de muchos hogares en aquellas horas... Cada vez que sonaba una
bomba mi hermana se tiraba de
los cabellos, se acurrucaba... cerraba las ventanas más...
Afortunadamente, había sobre una
mesa un plato de ciruelas y "perucos" que nos habían regalado.
Aquello fue mi entretenimiento
allí encerrado.
Cuando, acabada la fruta,
pude asomar la nariz, dos soldados de una patrulla de retaguardia se echaron el fusil a la
cara al oírme correr la puerta.
¡No hay ratón, viendo al gato,
que meta la cabeza en el agujero tan aprisa como yo metí la
mía en el portal!
LA CRUZ ROJA
Por fin, salí; había una humareda azul y pegajosa de la
pólvora; pasaba una ambulancia de la Cruz Roja y al ver que eran sólo tres para la camilla
agarré el otro palo. Se habían ya
recogido algunos heridos. Seguían oyéndose tiros y bombas. Estaban tomando el Gobierno
Civil.
Y entre la ansiedad de la tragedia y la solemnidad imponente de la hora, por las calles desiertas de Santa Marina, la nota
estrepitosamente cómica.
El que llevaba la mochila del
botiquín para que curase Aurelio Fernández, el practicante,
sostenía un largo palo con la
bandera protectora de la Cruz
Roja.
El hombre, muy poseído de
su papel, y receloso de lo que pudiera haber por las calles, llegaba a las esquinas, apoyaba el palo en la cadera derecha, se paraba, juntaba los píes, metía la
bandera hacía la calle que íbamos a pasar y la corría en redondo, para volverse hacia la
ambulancia, en un simulado pase, tan gallardo, tan saleroso y tan torero, dentro de su prosopopeya, que yo no pude menos
de proclamar: ¡Ni Belmonte!...
Más justo es consignar que la primera salida de la Cruz Roja fue interesante y fructífera.
EN LA COLEGIATA
Pero al poco rato ya estaba
el periodista entre beligerantes. El coronel Sr. Lafuente y el comandante Arredonda, en la Plaza de San Isidoro, daban órdenes
para la comunicación con la base
de Aviación y saber lo que ocurría por el Ensanche. Para defender la Colegiata, se habían instalado en las murallas y la torre era un magnífico observatorio. Ni corto ni perezoso, allá
me subí con el simpático y joven teniente Hernández, que
reía como chiquillo en alegre
juego...
Al entrar a los cubos de la
muralla, aquel valiente y noble
suboficial que era (¡Dios le tendrá en su gloria, por bueno y
gran militar!) José Alvarez,
muerto en Somiedo, me dijo:
—Agáchese y corra, aunque parece que ahora no tiran.
Lo hicimos así, visitamos los
pequeños puestos de los cubos,
el teléfono portátil con el aeródromo que ya funcionaba, y
después de ver disparar, porque
los chicos, con un entusiasmo de
"flechas" en excursión, sólo querían darle gusto al dedo subimos a la torre...
Allí faltaba tabaco y sobraba
humor y gana de pelea. Vimos
la toma de la Casa del Pueblo
y pasar una sección, a la carrera,
para San Marcos, por la Plaza
Circular .. Pero el teniente Hernández, al ver aquel puñado de
hombres, para empresa de tal
magnitud, dijo:
—Debían ustedes tratar de que vaya gente al
cuartel. Sólo el Ejército, no puede con todo. No hay gente.
El muchacho tenía razón. Hay que hacer justicia a los del Regimiento de Burgos, a los de Asalto y Guardia Civil; eran poquísimos para tanto como había que atender... Pero abajo estaban hombres como el teniente de Asalto don Andrés González. Había ya recuperado el uniforme y con una "cacha" mejicana, pintarrajeada chíllonamente recorría las calles con una partida de bravos mozos de Asalto. Hombres como los capitanes Cosido, que tomó la Casa Roldan con la radio, el capitán Herrero, que se
hizo dueño del Ayuntamiento, siendo el primer "alcalde" del Movimiento, y a quien, por cierto, atendía solícitamente como sí no hubiese roto un plato, un empleado condenado y muerto después por un Consejo de Guerra, el capitán Moral, que tomó el Gobierno Civil, etcétera, etc.
EN EL CUARTEL
Bajé hacia el cuartel. Carlos A. Cadórniga me abrazó a la puerta con alegría. Algunos falangistas y paisanos en general prestaban ya servicio de calle, entre ellos el veterano suboficial Serranos, jefe de Milicias de F. E., que fue el primero en presentarse. Por cierto que tan pronto le veíamos aquellos días de militar como de paisano, como mitad y mitad. ¡Vaya guardarropa el del amigo!
En el cuartel se agrupaban unas dos docenas de paisanos, entre ellos algunos "creciditos" como el Sr. Roa de la Vega, y algún sacerdote. Se les tomaba el nombre, se les daban gorros y chapas de correajes, y fusiles, cuyo manejo aprendían algunos allí. Un cuadro pintoresco y animado pues todos se hallaban poseídos de gran espíritu.
¡Había sonado la hora ansiada! No quisieron darme fusil, por la sordera, y como algo había uno de hacer para ayudar, y, sabido el llamamiento que por radio acababa de hacer el teniente González al paisanaje, agarré al compañero de "Diario de León" Marcelo Fernández y a Julio Valdés, redacté unas proclamas que escribió éste a máquina, nos felicitó el coronel Lafuente al leerlas y allá nos fuimos por esas calles de Dios, con un frasco de goma a pegar pasquines, ya que no podíamos pegar tiros, y a enterarnos de las ocurrencias que verá el lector, si tiene paciencia de seguirme.
Lamparilla
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 212, 23 de julio de 1937, León
El Alzamiento en León
La toma del Gobierno Civil
Una ciudad "nueva" se presentaba a la vista de los tres voluntarios que habíamos escogido el pegar proclamas para instar al paisanaje a acudir al
cuartel.
La calle Ancha, desierta, bajo
aquel sol de la tarde estival, sin un balcón abierto, sin una sombra de vida, la plaza de San Marcelo, cerrado todo, con el espejeo de los vidrios de los kioscos que relucían en el suelo, recién rotos por las balas, Santo Domingo, Ordoño II, desierto,
desierto... imponían cierta tristeza.
Algún cable eléctrico caído
aumentaba el patetismo del cuadro.
En el Bar Central, vimos la
primera señal de vida, que lo
era también de guerra. Los soldados que habían tomado el Casino vigilaban desde los ventanales del café. Era una estampa
guerrera interesante. Los muchachos "uniformados'' entonces, con casco de acero, pues después ya es sabido la variedad de
uniformes que hubo, daban ya
la sensación de un Ejército en
funciones bélicas; arma al brazo, en espera larga, en el sitio que sea...
Pegamos unas proclamas por Santo Domingo, con bastante poca seriedad por cierto, ya que
el frasco de goma que, por no tener engrudo, cogimos se nos
desparramaba sobre los trajes,
y a estos, a las manos y hasta
los lentes se nos adherían los
pasquines en escenas de película cómica, y nos largamos al
Gobierno Civil, con los brazos
en alto y un pañuelo, (que Valdés sustituyo por los mismos pasquines) conforme nos habían dicho.
Yo penetré en Casa Goyo, a
ver a un señor. Puedo decir que no es cieno que esta casa, la de
Luben y la de Roldan son las de mas vecinos de León. A no
ser que aquella tarde hubiesen
salido a tomar el fresco. Porque
la verdad es que aquello parecía desalquilado, muerto, sin gente...
Hago excepción, en Casa Roldan, del piso de la Radio, e "islas adyacentes".
La fachada principal del Gobierno Civil estaba adornada de vidrios rotos, trozos de persianas, cascotes y otros "adminículos”. No eran, ciertamente, grandes los destrozos, pero aun así y todo, añadido el negro de los explosivos en la pared y los agujeros de los impactos, impresionaba fuertemente el serio caserón.
Salían de éste, en aquel momento, el comisario de Policía Sr. Rey, a quien dejé allí por la mañana, algunos agentes, el suboficial de Seguridad D. Santos González con el cabo Villar, a quienes les tocó actuar de jefes de la pequeña fuerza (doce guardias) y el cabo Jalón, con el comandante Berrocal, asesinado en Somiedo después, que se había hecho cargo de los servicios del Gobierno.
Nobles personas el suboficial y los cabos, apreciables amigos, nos dimos un cordial abrazo de
satisfacción... Jalon, que no había estado en el Gobierno reía y no cabía en el pellejo. Yo le dije: “Hace mucho calor, pero se respira...” La frase hizo fortuna,
En aquel momento la presencia de unos marineros de la Armada dio lugar a un episodio que contaré, Dios mediante. Vayamos ahora a:
La toma del Gobierno Civil.
La compañía del capitán del Moral se había encargado de este cometido y lo cumplió exactamente. Es una pena que falten algunos datos de estas cosas, pero allá va lo que me han dicho y sirvan estos míos para que otros escriban sus recuerdos y, así, completar las informaciones.
El capitán desplegó sus fuerzas. Unos soldados subieron a casa del Sr. Costinas y frente a las habitaciones del gobernador empezaron a tirotear los balcones por los de la casa citada. Utilizaron también bombas de mano. Otros hicieron lo propio con las dependencias de oficinas por la parte de las Recoletas. Y otros, por la calle de Fajeros, desde la casa de Dª. Antonia Hevia.
En casa del Sr. Costinas instalaron, además, una ametralladora, o fusil ametrallador, tirando la barandilla del balcón para que no estorbase. También algunos soldados disparaban desde la Avenida del Padre Isla.
Es decir que los del gobierno estaban copados, rodeados.
Habría en el edificio mas de sesenta personas, entre ellas los capitanes Rodríguez Lozano y Bernardo, unos guardias de Asalto, rojos, y los pobres guardias de Seguridad que, con los agentes de Policía, adictos, se encontraron entre la espada y la pared...
Porque ponerse contra los del Frente Popular no podían, por su escaso numero y contra el Ejército ni podían... ni, sobre todo, ¡querían!... ¡Buena voluntad tenían los de Seguridad, en general a los marxistas!
Los chicos del capitán Moral empezaron el “fregado” con un entusiasmo loco. Igual que todos los muchachos del Regimiento de Burgos, por supuesto, que parecía que les pagaban un tanto por disparo... Y eso ¡ que la oficialidad anduvo parca para no derrochar municiones.
Los del Gobierno abandonaron oficinas, dependencias y habitaciones particulares por huir de aquella lluvia que atravesaba los tabiques. Como que hace pocos días, al entrar con el Delegado de Prensa a dejar unos libros, para “Lecturas del soldado”, en una habitación interior del Gobierno vi, sorprendido, impactos donde menos pudiera creerse.
Guardias, policías y los rojos que había allí se refugiaron en el hueco de la escalera y algunos se acurrucaron bajo esta, como pudieron. ¡Y bala va, y bala viene!...
En aquel trance, se le ocurre al agente de policía Sr. Becerril prestar un honroso y humanitario servicio, muy propio de su instituto y de sus sentimientos: salvar a una mujer inocente que se había metido.
Pero los del capitán Moral que no sabían que pasaba en el Gobierno, pues nadie se movía y era de temer una celada de aquella tranquilidad, seguían tirando. Y una de las bombas, diestra y fuertemente lanzada ¡vive Dios!... porque buen brazo tuvo el granadero, fue a caer al patio donde estaba el amigo Becerril.
No le mató por milagro, le hirió levemente y quedo sordo del oído izquierdo, y momentáneamente desmayado. El suboficial D. Santos, igual que otros, le creyó muerto y le rezo una oración entre lagrimas...
TODA UNA BANDERA
La cosa se ponía demasiado seria.
Llevaban así dos horas y los del Frente Popular, sin saber que hacer, acurrucados de nuevo, no se rendían. Y los del capitán Moral ¡¡Tampoco se rendían de tirar tiros!!... Y hartos de aquello, en un momento de descuido, y jugándose la vida quizá, por algún disparo de los de dentro, o por alguna bomba de los de fuera, tres guardias de Seguridad, Diego Rabanal, Lope (¡buen nombre español!) Álvarez y Ángel Martinez, entraron en la inmediata oficina de ellos, cogieron la escoba, ataron un pañuelo y lo sacaron y agitaron por cima de la tapia frente a las Recoletas.
Cesó el fuego; avanzó el capitán Moral pistola en mano, abrieron los guardias y poco después, brazos en alto, salían los dos capitanes del Frente Popular, Alfredo Barthe el abogado, “Chomin” Rey, y los restantes paca la cárcel...
Ya sabéis lectores, lo que fue la bandera blanca del Gobierno Civil de que tanto se habló los primeros días: la escoba de los guardias de Seguridad.
Lamparilla
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 212, 24 de julio de 1937
Del frente de Lillo
La Misa en el parapeto
Es una mañana luminosa, cálida, parada. El sol ha hecho del cielo un inmenso cristal bruñido, del cual saca relumbres de azul. Y triunfa él solo, regiamente en resplandores de alborozo.
Fascinadas por la gloria del cielo, las montañas se aúpan en afanes de superación, por llegar al gozo de poseerlo. Y se hincan en el azul, perfilándose seriamente en la luz del día.
Peña Águila. Mil quinientos metros sobre el mar. Sus picos rocosos, duros, debieron ser fuertes dardos de piedra disparados por manos de gigante. Y se quedaron a medio camino, enraizados en la entraña misma de la tierra.
Allí, soldados y falangistas vigilan y defienden la frontera de España. Su rostro se ha endurecido, cara al peligro y con la aspereza de estas sierras bravías, asilo de asechanzas. Su espíritu se ha estilizado en las eternas jornadas de cavilación, fusil en mano y alerta la mirada.
Hoy es domingo. Y media la mañana transparente llena de sol.
Junto a un roble centenario, de corteza dura, ramas sarmentosas y hojas viejas, se improvisa un pequeño altar. No tenemos lujos de artísticos retablos, ni risa mentida de flores en maceteros. Vivimos la guerra plenamente, y el altar lo construyen soldados con cajas de munición vacías y una camilla santificada con sangre de héroes. Un alférez saca de su pecho un Crucifijo, regalo de su madre al partir... y lo cuelga del roble. A sus pies el rostro en dolor, dulce de ternura, de la Virgen del Perpetuo Socorro.
Tampoco hay bronces en el alto campanario. Pero la diminuta campanilla y los enlaces van reuniendo a los soldados y falangistas. Retoza la juventud por riscos y entre la maleza florida Otros se quedan en los puestos, firmes, recortados ea un nimbo de luz. Desde allí mirarán con dureza al enemigo, y místicamente al altar.
Así, el capellán empieza el sacrificio de la Misa. En medio de los aromas vírgenes de la tierra y el júbilo de todas las criaturas. Bajo la bóveda brillante del cielo. Bajo la sombra cansada del roble. Cuando el silencio ha ido ondulando hasta cerrarse en el último parapeto, hasta morir en la última curva de la trinchera.
Los rostros morenos, tostados de sol, se emocionan. Algunos labios se mueven, temblorosos de plegarias. Todos los corazones rezan.
Las golondrinas vuelan piando alrededor del altar. Y la proyección de su vuelo se rompe rauda y graciosa en e sol de los blancos manteles. Las hormigas corren perseguidas por no sé qué misteriosos duendecillos. Alguna, más confiada, se acerca hasta los mismos corporales; para, arrepentida de su atrevimiento, vuelve humildemente por el mismo camino.
En el momento de la Consagración, rendidos las rodillas y los pensamientos, una
avecilla, invisible entre el follaje del viejo roble, se deshace en melodías que parecen sobrehumanas. La emoción
del momento es tan grande,
que llena de piedad todos los
espíritus. Alguien suspira doloridamente: le ha herido tan
agudamente como si estuviese en carne viva toda su alma.
Sigue la Misa, Los ojos se
recrean con la vista del paisaje grandioso. Montañas con blancos manchones de nieve, azuladas en la lejanía. Torrentes, más que ríos, murmurando, sordamente, en la hondura de los valles ¡Como se ensancha el alma y se eleva, se eleva hasta Dios, hasta ese Dios de bondad que hoy tenemos tan cerca, aquí, en la sombra de este roble añoso, bueno.
Al terminar la Misa, el capitán, alto, enjuto, cuerpo y alma de Quijote, se vuelve.
hacia sus soldados:
-. ¡Muchachos! Habéis cumplido con el deber de cristianos. Ahora a seguir cumpliendo con el deber de soldados.
Y las innumerables chozas rúnicas, los riscos, las laderas, las sombras de los árboles, todo se llena de la alegría sana, regocijada, juvenil
de los defensores de España.
C. A. YÁRRITU
Redentorista
Capellán de F . E . T. en Lillo
El Alzamiento en León
La toma de San Marcos
¡Cuántas cosas pudiera decir
el periodista de sus recuerdos de
aquellos días en León!
Pero voy
a terminar pronto por no cansar a los lectores y porque por
otra parte no puede ser, todavía,
por falta de datos, tan exacta y
completa como lo exige la veracidad la narración de tales sucesos.
Desde las dos de la tarde, además, hasta las cinco, León fue
un verdadero lío de patrullas,
tiroteos sueltos, pequeños episodios difíciles de anudar si no
se dedica uno a ello. Y como yo
no he tenido ocasión, me dedico
a mis recuerdos.
Dónde más duró la lucha, y más intensa llegó a ser, fue en San Marcos, punto en que iniciaron los marxistas la "juerga" y lo que dio ocasión a que el Ejército se echase a la calle rapidísimamente. No era cosa de dejar ni un minuto a la capital
en poder de las turbas.
Estas fueron concentrándose en San Marcos, especialmente.
Aparte, en la Casa del Pueblo,
tan cercana, y en el Gobierno
Civil, como se dijo, había gente revolucionaria armada.
Obligaron a los empleados de
la Escuela de Veterinaria y familias a encerrarse en sus habitaciones y empezaron a meter ruido con bombas y cartuchos de
dinamita que tiraban contra el
jardín. Aparte, los disparos que hacían con pistolas, principalmente.
Había entre ellos algunas mujeres y dice un testigo presencial que eran las peores.
Pero sobre las siete de la tarde, con cuatrocientos cincuenta combatientes que había dentro, y haciéndoles sesenta prisioneros, cifra esta última igual, por lo menos, a los atacantes un pelotón de guardias de Asalto, mandados por el cabo Guzmán, una sección de la Benemérita al mando del entonces brigada D. José Salcedo Ortega, jefe del puesto de Santa Lucía, y otra sección de tropa que mandaba el entonces teniente Revuelta, del Regímiento de Burgos; era la fuerza "española" dueña del hermoso edificio.
De éste había salido chusma, de Trobajo y otros pueblos especialmente, para atacar el Gobierno Militar. Un grupo de
cuatro o cinco maestros (¡oh la
Pedagogía laica!) tiroteó desde
un "chalet" de la calle de Ramiro de Balbuena, al mismo
tiempo.
Pero al ver avanzar el pelotón del cabo Guzmán y lo que
pasaba en el Gobierno Civil huyeron por Suero de Quiñones ¡echando bombas!... (y no es frase figurada). Sino real, puesto que toda la
calle se llenó de humo y explosiones de dinamita...
Sobre las tres y media de la
tarde, seguramente por la "pereza" del teniente coronel, salió
la citada sección de la Guardia
Civil hacia la Casa del Pueblo
y más tarde a San Marcos, pues
los del "hogar del proletariado"
se escabulleron del nido a las
cuatro para refugiarse todos en
la noble mansión santiaguista.
Quien conozca ésta podrá apenas concebir que la abandonaran tan pronto, con tan pocos
atacantes, aun cuando éstos,
justo es reconocerlo, se batieron
como si estuviesen en ejercicios
de fuego en la Candamia... El
propio Pepe Gracia mostraba
una fotografía de guardias civiles disparando, de pie y sin
parapeto ninguno y los vecinos del ensanche me contaron la serenidad de los defensores de la Causa nacional.
Parece mentira, digo, que
abandonasen el edificio, pues
tiene sitios magníficos para la
defensa, entre ellos la torre, que
domina Suero de Quiñones,
Gran Vía y el paseo y que es un
formidable parapeto de fuerte
piedra sillería, ¡No tienen tales
cobardes ni la disculpa del fuego
de los morteros, ya que a Revuelta le fallaron éstos, por tener corto el punzón. Una fortuna, pues así los desperfectos
fueron ligerísimos.
Cuando nuestras fuerzas se
decidieron a dar la "última mano" a San Marcos, avanzaron
hacia la puerta del patio de cuadras y con una palanca que por
allí había la forzaron y entraron en el edificio. La mayor parte de los marxistas habían huido.
Abrieron los guardias la puerta principal, llegó el teniente
Revuelta con sus soldados y allí
quedó de jefe aquella noche,
convertido San Marcos en prisión.
¡LUZ EN LA CALLE!...
Poco después de acabar de
ocurrir lo que cuento, y que fue
el episodio más fuerte de lucha, y cuando se disponía el cronista a ir a la Casa de Socorro, desde el Gobierno Civil, dieron la
luz del alumbrado público. Aún se veía bien, pero aquella extraña luminosidad tenía un aire nuevo, un aire de victoria y de alegría, ¡Teníamos luz!... Los guardias de Asalto, (a los que habrá que dedicar párrafo aparte por su patriótica y fuerte labor de aquel día) se habían apoderado de la central de San Mamés y ésta funcionaba normalmente.
UN SUSTO FEMENINO
Funcionaban también los teléfonos, de cuya central se había hecho dueño el teniente Magro del Regimiento de Burgos.
Magro, no sólo no encontró resistencia (a no ser la eléctrica) en el edificio de la Telefónica, sino que fue recibido como un terrible monstruo antediluviano.
Prestaban servicio aquella tarde las amigas telefonistas Victoria Rodríguez (conste, capitán Venta, que no era ésta "mi
novia"), Lucifina Ortiz (que
tampoco... me quiere) y Teresa Llorente. Esta la única telefonista del centro casada.
No habían oído los primeros tiros y ya estaban las tres en el más oscuro rincón del sótano encomendándose a todos los santos de la Corte celestial...
Cuando llegaron los del Regimiento y abrieron el sótano
las tres heroínas... (heroínas de
esta narración ¿eh?) suplicaron
llorosas:—¡Por Dios!... no
nos maten...
Claro que era para matarlas haber dudado de la caballerosidad y nobleza de aquellos simpáticos soldaditos cuya presencia en las calles era una ráfaga de optimismo, de fe, de triunfo...
Lamparilla
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 215, 28 de julio de 1937
Del frente de Matallana
Recuerdo a José Antonio.
Descubrimiento de una lápida.
Más de cuatro meses, cuatro meses de entusiasmo en el trabajo y en el cumplimiento del deber. Su estancia en este pueblecito, que aun conserva las huellas de la barbarie roja, ha cambiado completamente el ambiente del pueblo y le ha hecho resurgir en el camino nuevo de la Nueva España. La Falange, con el aplauso y beneplácito de los oficiales del Ejército aquí destacados, propuso al Ayuntamiento de Matallana el dedicar a nuestro Ausente una
lápida en la principal calle
del pueblo.
Nuestros deseos se vieron
cumplidos. Se grabaron las
lápidas y se improvisaron los
festejos. De la Paz y Outomuro despliegan su celo y entusiasmo en dar el realce que se
merece el descubrir la lápida
que en mármol había de llevar grabado nombre tan preciado y glorioso.
Desde las primeras horas
de la mañana, el pueblo luce
colgaduras en las casas, preparándose de ese modo para la fiesta.
Los jóvenes del pueblo lucen las galas de su ingenio en
adornar un precioso altar,
donde se ha de celebrar la misa de campaña. En medio de frondosos árboles y en las márgenes de
las perfumadas riberas del
Torio, y cubierto por las banderas nacional y de Falange,
es donde se levanta el bello
altarcito.
Celebra la misa el celoso
capellán de las fuerzas que
guarnecen este frente. Camisas Azules, Infantería, Artillería y Guardia Civil forman
frente al altar; a izquierda y
derecha, el pueblo; en el centro, el comandante de Pardavé, D. Elías Gallegos, acompañado del capitán-comandante de la plaza, capitán de
Artillería, oficiales del Ejército, brigada de la Guardia Civil y Jefes de la Falange. El Ayuntamiento se halla
representado por su alcalde
D. Juan Barrón, tenientes de
alcalde, concejales y secretario. Entre el público vemos
al médico Sr. Sarabía, al consejero de la Hispana, D. Luciano del Valle, y una nutrida
representación de la Juventud
Católica Femenina de Robles
y Estación.
Terminada la misa, se da
principio al acto de descubrir
la lápida cubierta con la bandera roja y negra y el yugo y
las cinco flechas.
El Sr. Alcalde, con palabras breves y claras, evoca el recuerdo del glorioso Ausente y el acierto de la Falange al dedicar esta calle a José Antonio. Es necesario —dice— que el nombre de José
Antonio esté grabado en todos los pueblos de España, desde las grandes ciudades a las más pequeñas aldeas.
En vibrantes y fogosos párrafos, el Jefe de Centuria, Outomuro, explica el significado de la lápida en el resurgir de la Nueva España. La lápida de José Antonio es eterna como eterna es la Nueva España, y la Falange, como ayer, como hoy, y como siempre, la defenderá con su sangre y con sus vidas contra todas las acometidas de los marxistas. (Están listos, Rafael),
Entre concisas y llanas palabras habla el capitán-comandante de esta plaza, con
esa naturalidad, sencillez y
afabilidad que tan característica es en el camarada Alvarez Crespo.
Tiene fe, como camisa vieja que es, y espera al Ausente; es nacional-sindicalista y
confía, en que España, por
medio del nuevo Estado a que
la conduce el Caudillo, encontrará el eje de su resurgir.
Confía aún en José Antonio,
con tan emocionadas palabras
que producen profunda impresión en el auditorio.
Acto seguido, mientras,
con frenético entusiasmo y recia voz, se canta el himno de
Falange, descubre la lápida
en que está grabado: Avenida de José Antonio Primo de
Rivera.
Finales y sentidas palabras
las del bizarro comandante
Gallegos. Habla en nombre
de los jefes y oficiales del
Ejército y siente la unión de
las milicias y del Ejército
pues un mismo entusiasmo y un mismo ideal es el que nos
une y anima: Dios y la salvación de España. Recuerda al proto-mártir de
la causa nacional, Calvo Sotelo, y tiene emocionadas frases para José Antonio... una
frase envuelta en lágrimas...
el recuerdo de un hijo suyo
que dice: Murió Calvo Sotelo; pero papá, José Antonio aun
vive.
Termina el acto en enardecidos vivas a España, al Caudillo, al Ausente y se recuerda al inmortal y malogrado
General Mola y a los caídos
gloriosos.
Las fuerzas en brillante desfile, y bajo los pliegues de las
banderas roja y gualda y roja y negra, pasan, con paso
decidido, firme y enérgico,
ante las autoridades y en el
cuartel de la Centuria se disuelve la manifestación, donde son obsequiadas las fuerzas y autoridades por los camaradas de la Falange.
¡Fiesta emocionante que
quedará grabada en el corazón de los asistentes, al ver
el entusiasmo de éstos muchachos al tremolar la bandera nacional-sindicalista al grito glorioso de ¡Arriba España!
UNO DEL ÓRBIGO
Julio 1937.
Segundo Año Triunfal.
El Alzamiento en León
La noche del veinte
Venían ya las sombras de la noche de aquel memorable día veinte de Julio sobre la capital de León. Se había salvado ésta ya, de los peligros del día. Pero las tinieblas podrían traer consecuencias tristes, aun cuando triunfase aquella pequeña tropa que había roto en un par de horas el asfixiante y formidable dogal con que centenares de obreros pululando por sus calles y en merodeo por los pueblos de los alrededores amenazaban hundir a León en terribles abismos.
La noche se nos echaba encima. Mejor dicho, ya era de noche cuando subía yo las escaleras del Ayuntamiento a ver qué pasaba en aquella casa. Lo que ocurría era que el capitán Alberto Herrero Tomé se había convertido en un enérgico alcalde y allí estaban los guardias municipales y los serenos “en corporación” a esperar órdenes para pasar aquella aventura de la primera noche.
No era cosa de entretener al capitán en sus importantes funciones, y bajé para largarme a la Casa de Socorro. Había visto en mi recorrido huella sangrienta no era todo “juerga”, como decían animosos voluntarios, que habíamos encontrado y que iban como a un divertido entretenimiento.
Al pasar junto al Teatro, me dí una vez más cuenta de la escasez de elementos para dominar alguna intentona de reacción marxista. En la plazoleta tieso y firme, vigilante a los balcones del “Pacho”, Hotel Tuñón y demás estaba el Sr. Ochando, el viejo maestro armero del Regimiento.
Iba armado con una gran pistola bajo el sobaco izquierdo y cruzado de brazos paseaba. En la posición que llevaba el arma parecía que iba a disparar con el pulgar... Fui a decirle esto, pero avanzó enfadado hacia mí:
—¿Pero usted por aquí a estas horas? ¿Solo?... ¿Y sordo?
(Confieso que el paternal interés del Sr. Ochando por mi pelleja era conmovedor)...
Y, desde luego, razonable. Porque los soldaditos aquellos se echaban el fusil a la cara con una rapidez vertiginosa atentos, vigilantes... decididos. Como que la noche después el policía Rioja y yo estuvimos al punto de recibir un tiro a bocajarro de un chico de Astorga, por no haber hecho él caso del
soldadito. ¡Cómo cumplían la consigna!... Daba gusto, aunque dos o tres sustos nadie me los quitó.
¿Pero quién reparaba en esto? Había que enterarse de todo y poco después repicaba mi mano en el aldabón de la Casa de Socorro. Me abrieron y se extrañaron de que fuese a hacer información a tal hora. Brígida, la conserje, me decía, como si yo no supiera: —¡Pero si es usted sordo!
—Pues mejor para no oír las balas, mujer!
Lo curioso del caso es que todos, o casi todos, los ...heridos de la jornada eran... sordos, según referencias. Como todos o casi todos los que encontraron los guardias en San Marcos se habían metido allí para ver a un amigo, para convencer a un pariente, o por casualidad... ¡Caramba, caramba, caramba, con las casualidades y “sorderas” de aquel día!
Aunque con ”especialistas” como el comandante Medina, el capitán Venta y el teniente Pozueco algunas “sorderas”, acabaron en los “considerandos” de los consejos de guerra.
VICTIMAS
Y no había mucho que hacer en la Casa de Socorro, aun cuando no faltó trabajo (ni riesgo en la calle) al personal. La Cruz Roja alivió bastante. Pero entre ambos centros no tuvieron que intervenir en una catástrofe horrenda, como pensaban muchos al ver aquel alarde marxista de por la mañana. Los rojos prefirieron huir a sus pueblos, o donde podían antes que resistir. Y otros se entregaron confiando quizá en otra cosa parecida a tantas pamemas de la España
republicana, en que con unas semanas de cárcel se pagaba la mayor fechoría y se adquiría categoría de "mártir" de la "Reacción".
La fuerza pública no tuvo heridos de importancia ni muertos. Sólo dos guardias civiles lesionados de una forma "milagrosa" verdaderamente. Una de las víctimas de la población civil que, entre muertos y heridos, no llegó al medio centenar, lo fue la simpática y laboriosa señorita Aurora Chamorro. Fue a asomarse al balcón de su casa, a ver que ocurría, o a cerrarlo, cosas que no deben hacerse en casos así, y una de las balas disparadas contra el Ayuntamiento se desvió un poco y en una trayectoria escalofriante la degolló verdaderamente.
Ella y el anciano magistrado D. Jacinto Sánchez Puelles, que
también cayó en el balcón de su casa por algo parecido fueron las víctimas de la jornada más destacadas. Otra lo fue en la Plaza de Calvo Sotelo, una pobre mujer demente de la calle
de Misericordia, que se escapó de su casa y en su inconsciencia se metió en el medio del peligro. Quedó su cadáver en los jardines oculto hasta que por la noche lo retiraron los de la Casa de Socorro.
Cuando salí yo de ésta, quedaban allí dos hombres tendidos
en sendas camillas.
Y yo temí que fuesen más,
más y más en la noche que se presentaba serena en el cielo y espantosamente agitada en la tierra.
La capital, como muerta, se encerraba entre tinieblas y soledad.
Eran las once dela noche cuando brazos en alto y pañuelo en mano se retiraba el periodista a casa, por las calles desiertas. Un poco irónico, porque nunca había ido a un a información de tan extraña manera.
Lamparilla
Homenaje de la retaguardia
al Frente
Reseña de los actos celebrados el día 25
Asistencia al frente
El domingo y en cumplimiento de deseos del Generalísimo Franco una de las comisioncs formadas para el homenaje de la retaguardia a los
frentes, compuesta por los Exentísimo Sr. Gobernador civil de la provincia, Presidente de la Diputación Provincial y
camarada Brugada juntamente con las camaradas Crespo y Argüello y Carmen Santos, se trasladaron a los frenes de La Magdalena, S. Pedro de Luna y San
Emiliano para hacer entrega de
los donativos en metálico que
la retaguardia leonesa ofrecía a
los camaradas que luchan tan
bravamente por la conquista y
liberación de España.
Una vez más el verdadero
espíritu de fraternidad de todos
los españoles, unidos en un
mismo sentimiento de grandeza
de la patria, se vio patentizado
en esta emocionante visita, en
la que nuestros bravos soldados
y milicias ponían en sus vivas
el más fervoroso entusiasmo y
la retaguardia su más sincera admiración por su gesta heroica.
Unas sencillas palabras del
camarada Brugada en San Pedro de Luna, terminadas con
nuestros rituales gritos de España Una, Grande y Libre, y vítores al Generalísimo Franco y
Ejército español, fueron entusiásticamente contestados, regresando la comisión hondamente conmovida y esperanzada
al contemplar el magnífico espectáculo de un pueblo que defendiendo en las trincheras la
integridad nacional, parecía
norma con su heroísmo y sacrificio de la futura grandeza de
España.
¡Arriba España!
R.
Ejército del Norte - Tercer Cuerpo del Ejército
Llamamiento a filas de los reemplazos de 1921 y 1922
Por los Negociados de Quintas correspondientes de los Ayuntamientos de esta provincia y de la de León que se encuentren libres de ocupación por fuerzas facciosas, se procederá al llamamiento de los mozos pertenecientes a los reemplazos de 1921 y 1922, para que los días 6 y 7 del próximo mes de agosto efectúen la concentración en los Sectores de Reclutas que se indican a continuación.
Al sector de reclutas de Mieres — Los Ayuntamientos de Langreo, Laviana, San Martin del Rey Aurelio, Sobrescobio, Pola de Lena, Aller, Quirós, Riosa, Mieres, Morcín, Rodiezmo, Valdelugueros, Valdeteja, Valdepielago, Vegacervera, Cármenes, Pola de Gordón, Campo de Caso, Miranda, Somiedo, Teverga, Proaza, Tameza, Ribera de Arriba, Santo Adriano y Delegaciones Gubernativas de Trubia y Grado y Cangas del Narcea.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 220, 3 de agosto de 1937
AYER EN MATALLANA
Entrega y bendición de las Banderas de la 16 Centuria
Otra Centuria compareció ayer en campo de honor para recibir banderas que han de ser victoriosas, por que victoriosos son ya sus portadores. Con toda la liturgia grave y guerrera que las circunstancias gloriosas imponen, la 16 Centuria de Falange Española Tradicionalista de nuestra Provincia, formó ayer bajo un sol de esperanza, al que en vano intentaban acuchillar los silbidos de los pobres "pacos" enemigos.
Fue portadora de nuestra bandera —yugo y flechas en campo imperial roji-negro— nuestra camarada de León, Angelines Diez Robles, que charló a los combatientes de augustas promesas y de magníficas ilusiones guerreras en la fidelidad del servicio de nuestro camino de gloria.
Rosario García —otra camarada consciente de su admirable misión— entregó la enseña bendita —como la mies, dorada y como la sangre hispana, roja— que desplegaba airosa y triunfal entre aquellos peñascos de reconquista.
Agradeció la entrega, sencillamente, con austeridad retórica, el Jefe de la Centuria —Rafael Outonuevo— en cuyos labios vimos todo el temblor de júbilo e ilusiones que brotaban y pugnaban por salir en los pechos de todos los falangistas.
El comandante Gómez Seco pronunció su arenga militar y guerrera que era de felicitación, de estímulo y de saludo. El jefe local de Astorga, que llevaba la representación de los camaradas astorganos, también les habló de ilusiones nacional-sindicalistas, surgidas a impulsos de las generosidades guerreras de sus paisanos, alli formados para recibir las benditas enseñas. Y también vino desde Astorga su Alcalde, para felicitarles en nombre de la ciudad y hacerles entrega de la espiritual adhesión de la vieja población, orgullosa y gozosa de tener tales hijos.
El comandante Gallego, que manda el Batallón del Regimiento de Burgos allí destacado, represento a nuestro Glorioso Ejercito con palabras de cordialidad y afecto. Un Capellán del mismo Batallón que había declarado benditas —oficiando y rezando la misa de bendiciones— las Banderas, resumió con palabras de profundo cristianismo el acto magnifico que con sencillez de milicia y sacrificio se había celebrado.
Desfilaron después las fuerzas. Aparte de la Centuria, lo hicieron una Compañía del Batallón de Burgos, núm. 31 y la Guardia Civil que no tenía otros servicios.
Las bandas de cornetas, tambores y música de Milicias, que dirige el camarada
Odón Alonso, dieron a todo la arrogancia lírica y de festividad que las circunstancias exigían.
Después... rancho extraordinario y animadísimo baile, en el que confraternizaron con legítima camaradería, soldados, falangistas y pueblo sano.
El lucero de la tarde marcó un punto en el azul de cielo, resumiendo una fiesta de banderas que han de marchar alegres con gritos de paz imperial.
El Alzamiento en León
La noche triste
Cuando llegué a casa, en aquella memorable noche del lunes veinte de julio, me encontré con que la familia se había refugiado en otra casa vecina, en la cual había buscado albergue la de cierto distinguido catedrático y literato de León. No fueron ciertamente estas dos solas familias las que buscaron hospitalidad en otros hogares.
Por cierto que horas más tarde, al ir a dar un aviso a un amigo, bravucón él, alardeador de fiereza él, y protagonista (después del Movimiento) de un incidente, me encontré a las cinco de la mañana con un candado en su puerta que era como para cerrar la mismísima Puerta del Sol, de Madrid.
Cené en casa del vecino y me dispuse a marchar al próximo cuartel. Pero el dueño de la casa, hombre bondadoso y servicial había cerrado paternalmente la puerta y, con todo cariño, no me dejó marchar.
Comprendí entonces, todo el daño que la prudencia y el cariño pueden hacer en casos tales. Porque serían muchos, sobre todo jóvenes, los que, a aquella hora, estarían rabiando, como yo, en sus casas, para salir a ayudar a aquella escasísima guarnición, que acababa de escribir página tan brillante.
¿Pero podrían aquellos hombres, durante la noche superar, sin graves daños y quebrantos los obstáculos que pudieran ofrecérseles y la magnitud de la empresa en que estaban comprometidos?
La guarnición se componía de un batallón mermadísimo, con unas trescientas plazas, unos ciento treinta guardias de Asalto y Seguridad, según decían. (Quizá fuesen menos) Y Otros tantos, a lo sumo (que no llegaban), de guardias civiles. Añadir unos doscientos entre falangistas y demás voluntarios.
Y con esta tropa atended a los servicios de una revolución, en una ciudad de treinta mil habitantes cercada de cuencas mineras sublevadas y con carreteras y ferrocarriles en buena proporción.
La guarnición tenia que vigilar y atender dos estaciones de ferrocarril, una de clasificación, dos centrales eléctricas, un depósito de aguas, un auto-estación, depósitos de gasolina, puentes, cárceles,
entradas de la capital con unos nueve accesos por carretera, monumentos, iglesias, edificios militares y de Correos, Teléfonos, etc, etc.
¿Y la comunicación con el Aeródromo mismo, cercado de núcleos de población revoltosa y sin la seguridad de que todo el personal fuese fiel a la Causa nacional que se defendía?
Tanto es así que, a la mañana siguiente al ir un coche de Guardias de Asalto a la Virgen del Camino, fue tiroteado en Trobajo por grupos de marxistas desde las bocacalles, agresión que repelieron los Guardias con energía y rapidez.
¿Que pasaría en el Aeródromo a los leales aviadores que habían volado por la tarde, llevando alientos a la guarnición y los cuales, con su telégrafo luminoso hacían guiños en la noche a los de la estación similar establecida en las murallas de la Colegiata? ¿Les cercarían los rojos por Ferral, San Andrés, etc?
Todas estas preguntas e inquietudes bullían en mi mente. Y Supongo que en la de muchos que no pudieron salir de casa, por el cariño de madres, hijos, esposas, etc. nunca tan ciego como entonces.
¿Quien dormía, pues, aquella noche?.., Yo, por mi parte, debí dormir un par de horas. Cuando desperté, un amago de claridad empezaba a invadir la sombra de la noche. Eran las tres y cuarto de la mañana. Desde mi habitación veía el puesto de protección que, para defender (¡Que hubiese que defender aquello, Dios mio!) la Catedral, habían establecido en la torre del reloj.
Sin casi darme cuenta, como si aquéllos hombres pudiesen verme y atenderme, saqué un pañuelo y empecé a agitarlo. ¡Nada! No contestó nadie. Ni me verán.
Por un balcón me asomé a la Plaza de San Isidro. Solitaria y todavía era penumbra... Pero un guardia civil joven, envuelto en un capote de soldado, vigilaba... Le llamé, vino, me atendió, - ¿Que ha pasado esta noche, guardia?...
—Nada; algún tiro suelto... Todo tranquilo... Me dijo...
¡Que fervorosa y profundamente di gracias a Dios! La noche triste había pasado.
Poco después, y tras de algunas vueltas por la casa para no despertar a la gente, pude salir a la calle. Eran las cuatro de la mañana.
El general Múgica, gobernador militar actual de León, tuvo el otro día oportuno recuerdo para el puñado de hombres que salvó a León de tantas desgracias y tragedias. Es justo recordarlo.
Y yo les rindo mi tributo humilde de gratitud, ahora que recuerdo mi salida a la calle en la madrugada de aquella noche en que ¡no había pasado nada!...
Aquella noche en que no debió de dormir nadie, o casi nadie, en León, como se verá.
LAMPARILLA
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 226, 10 de agosto de 1937
El Alzamiento en León
VUELVE LA NORMALIDAD...
Eran como dije, las cuatro de la mañana de aquel martes veintiuno de Julio glorioso cuando pasé la calle. No había salido casi del portal cuando vi un grupo extraño: era el compañero de “La Mañana” ya fallecido, el popular Labandera, que, cansado y ojeroso, por haber estado sin dormir en Radio León, se retiraba a descansar protegido por un cabo y un cornetilla del Regimiento de Burgos, con casco de guerra y el fusil terciado a la altura de la cara, dispuestos a disparar.
No era precisamente un héroe aquel bueno de Labandera y venia asustado y revolviendo la vista a cada paso. Según él, la “cosa” había sido terrible en León, aunque la noche había pasado tranquilamente.
En cambio, los soldados, con aire de fatiga, eso sí, por el largo servicio, iban vigilantes y animosos, mirando sonrientes a ventanas y balcones por entre cuyas rendijas, veíanse ciertos movimientos como de gentes en acecho. Efectivamente, lo que dije de que nadie debía haber dormido en la ciudad tuvo confirmación plena poco después, al dejar a Labandera en su casa.
Al ruido que hicimos al llamar se poblaron ventanas, balcones y portales de vecinos y vecinas no muy bien peinadas algunas por cierto. Los brazos se agitaban llamándome, pues me conocían. ¿Qué ha pasado?... ¿Qué le parece?
Les dí noticias e impresiones recogidas. Aquellas gentes se hallaban asustadas. Por donde quiera que pasé, me hablaban de catástrofes... Había llegado la hora ¡¡que tantos deseaban!! y había... tanto miedo en quienes días antes se mostraban jubilosos ante la que se iba a armar. Como si ciertos toros pudieran verse cómodamente desde la barrera.
¡Ah la ignorancia de lo que son estos terribles castigos con que una fuerza omnipotente castiga a la Humanidad!
Llegué poco después a la calle Ancha y la primera patrulla que vi se echó los fusiles a la cara contra mí. Eran falangistas y otros paisanos con cascos de acero y chapas del Regimiento como brazaletes, que eran con gorros cuarteleros, los distintivos que repartieron a los que en el cuartel se presentaron.
La patrulla venía mandada por el inquieto Arturo Usoz, hijo del hoy alcalde de la capital, directivo de Falange, preso meses antes. Ahora se cambiaban las tornas.
Y así, Juan Carbajal, Caballero, y otros falangistas que se encontraban en la cárcel estaban en ella ahora para custodiar a los presos. O bien prestaban servicios con una actividad que es lastima no sea registrada en apuntes como estos por quien la sepa.
La amenazadora actitud de la patrulla cambio al ver mi burlesca mía de poner las manos en alto de cierta forma.
¡Otro abrazo fuerte de Usoz que llevaba muchas horas sin descanso, nueve de pie, y sin los presos. O bien prestaban servicios con una actividad que sin embargo, estaba dispuesto a no dejar títere con cabeza.
Este deseo del elemento militar, que secundaba de forma tan admirable el histórico grito de santa rebelión de Franco, lo fui transmitiendo, como pude en aquellas tempranas horas. Recuerdo que donde primero me hicieron caso fue en la “Panadería Belga”.
En estas y otras, y recogiendo noticias y dándolas a gentes con ojeras, y pelo en desorden, llegué a los Capuchinos. Una patrulla vigilaba por aquellos sitios. Eran paisanos, “mixtos” de falangistas, de militares y de civiles por su pintoresca indumentaria. Actuaba allí como jefe el ahora interventor de Falange de León, Ceberio, el cual me descubrió la más terrible de las tragedias que habían pasado en aquella inolvidable noche: ¡No tenían tabaco y habían hecho guardia, sin fumar porque en el convento no había ni un pitillo, toda la santa noche!... Y lo que era peor: ¡ yo. tampoco llevaba tabaco... Y allí verían ustedes a un periodista, a las cinco de la mañana siseando y llamando por los balcones, hasta encontrar un medio “cuarterón” que le regaló un zapatero y músico del Hospicio en la Plaza de las Concepciones.
En una de las vueltas que dí por allí, me topé a la entrada de Puertamoneda con un grupo de comadres, entre lay que había alguna roja... Señor: lo que me “achucharon” aquellas mujeres! Empezó a formarse un corro enorme de gente. ¡Qué sí habían matado a Fulano!... ¡Qué si Perengano estaba herido! .. Los “bulos” más catastróficos al romper el alba.
Llevaba yo las de perder, y me iba batiendo en retirada hacia el portal de la señora Carmen, la pescadera, ante los manoteos y gestos de aquellas exaltadas. cuando apareció por la calle de Herreros, una patrulla de soldados. Verlos y meterse cada una en su casa, como conejos asustados, fue todo uno.
Libre ya, saqué el pañuelo y avancé manos en alto. Los Soldados eran músicos del Regimiento que habían sustituido sus instrumentos por el mosquetón ya que había que echar mano hasta del último ranchero. Me dijeron que ya no era necesario el ir con las manos en alto.
Cuando volví a los Capuchinos. Ceberio y los otros dijéronme que los únicos disparos que se habían oído aquella noche por allí procedían del Hospicio hacia la torre del reloj y que esperaban tener más fuerza para entrar y averiguar lo ocurrido.
Conocía yo la situación de las pobres monjas, aprisionadas por la bestialidad de aquellos que habían excitado a los hospicianos hasta el punto de maltratarlas entre groseros insultos, el más suave el de "borrachas" y temí por las religiosas.
— ¿Disparan ahora? Pregunté a la patrulla vigilante.
Al decirme que no, y entre los árboles avancé hacia las ventanas de las habitaciones de las monjas: llame; agité un pañuelo y entre la oscuridad de la ventana surgió una toca blanca...
Se tranquilizaron enormemente con las palabras que les dirigía yo, detrás de un tilo, por si las moscas... Unas moscas que habían roto los vidrios del balcón principal, dirigidas algunas contra el capellán don
Miguel Hernández, por alguien que ya pagó su alevosía.
A pocos pasos, Ceberio y compañeros mártires saboreaban deliciosamente la picadura y se disponían a cachear a los pocos, poquísimos, que cruzaban por aquellos sitios. Eran principalmente, ferroviarios.
Pero, pronto, empezaron los balcones a cubrirse de colgaduras blancas: las tiendas abrían, aunque con cierto recelo; la gente se echaba a la calle con temor y curiosidad; se preguntaba, se comentaba. Se hacían corros. Y en medio de esto, algunas lecheras, algún carro de verduras cruzaban las calles; que iban adquiriendo la normalidad de los días ordinarios.
¡León se había Salvado! Un puñado de hombres decididos a cuyo frente habría que estampar los nombres del general Bosch, coronel Lafuente, comandante Arredonda, Rugia, Osset y Medina, capitán Martínez Pedrosa y otros jefes y oficiales había obrado lo que parecia imposible aquel mediodía del domingo.
Lamparilla
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 229, 13 de agosto de 1937
El Alzamiento en León
La Guardia de Asalto
Voy a terminar. No sólo por el temor de cansar a los lectores, aunque algunos me han pedido nada menos que publique pronto con mis recuerdos, sino porque tienen que omitirse muchísimos detalles, lo que haría incompleta la narración de lo acaecido. Con más tiempo y calma sería otra cosa.
Cierto es que, aun cuando yo omitiese el resumen escueto de algunos, no todos, de los servicios de estos buenos guardias, sería igual, porque la gente se ha dado cuenta de ello, y al honroso calificativo de "Tercio Azul", une sus cálidos aplausos cuando pasan en los desfiles.
Vamos, pues, con las referencias obtenidas.
Era difícil y comprometida la situación de estos hombres, por que les faltaban los mandos principales del digno capitán Rivero y del teniente González, separados, de los suyos, y medio ocultos en el cuartel del Cid.
El sábado dieciocho, por la noche, el teniente Fernández, que había de huir después con el dinero de la Compañía formó a ésta, como jefe accidental de ella, y la arengó pasa defender a la República, la cual vitoreó al terminar. Los guardias no contestan al viva. Algunos, replican: "A la República, sí; a la anarquía, no”.
Aquella noche quisieron entrar algunos de la Casa del Pueblo al cuartel, intento que fue cortado por los guardias, hasta el extremo de montar los cerrojos de los fusiles.
El alférez Capdepón, el que dije que tenía cara de bruto, al comentar el incidente del fascista perseguido, dijo a las clases que había que había que ir a enfrentarse con el Ejercito. Pero el veterano
suboficial Sr. Fraga contestó firmemente que ni el, ni las clases, ni la tropa harían tal cosa. Capdepón, irritado, montó la pistola, pero se salió de la estancia.
El famoso domingo diecinueve, insiste el teniente Fernández en sus propósitos. Nosotros, no vamos contra el Ejército, sino con él, es la respuesta. Respuesta que, por la tarde, confirmaban serena y valientemente esperando los guardias a pie firme la acometida de los “mineros”. Y para ver el estado de ánimo bastaba la cara del sargento Saurina cuando se entregaron armas para que la “tormenta” se alejase...
En esa tesitura, y aunque los escasos desleales a sus compañeros, zascandileaban por el Gobierno Civil, etc.. llegó la hora de lanzarse el Ejército a la calle, todavía, según referencias ajenas, parece que el capitán Rivero quería hablar a los suyos, hacerse con ellos, por si el virus maligno marxista habíales
contagiado. Pero a esa hora con correaje y armamento, estaban los guardias ya dispuestos a secundar al Ejército y a igualar o superar lo que hiciese el más leal a la Causa de España y el más valiente. Ya he referido algo de cómo se portaron en la toma de San Marcos; también estuvieron en la del Gobierno Civil, Radio-León, etc.. etcétera. Los detalles me llevarían largo espacio.
Era de creer esta patriótica actitud de los guardias de asalto de León. Habíales yo visto con el teniente González, a las puertas del Casino, el día catorce de Abril cuando, después del desfile de la fiesta de la República, fueron insultados por la cobarde pandilla que defendían Marassa, y otros “Frescos”. Los
Guardias, sin alterarse, esperaban a dar “leña, como quien lava...
Y, pocas horas antes del alzamiento, el Suboficial Sr. Fraga también repelió despectivamente a una cuadrilla de la Casa del Pueblo que fue a coaccionar a los guardias a que se sumasen a los rojos...
A los rojos, que no podían atravesar estos hombres que días antes sufrían el bochorno de que el uniforme que vistieron con ilusión y honradez, era rebajado al nivel de la ropa del asesino por los infames que inmolaron a Calvo Sotelo.
Así se portaron los guardias de Asalto. Si hay tiempo, más adelante hablaremos mas.
LA GUARDIA CIVIL
Con la Benemérita ocurre como con los platos de los restaurantes. Le ponderan a uno éste, el otro el de mas allá. No le gustan a uno. Y el camarero dice: “Si quiere usted le traigo jamón”. A secas,
La Guardia Civil es el jamón a secas. No necesita elogios, ni presentación.
Sin embargo, convendría, que el lector supiese algo del viaje del Joven teniente Romero, etcétera, sin detallar por ahora, la página sublime del capitán Losada y su gente en Ponferrada.
¡A ver si hay tiempo!
LA AVIACIÓN
En cuanto a la Aviación, a estos esforzados pilotos y demás de La Virgen del Camino, en los primeros días, no merecen un capítulo aparte. Merecen una novela, porque páginas de novela, de aventuras parece lo que han hecho. Más adelante se hablará. Y punto final.
Lamparilla
Consejería de Instrucción Pública
Por disposición de esta Consejería.y para reorganizar los servicios de Primera Enseñanza en la zona
leal de la provincia de León, se han hecho los siguientes nombramientos:
Delegado provincial de Instrucción Pública de la provincia de León, a don Antonio del Reguero Villafañe, maestro nacional de Pendilla (León).
Delegado municipal de Valdelugueros, a don Alfonso del Blanco Argüello, maestro nacional de Valdelugueros.
Delegado municipal de Valdeteja, a don. Justo García Alonso, maestro nacional de Valdeteja.
Delegado municipal de Cármenes, a doña Emérita Polo Orejas, maestra.nacional de Cármenes. Esta misma tendrá a su cargo la Delegación de Vegacervera, al mismo tiempo que la anterior.
Delegado municipal de Pola de Gordón, a doña Trinidad García Moreno, maestra nacional de Pola de Gordón.
Delegado municipal de Rodiezmo, a don Celestino Rodríguez Gutiérrez, maestro nacional de Rodiezmo.
Gijón, 10 de agosto de 1937 — El consejero de Instrucción Pública de Asturias y León, Ambou.
(973)
CNT, órgano de la Confederación Regional de Asturias, León y Palencia, Gijón, 20 de agosto de 1937
El nuevo horario de los ferrocarriles del Norte
Remitido por el Comité de Demarcación (Asturias y León) del Ferrocarril del Norte, hemos recibido un ejemplar de la Orden del día número 2, con la nueva combinación de trenes, Pola de Gordón-Soto del Rey, Soto del Rey-Pola de Laviana y viceversa.
Según la nueva orden del día que anula todos los horarios anteriores, queda establecido el servicio en la siguiente forma: Un tranvía con salida de Pola de Gordón a las 3,30 y llegada a Soto del Rey a las 6,31; otro tranvía con salida de Puente de los Fierros a las 12,2 y llegada a Soto del Rey a las 13,9; un correo-exprés con salida de Pola a las 15,11 y llegada a Soto a las 18,3; otro con salida de Soto a las 11,50 y llegada a Pola a las 15,1; y un tranvía que sale de Soto del Rey a las 18,10 y llega a Puente de los Fierros a las 19,29.
En la línea Soto del Rey-Pola de Laviana, dos tranvías descendentes con salida a las 6,47 y
13,36, y dos ascendentes con salida a las 17,3 y 20,43; un correo descendente a las 18,25 y otro ascendente a las 10,43.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 243, 31 de agosto de 1937
EL JOVEN
Nicanor Diez González
Estudiante de Medicina
Afiliado a 1.ª Línea de F. E. T. y de las J. O. N. S.
Murió por Dios y por España, cobardemente asesinado por las hordas rojas en Busdongo, el día 27 o 28 de agosto de 1936
A los 18 años de edad
DEP
Sus padres. D. Nicanor Diez Rodríguez, juez municipal de Matallana, y D.ª Albina González; hermanos, Antonio, alférez de Contabilidad del Cuerpo Mixto de Ingenieros en Pamplona; Visitación, María Luz, Félix y José Luis; abuela, Isidora García; tíos, primos y demás familia:
Ruegan a sus amigos le tengan presente en sus oraciones y se sirvan asistir al funeral que tendrá lugar el día 3 de septiembre, en la capilla habilitada en la Estación de Matallana, a las DIEZ de la mañana, por lo cual les quedarán agradecidos.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 244, 1 de septiembre de 1937, León
CUARTEL GENERAL DEL GENERALISIMO
Sección de información. - Estado Mayor
Boletín de información, con noticias recibidas en este Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 31 de agosto de 1937.
Frente de León. —Se ha efectuado una descubierta hacia Valdeón, cogiéndose 87 reses vacunas y 143 lanares, haciéndose muchos prisioneros y presentándose muchos milicianos con armamento.
En el frente de La Vecilla
Un sector interesante
Confieso mi error. Al pasar por La Vecilla, aun cuando los cañones de los fusiles se asomaban a las ventanillas del tren, para tener a raya, si se producían, las disparatadas acometidas de los pacos rojos, no creí que aquel lugar fuese un frente de compromiso, a pesar de que, claro es, en la enorme muralla de los dos cientos kilómetros del frente de León-Asturias, todo sitio es apto para abrir una brecha...
Si se puede, porque ahí están todavía los infelices rojillos sin poder abrir el más pequeño portillo. ¡Estos que pensaban meterse por La Robla a tomar café en León, por Valdecastillo en Boñar y por Lillo... ¡Pero vengamos a La Vecilla!
Se dijo ayer en estas columnas que el domingo se había celebrado un acto de Asistencia al Campo en Barrio de Nuestra Señora, en que habló el comandante militar del sector de La Vecilla, capitán Marquina.
Con los oradores del acto, Robles y Brugada, fui a La Vecilla, y una vez allí ¿quien se viene sin darse un paseo entre parapetos, trincheras y alambradas?...
El comandante militar satisface, galantemente, nuestra curiosidad.
Y esa queda envuelta en asombro, porque no esperábamos encontrar lo que allí vimos, debido a la idea que el cronista tenía, como queda dicho, de este sector.
En el cual, a na hora que llegábamos a un parapeto frente al Pico de La Estrellas, los rojos de aquella parte preguntaban noticias de Santander... Acaso idiotas, más que idiotas, para reírse de la verdad, de la realidad que les dijeran los nuestros, porque para esas pobres gentes no hay más verdad, ni más realidad, que los bulos que quieran contarles sus jefecillos. Es posible que crean que Santander ha sido abandonado con malicia, para meter a nuestros soldados en una ratonera...
Una ratonera como la que ellos se prepararon en estos montes enormes, como Peñas Negras, donde se han llevado más de cinco meses, con barrenos fortísimos de dinamita en explosiones diarias para taladrar el monte de lado a lado, en una inmensa galería-refugio. ¿Refugio de qué? ...
¡Ah, tontisimos! ¿Pero creéis que a los soldados que rompieron el cinturón de hierro de Bilbao, el cerco de Oviedo, el sitio del Alcázar, etc., les asustas con esas galerías?
También ellos saben hacerlas. El comandante militar nos muestra, legítimamente orgulloso, los refugios, abundantes, fuertes, seguros. Son unos refugios, digámoslo así, de exhibición. No parecen
prestar servicio de guerra, sino ser solamente un alarde de construcciones y defensas de campaña, hechas en el curso de las maniobras de una Academia militar, para estudio y enseñanza de de los cadetes.
Y se comprende viendo al comandante. El estilo es el del hombre. Fino este, delgadito, suave bigote, tipo lírico, de artista, se ve que es un enamorado de su arte. Se ha entregado a la guerra con una pasión de novio. Dicho sea con permiso de su señora, una simpatiquísima gallega, que ha que querido compartir con él las zozobras de la campaña y en La Vecilla se ha instalado.
Lista, viva y guapa, de aire travieso, decidido y enérgico, nos ha hecho también pasar con sus ocurrencias, agradables momentos.
No es extraño. Es una mujer cosmopolita, como le decimos bromeando. Porque por su nacionalidad es de Europa. Por haber nacido en la Argentina es de América. Y como su nombre es África... ¡velay!...
Pongamos fin, a esta charla, por hoy, con estas frases, sencillo homenaje a una simpática marisca, como personificación de la admirable mujer gallega, que hasta los frentes sabe llevar el encanto
y poesía del afecto valiente y arriesgado a los suyos.
Galicia tiene digna representación femenina en La Vecilla. En cuanto a la masculina; ya hemos dicho que lo dejamos para mañana.
LAMPARILLA
Del frente de León
Los hermanos Emilio y David Suárez: ¡Presentes!
Era el 22 de junio del primer año triunfal. Sobre las cumbres inaccesibles de Peña Ubiña, falangistas y soldados entonaban cantos de gloria a la España que vence. El teniente Alejandro Arias, jefe de la Bandera Legionaria de Lugo, leía, en la Comandancia del puesto número 2, una carta de un teniente rojo que aquella misma mañana había caído en nuestro poder; pedía en ella una recomendación al comandante Sixto Cienfuegos, jefe del sector que teníamos enfrente: que le dieran en su batallón un destino cualquiera, de preferencia el de barbero. Él decía que no podía desempeñar el cargo de teniente, debido a un accidente que en tiempos pasados sufriera en una mina.
Comentamos en tono jocoso todas estas cosas que demuestran la falta de moral en la zona roja, cuando llegó a
nosotros David Suárez Alvarez y nos dijo: Han matado a mi hermano Emilio. ¡Arriba
España!
Y aquel héroe, que, al darnos la triste noticia, no lloraba, hizo con su entereza de
ánimo, con su patriotismo sin
limites, que nuestras almas
sintiesen el profundo dolor
que tal noticia no podía menos de producir. Emilio Suárez era un gran camarada.
Recuerdo bien cómo tú nos
diste ánimo, David; recuerdo
cómo al ver en nuestros rostros reflejada la inmensa pena
nos dijiste: No lloréis; pensad
lo feliz que es mi hermano, ¡quién pudiera como él ser
un elegido por Dios!
Y en medio de nuestra
pena en mística oración encomendabamos a él el alma del inolvidable camarada.
Y hoy, día 12 de Agosto del segundo año triunfal, tú, que sentías a cada momento envidia por la suerte de tu hermano, recibiste la bala enemiga que días después había de hacer que tus ansias de darlo todo por la Patria se cumplieran; entregaste tu vida y dijiste al darla: He cumplido mi último acto de servicio. ¡Arriba España! (Fue esto tu última oración).
Nadie como los que les conocíamos sabemos de su inmenso espíritu de sacrificio, nadie como los que presenciamos el traslado a su última morada saben del patriotismo que era su característica esencial.
Su padre y sus hermanas presenciaban su entierro; nosotros llorábamos, no recatábamos nuestra pena, pero ellos, no; su padre y sus hermanas no lloraban; se veía en sus caras esa cosa inefable, religiosa, sublime, que es la explicación más sencilla y más santa del alma que está dispuesta a darlo todo por un ideal.
Emilio y David Suárez ¡Presentes! cumplisteis vuestro deseo de dar vuestra sangre por la Patria y nosotros, que seguimos en el puesto de, honor, sentimos que dejásteis en las trincheras toda la inmensidad de vuestro espíritu de falangistas.
¡Arriba España!
MARCOS MADERAL
Torrebarrio (Collado), agosto 1937. II año triunfal.
Ejército del Norte
XVII Cuerpo de Ejército
ESTADO MAYOR
A fin de dar cumplimiento a las disposiciones dictadas por la Comisión Militar del Consejo Soberano de Asturias y León, publicada en la Prensa del día de hoy y a otras aclaratorias, sobre creación de reservas, se ordena lo siguiente:
Los Ayuntamientos en el plazo de 48 horas procederán a formar relaciones que comprendan:
a) Los ciudadanos que voluntariamente deseen incorporarse para formar parte de las Divisiones de nueva creación. .
.b) Todo el personal de Minas que estaba exento de incorporación perteneciente a Reemplazos movilizados.
c) Todo el personal ferroviario perteneciente a los Reemplazos de 1925 a 1939, ambos inclusive.
d) Los obreros pertenecientes a los expresados reemplazos de 1925 a 1939 que prestan servicio en las
distintas Industrias de Guerra. (Se exceptúan los que la Dirección técnica, de acuerdo con los Comités de Control, solicite después de un examen escrupuloso y consciente, su exención, previa revisión por la Comisión Militar.
e) Los reclutas pertenecientes a reemplazos movilizados que por diferentes conceptos estaban exentos de incorporación o disfrutaban prórrogas indefinidas, así como aquellos a los que se les había concedido por determinado tiempo, todas las cuales quedan caducadas, así como los que se hallaban pendientes del dictamen de la Comisión de Peticiones de Exención.
Los interesados en esta Orden que procedan de Euzkadi, Santander o de otras provincias en poder de fuerzas facciosas, que se encuentren en la zona leal, harán también su presentación en los Ayuntamientos de su actual residencia.
Todos los comprendidos en esta disposición se presentarán ante los respectivos Ayuntamientos en el plazo de 48 horas y efectuarán su incorporación en los Sectores de Reclutas que a continuación se indican, en las fechas que también se señalan.
SECTOR DE MIERES
Día 11 del actual
Los Ayuntamientos de Langreo, Laviana, San Martín del Rey Aurelio, Sobrescobio, Pola de Lena, Aller, Quirós, Riosa, Mieres, Morcín, Rodiezmo, Valdelugueros, Valdeteja, Valdepielago, Vegacervera, Cármenes, Pola de Gordón, Campo de Caso, Miranda, Somiedo, Teverga, Proaza, Tameza, Ribera de Arriba, Santo Adriano y Delegaciones Gubernativas de Trubia, Grado y Cangas del Narcea.
Agence Espagne, informations télégraphiques et téléphoniques de dernière heure, Número 237, 9 de septiembre de 1937
En el sector de Pola de Gordón los rebeldes consiguieron ocupar Peñas Blancas y La Magdalena.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 252, 10 de septiembre de 1937
En San Pedro de Luna se ocupan las posiciones a vanguardia del enemigo, tras brillante
operación de nuestras fuerzas
Han empezado las operaciones en el frente de León
(Crónica de nuestra enviado J. CANTALAPIEDRA BARES)
La reconquista de España ha comenzado en las montañas leonesas.
La España nacional está encaramándose a las cimas de las montañas para saturarse de cielo y de azul. En las montañas, gigantescas, excelsas y solemnes de los frentes de San Pedro de Luna y La Magdalena, nuestro ejército ha empezado a izar la bandera de España como un airón más de la gloria alcanzada y la que empieza a reverdecer.
Cimas enormes, infinitas, valientes, donde se está muy cerca de Dios. Cimas y picachos donde la brisa del cielo empieza a musitar nuestras canciones de triunfo.
Solo allí, en estos picachos ciclópeos tan altos como altas suben las plegarias de los cristianos, donde el azul transparente es puro y luminoso, donde se yergue el espíritu, donde todo parece elevación y fortaleza, solo allí puede estar España. La España que busca a Dios y la Justicia y el orden. Y allí han comenzado a siluetearse en el azul, la España Una, Grande y Libre.
Entre el ruido bronco del cañón, tocando el cielo, han comenzado a aparecer los bravos soldados de la Nueva España, que trepando incansablemente por estas peñas sublimes, pasando valles y barrancadas para volver a trepar y conquistar otra nueva cima, con el corazón puesto en la Patria, para devolvérnoslas pronto, muy pronto con nuestra Bandera gloriosa, para la Nueva Era de la España
Imperial.
Al amanecer, comenzó el avance sobre Pajares, agrupación izquierda de San Pedro de Luna y por el vértice Pedroso, poblado de Aralla y estribaciones de Peña Milota. Nuestras fuerzas asaltaron las posiciones enemigas fuertemente organizadas del alto de Santa Elena, Salceo y los Casazos, cota 1.650, dos kilómetros al Noroeste de Aralla, agrupación derecha partiendo de Carrocera, alcanzando la divisoria de San Martas, Peña La Rueda, vértice Violares y vértice "Margónes", a pesar de que el enemigo se había reforzado con cuatro batallones y abundante artillería. Nuestras fuerzas, han encontrado hoy un enemigo decidido a resistir hasta el último trance, pero en realidad el peor enemigo que hemos tenido ha sido el terreno.
Tanto en San Pedro de Luna como en La Magdalena, ha sido preciso, escalar alturas de 1.900 metros, difíciles, no solo por su terrible pendiente, sino por tratarse en general de peñascales sin caminos viables y donde la fortificación es innecesaria, porque cada peña constituye de por sí una fortificación.
Sin embargo, la maniobra se ha impuesto y ha dado sus resultados.
Las dos cumbres gigantes del macizo, "El Pedroso" y "Amargones", han sido quitadas al enemigo a punta de machete, una de ellas por una bandera de Falange, y desde ellas se contempla el camino
de Pajares a los pies.
Han luchado juntos, soldados de Galicia, León y Castilla, rivalizando en bravura.
Han quedado liberados diez pueblos: Olleros, Santiago de las Millas, Carrocera, Benllera, Otero de las Dueñas, Viñayo, Piedrashechas, Portilla, Cuevas y Aralla,
Hasta mañana.
Los escopeteros riañeses
Todos los buenos montañeses de la "ribera del Esla" recordarán perfectamente aquellos aventureros ensayos revolucionarios, por aquel entonces contra-revolucionarios y que un puñado de valientes de esta hidalga tierra hicieron en estas montañas en el Octubre rojo de la pasada resolución.
Conocidísima es, por recordar alguna concretamente, la brillantísima actuación de aquellos pocos de Las Salas, de Crémenes, de Argovejo y de Corniero, cuando con una veintena de malas escopetas, se lanzaron a Valverán a cortar el paso a los dinamiteros de Sabero, únicos renegados de la montaña.
Los periódicos les dieron mucho "bombo". Los diputados les ofrecieron cuantiosas recompensas. ¡Claro! Eran los tiempos del parlamentarismo, de ofrecimientos "irrealizables", del politiqueo caciquil, e ignoraban esos viejos políticos que aquellos guerrilleros, ni buscaban mangoneos ni "enchufes" ni caciquismo. Buscaban justicia, guerra y revolución a la masonería, al judaísmo y a todo lo que oliera a anti-patria.
¡Lo han demostrado hoy muy claro! Son los que, acompañados del resto de la montaña riañesa, segunda Navarra, a falta de otros medios, detuvieron al Marxismo, los primeros días del Movimiento con una muralla de corazones, como decía hace poco nuestro camarada Mantecón, son los que, al principio de la revolución, y entre miles de escaramuzas y aventuras quijotescas, formaron los frentes de Soto, Portilla, La Uña y Maraña. Son los que en estos mismos frentes, por ellos formados, habían de ser más tarde el dique y "cinturón" infrangibies, donde se estrellasen los tan tristemente célebres rojillos asturianos.
Con gallardía y heroísmo, y con ánimo siempre firme, lo demostraron repetidas veces los valientes e invictos defensores de Soto, llegando a rayar en lo heroico e insuperable en aquel tan justamente famoso cuatro de octubre.
Lo demostraron, y en el mismo día, los de la Centuria de Oseja, en la defensa de Covarcil y, más arde del resto del Tercio, en la de La Uña y Maraña.
Y son, también, los que allá en los picos de Beza y de Niajo y de Ten, se pasan días y días, noches y noches, y hasta semanas enteras en constante vigía, con hambre algunas veces, con sed muchas y con miles de calamidades a cada instante, propias, naturalmente, de toda guerra.
Del frente de Matallana
Primer aniversario de los Camaradas caídos en Valdeteja
Teniente: Victoriano González Rodríguez
Camaradas: Agustín Suárez González; Nicanor Diez Rodriguez; Manuel Martínez Brugos; Federico Rodríguez Tabernero; José Láiz Suárez; Alfredo Alvarez Fierro; Fidel González; Santiago García.
¡Presentes!
No hace más de un año, viejos camaradas, que habían vestido la gloriosa divisa azul en las horas duras de la persecución, en las horas trágicas para la patria, guiados por el entusiasmo que en sus pechos ardía, dieron, como héroes y como buenos, sus vidas en los campos de batalla en aras del supremo ideal: Dios Y España.
F. E T. y de las J. O. N. S., ha querido rendir el homenaje póstumo a estos caídos en el primer aniversario de su muerte. Fúnebres exequias, paños negros, solemnes actos que recordaron a los camaradas que hoy hacen guardia sobre los luceros.
En la capilla instalada en la sala de sesiones del Ayuntamiento, tuvo lugar el fúnebre acto. Una multitud inmensa, del pueblo junto con soldados y falangistas Junto rindió una prueba inequívoca de adhesión a los mártires de la Causa Nacional.
Ocuparon la presidencia autoridades civiles y militares, oficiales del Ejército, el Jefe de la Centuria, brigada de la Guardia civil y familiares de las víctimas.
Celebró la Misa el culto y digno alférez capellán de las fuerzas que guarnecen este frente, el cual, en breves y emocionadas palabras, rindió un homenaje a la memoria de los mártires que regaron con su sangre y sellaron con sus vidas el sagrado ideal de Dios y de la Patria. Se dieron las voces reglamentarias, en medio de una emoción indescriptible.
Camaradas que, orgullosos y alegres, disteis vuestras vidas en aras del ideal: Os tenemos presentes en nuestro afán; vuestro recuerdo es imperecedero; será la estela que seguiremos en nuestra marcha victoriosa y en nuestros corazones estarán grabados eternamente vuestros gloriosos nombres, ante vuestra tumba, en día no muy lejano y os rendiremos el afecto de camaradas y de cristianos.
Camaradas caídos en Valdeteja ¡Presentes!
¡Arriba España!
Un CAMARADA
Matallana, septiembre de 1937. Segundo Año Triunfal.
CNT, órgano de la Confederación Regional de Asturias, León y Palencia, Gijón, 10 de septiembre de 1937
En el sector de Pola de Gordón los rebeldes atacaron las posiciones de Peñas Blancas y la Magdalena.
17 CUERPO DE EJÉRCITO.—A primera hora del día el enemigo hizo fuego de artillería sobre las posiciones del Pinar y Zagueros del Vasco. El enemigo también atacó a primera hora del día por
Aralla y Peñas Blancas, siendo rechazado.
FRENTES DE LEÓN Y ASTURIAS.
Ataques enemigos en el sector de Geras
Por los frentes de León en el sector de Geras, cercano a Pola de Gordón, el enemigo intentó ayer mañana un ataque sobre dos de nuestras posiciones llamadas La Magdalena y Piedras Blancas. Fue apoyado por varias baterías de artillería y abundante infantería pero nuestras Fuerzas resistieron valientemente el empuje rebelde impidiendo que se realizasen los propósitos facciosos.
Por la tarde volvieron a repetir el ataque con mayor intensidad y hubo una pequeña rectificación de la línea que carece de importancia. Anoche contraatacaban nuestras fuerzas con gran ímpetu y aunque las noticias del resultado no llegaron a causa de lo apartado de este frente la impresión era muy optimista.
Bombardeo en la Virgen del Camino
Los aparatos leales realizaron ayer un acto de audacia que se coronó con el éxito más completo. Algunos aparatos de bombardeo y de caza se internaron en la provincia de León llegando hasta el aeródromo de La Virgen del Camino, donde se emplearon a fondo ametrallando y bombardeando varios aparatos de caza enemigos que allí se hallaban concentrados. Después de una acción bastante prolongada y peligrosa los aparatos leales iniciaron el regreso a sus bases a donde llegaron sin novedad.
Manifestaciones del Consejero de Justicia y Orden Público.
Acusados de realizar actos derrotistas, han sido detenidos varios responsables de organizaciones obreras de Colunga.
El consejero de Justicia y Orden Público, compañero Rafael Fernández, al recibirnos ayer nos hizo las siguientes manifestaciones:
En estos momentos, la obligación de todos los dirigentes de organizaciones sindicales y partidos políticos del Frente Popular, es conservar no sólo la moral, sino contribuir a fortalecer la ajena, Si ha de sancionarse toda actividad de los ciudadanos del Norte que vaya encaminada a rebajar en lo más mínimo la moral de la vanguardia y la retaguardia, la sanción ha de ser más dura, más ejemplar y más rápida cuando los actores son hombres que llevan sobre sí la responsabilidad de la dirección de una organización.
Firme en este propósito, he ordenado las detenciones siguientes: Luis López Cristóbal, Emilio Gutiérrez Victorero, Servando Bernardo y Arcadio González Granda, responsables de dos organizaciones obreras da Colunga, que se dedicaron a la realización de hechos de carácter derrotista, habiéndose levantado el correspondiente atestado y pasar lo actuado al Tribunal Especial que entiende en los delitos de alta traición, derrotismo y espionaje.
Se utilizará a los presos en las obras de fortificación
Nos dijo también que se había concedido autorización al presidente de la Comisión Colaboradora del Estado Mayor en materia da fortificación, José Barreiro, para que visite las prisiones de Avilés, Pola de Lena, Siero, Villaviciosa y las dos de Gijón, y de acuerdo con los forenses y los directores de las mismas clasifiquen los presos atendiendo a su edad y condiciones físicas, al efecto de que todos los aptos para trabajar sean destinados a brigadas de fortificaciones.
Varias detenciones
El consejero terminó manifestándonos que habían sido detenidas y puestas a disposición del Juzgado de Urgencia las vecinas de Granda (Siero) Nieves Galán Suarez, Josefa Villanueva Palacio y Amelia Galán Folgueras, por hacer manifestaciones fascistas, e impuso una multa de mil pesetas a Arturo Fernández, fondista de Carreña de Cabrales, por emitir vales sin autorización de Hacienda.
El Liberal, Año XXXVI, Número 11594, 10 de septiembre de 1937
En el sector de Pola de Gordón los rebeldes consiguieron ocupar Peñas Blancas y La Magdalena.
La Libertad, Año XIX, Número 5453, 10 de septiembre de 1937, Madrid
La Aviación leal bombardea un aeródromo de León, ametrallando los aparatos que había en él, y una concentración enemiga entre Llanes y Meré, produciéndole muchas bajas
Gijón 9 .- Por su parte nuestra aviación ha prestado dos importantes servicios. Por la mañana bombardeó el aeródromo de la Virgen del Camino, en León, ametrallando dos aparatos que había y ocasionándoles bastantes daños; después bombardeó una concentración enemiga que se observó entre Llanes y Meré y una columna motorizada que iba por la carretera. Nuestros aparatos descendieron a escasa altura y la ametrallaron y disolvieron, produciéndole bastantes bajas. Cuando realizaban nuestros aviones este servicio se presentaron cuatro monoplanos y once fiats, entablándose combate. Los cazas republicanos obligaron a huir a los aviones facciosos, Un fiat resultó tocado sensiblemente, pues se le veía cabecear y perder altura.
En el frente de León, los facciosos, apoyados por artillería, con bastantes fuerzas, atacaron nuestras posiciones en el sector de Geras, cerca de Pola de Gordón. Se luchó durante todo el día con mucha intensidad, y aunque hubo, precisión de efectuar un pequeño repliegue, nuestras tropas están contraatacando con gran entusiasmo y valentía, ignorándose el resultado de la lucha.
Justicia social, Órgano de la Federación Socialista Menorquina y de la Federación Obrera de Menorca, Epoca III, Año VII, Número 403, 10 de septiembre de 1937
Partes del Ministerio de Defensa
VALENCIA 9. El texto del parte facilitado a las 24 horas por la Sección de Información es como sigue:
EJÉRCITO DEL NORTE
En el Sector de Pola de Gordón los rebeldes consiguieron ocupar Peñas Blancas y La Magdalena.
Diario de la Marina, periódico oficial del apostadero de La Habana, Año CV, Número 217, 11 de septiembre de 1937, La Habana
SALAMANCA, septiembre 10, (The N. Y. Herald Tribune,) — Las fuerzas nacionalistas iniciaron hoy un nuevo movimiento de avance al norte de la provincia de León y al oeste de Asturias rompiendo los frentes gubernamentales. El ejército nacionalista avanza sobre Pola de Gordón habiendo ya conquistado los pueblos de Dueñas, Santiago y Olleros, en dirección a la Robla, en cuyas proximidades se hallaban los nacionalistas al anochecer de hoy. La nueva ofensiva en el frente norte se ha completado con el ataque al sur de Oviedo en las estribaciones de Sierra Pajares. En la parte oriental del frente de Asturias tan solo en el día de hoy los ejércitos nacionalistas han conquistado unos 300 kilómetros cuadrados estando bajo su dominio las carreteras de Panes y Mier y tomando el pueblo de Rebollada. Las brigadas de Navarra avanzaron rebasando los pueblos que se hallaban en la vanguardia en la dirección del norte ocupando varias cumbres hacia el oeste del Macizo de Biforcas.
Otras columnas desplazáronse en dirección sur sobre el Valle de Deva, dominando una extensión de más de veinte kilómetros de la carretera de Arenas y quedando bajo el fuego de la artillería nacionalista todos los pueblos que bordean esta ruta. A última hora del día se hallaban las fuerzas del general Franco a la vista de Cangas de Onís habiendo alcanzado la meseta que domina las alturas de Cubillas.
Los estertores de la agonía de Moscú en España
SALAMANCA, septiembre 10. (The N. Y, Herald Tribune.) — A pesar del mal tiempo y las lluvias torrenciales se ha continuado el avance en los límites de las provincias de León y Asturias cortándose el frente rojo en dos puntos distintos, consiguiéndose el objetivo de tomar los picos de Oblanco al Pico y Peña Millota situados a mil cien y mil ochocientos cincuenta metros de altura. Los pueblos de los Barrios y San Pedro de Luna han quedado en poder de las fuerzas del General Franco hasta la Robla, punto final del Ferrocarril a Balmaseda, siendo la Robla el empalme con el Ferrocarril de Madrid a Oviedo que pasa por León. Las estribaciones de Peña Urbina sobre la divisoria de las provincias de León y Asturias en las inmediaciones de Puerto Pajares, están dominadas ya por las fuerzas nacionalistas.
La prensa nacionalista comenta la situación europea en relación con la conferencia sobre el Mediterráneo considerando el gesto soviético como la última manifestación desesperada de la política de intervención rusa en los asuntos de España. La victoria de la España nacionalista impedirá que tenga realidad el propósito soviético. Y como los últimos sucesos acusan el fracaso definitivo del ejército rojo, la política de Moscú intenta ahora envenenar el ambiente político de Europa para obstaculizar el triunfo aplastante de las fuerzas de Franco.
Agence Espagne, informations télégraphiques et téléphoniques de dernière heure, Número 239, 11 de septiembre de 1937
En el Frente de León muchos ataques de los rebeldes contra Geras y Caldas de Luna, que fueron repelidos. Nuestras posiciones de Fontañán también fueron fuertemente atacadas, pero nuestras fuerzas resisten. Los facciosos han conseguido introducir una cuña entre Pola de Gordón y Geras.
CNT, órgano de la Confederación Regional de Asturias, León y Palencia, Gijón, 12 de septiembre de 1937
Ataques contenidos en Caldas de Luna
En los frentes de León el enemigo persistió en sus ataques a nuestras posiciones de Caldas de Luna, pero nuestras fuerzas se mantuvieron en las mismas después de una gran resistencia, producto de la cual el enemigo quedó bastante quebrantado, sufriendo buen número de bajas. Igualmente fueran fuertemente atacadas las posiciones de Fontañán, resistiendo también nuestras tropas.
Después de una intensa acción artillera y utilizando toda clase de fuerzas, los facciosos consiguieron introducir una cuña entro Pola de Gordón y Geras, obligando ello a un pequeño repliegue de nuestras fuerzas que pasaron a ocupar otras posiciones sólidamente fortificadas.
El Liberal, Año XXXVI, Número 11596, 12 de septiembre de 1937
PRESIÓN ENEMIGA POR EL FRENTE DE LEÓN
GIJÓN, 11. Ha continuado la presión del :enemigo, especialmente en el sector comprendido entre Pola de Gordón y Caldas de Luna. El enemigo consiguió situarse en condiciones de amenazar seriamente la única carretera de nuestras posiciones en esa zona. Los ataques fueron contenidos, causando a los rebeldes numerosas bajas.
Los facciosos, apoyados por enorme masa de artillería, continuaron presionando y el Alto Mando ordenó un repliegue a otra linea más fuerte. El repliegue se hizo en forma maravillosa. La nueva linea ha quedado guarnecida perfectamente. Nuestras tropas han recibido orden de evacuar varias posiciones, entre ellas Geras, Aralla, Caborana, Fontañan y el pueblo de Pola de Gordón.
La aviación facciosa realizó después un terrible bombardeo sobre este pueblo, que ha quedado totalmente destruido, no tanto por la fuerza explosiva de las bombas, sino por los incendios consiguientes. Como el pueblo fue evacuado a su debido tiempo, no ha habido que lamentar más que los daños materiales, de tal magnitud, que Pola de Gordón ha desaparecido del mapa. —Febus.
Diario de Almeria, periódico independiente, Año XXVI, Número 7192, 12 de Septiembre de 1937
SIGUE LA PRESIÓN ENEMIGA EN EL NORTE
Gijón, 12, 2 madrugada.— Hoy ha continuado la presión enemiga en el frente de León. Ante la amenaza de los facciosos por cortar la única carretera de esta, nuestras fuerzas hubieron de hacer un repliegue. La artillería ha disparado incesantemente contra nuestras posiciones. Se ha procedido a la evacuación de Geras, Aralla, Fontañán y Pola de Gordón.
La aviación facciosa ha hecho algunos bombardeos sin objetivos. Uno de ellos ha sido sobre el pueblo de Pola de Gordón, quedando materialmente destruido, y puede decirse que Pola de Gordón ha desaparecido del mapa. — Febus.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 254, 12 de septiembre de 1937
Continúa brillantemente el avance de nuestras fuerzas en el frente de La Robla
Las operaciones en el frente de León
Nuestro "cacharro" ha tenido hoy un día de verdadero trote; kilómetros y más kilómetros se ha tragado con una facilidad pasmosa, y ya de tarde, cuando desde La Robla nos queríamos dirigir hacia La magdalena, vimos nuestro viaje truncado a la entrada del pueblecito de Olleros por varias voladuras de la carretera, obra todas ellas de los rojos.
Este pueblín, de Olleros que oficialmente no era ni rojo ni azul, aunque de hecho valía de guarida nocturna para los mineros asturianos, tiene el aspecto de tristeza y desolación, propio de un lugar sin habitantes, pues los vecinos de él fueron evacuados hace ya tempo, por orden del mando nacional, cuando éste no creyó con las garantías suficientes de seguridad su estancia allí. Es este pueblo donde al hacer una descubierta halló muerte gloriosa el capitán Rubial, no hace aún mucho tiempo. Para entrar en el pueblo; sin un alma como digo, tuvimos que salvar las voladuras de la carretera por tierras y sembrados.
Este es el único inconveniente que existe para que el tráfico de la carretera de La Magdalena a La Robla vuelva a abrirse normalmente, pues por ella no se oye ya ni un tiro, solamente allá, a lo lejos, el ronco estampido del cañón, debilitado por la distancia.
Y en el pueblo, suciedad, la suciedad de siempre que se aumenta en las casas de mejor aspecto, sin duda porque en ellas habitaban mas los marxistas cuando al pueblo bajaban.
En La Robla, ansias de avanzar de nuestros camisas azules, con los que compartimos durante nuestra estancia allí y que por exigencias del servicio, ha quedado en dicho punto.
Desde una posesión nacional, en la que se domina perfectamente el pueblo de Pola de Gordón, aparece ante nuestra vista en esta tarde fría y brumosa un espectáculo que nos indigna y es el ver todo el pueblo convertido en una inmensa hoguera, pues los rojos, siguiendo su criminal actuación de Vizcaya, antes de huir lo prendieron fuego por los cuatro costados.
Son las cinco y media de la tarde y desde nuestro puesto de observación, apreciamos perfectamente como el enemigo huye a la desbandada por unas lomas que dominan la Pola, perseguidos tenazmente por el fuego mortífero que les hacen nuestras máquinas automáticas. Mientras tanto nuestras piezas de
artillería baten con precisión 1a carretera más adelante de la Pola desbaratando así la retirada marxista.
El incendio de la Pola desde este punto en que nos encontramos presenta un aspecto verdaderamente fantástico y nuestros puños se crispan violentamente al pensar que esto es al fin y al cabo lo único que saben hacer.
Según manifestaciones de un evadido rojo, con el que tuvimos ocasión de hablar breves momentos, nuestra aviación de la Virgen del Camino en su actuación de antes de ayer por la tarde, les hizo un número crecidísimo de bajas, confirmando estas manifestaciones las hechas en nuestra crónica de ayer.
Antes de ayer mismo, ordenó el mando rojo la evacuación total de la población civil de Pola de Gordón, haciéndolo también los dirigentes y sus familias llevándose toda ciase de muebles y enseres de vestir. Este mismo evadido nos afirma haber sido movilizadas las quintas de veinte y del veintiuno, por cierto que a esta última pertenece el mismo, habiendo sido por ello incorporado hace tres días en Pola de Lena.
Cuando a las seis de la tarde abandonábamos nuestro observatorio, el estampido seco e hiriente de las bombas de mano en las cercanías de Pola de Gordón, llegaba a nuestros oídos como un mensaje de liberación.
En la visita que hicimos por la mañana al ala izquierda, observamos en las cercanías del pueblecito de Oblanca unas magníficas trincheras con triples lineas de alambradas en las que por cierto colgaban enormes campanones de los que usa el ganado, sin duda alguna para evitar que por la noche los sorprendieran nuestros muchachos cortándolas; ignorando que la muchachada azul cuando tiene que cortar alambradas lo hacen siempre de día, cara al sol y con la sonrisa a flor de labio porque van movidos por impulsos de imperio.
Nuestro Mando había abandonado desde ayer toda preocupación respecto al enemigo, ya en franca huida, y paternal siempre sólo le preocupaba el temporal por las incomodidades que del mismo pudieran surgir para sus soldados.
Era preciso por lo tanto una vez que ya se había roto el frente enemigo, trasponer con toda la rapidez posible la alta montaña en la que soportaron las tropas las inclemencias del tiempo a más de dos mil metros de altura y bajar a los valles, donde estarían más resguardadas, y como se lo propuso el Mando así se ha realizado.
En virtud de los avances efectuados hoy, la carretera de San Pedro de Luna a Pola de Gordón es totalmente nuestra. El enemigo se mostró impotente ante el empuje arrollador de nuestras centurias y nuestros soldados, abandonando las posiciones que tenían. La formidable posición de Fontanán, un verdadero modelo de fortificación permanente, ha caído en nuestro poder; por lo tanto el boquete de La Robla ha quedado abierto.
En tres días se han ocupado, a pesar del temporal reinante, ciento cincuenta kilómetros cuadrados de alta montaña.
Ayer, nuestro ala izquierda avanzó la linea Milota, ocupando Peñacastro, La Collada y Geras. Nuestro ala derecha completó la rotura de la linea enemiga, ocupando el macizo de Santas Martas y la posición de Muezca, además del Fontañal, avanzando sus reservas hasta la linea Pola de Gordón, Cabornera y Paradilla, quedando por lo tanto, como decimos anteriormente, la carretera de San Pedro de Luna a Pola de Gordón en nuestro poder.
Algunas de nuestras unidades se encuentran, ya al norte de dicha carretera, ocupando fuertes posiciones que la cubren.
Y ayer, como siempre, una muestra más de cómo el bando rojo engaña a sus gentes.
Cuando las fuerzas de España se encontraban tranquilamente en esta carretera ya suya, una camioneta cargada de municiones y procedente de la zona roja, creyendo aún suyo aquel terreno ya liberado, venía tranquilamente a abastecer a las fuerzas marxistas. Un alto y unas expresivas gracias por el regalo; eso fue todo.
Hasta pasado mañana.
La guerra en la montaña leonesa
Hacia el valle de Gordón
PARA LOS COMODONES
Quienes el jueves (9 de septiembre), al empezar las operaciones en este sector
de la montaña leonesa de San Pedro de Luna Carrocera, se habían metido ya de rondón, claro está que desde la mesa del café o el mostrador del bar, en Villamanin, en Busdongo, en
Pola de Gordón y en el mismísimo Puerto de Pajares, debían haber venido con nosotros
en esta fresca mañana del día
siguiente, viernes, siquiera hasta el pueblecito de Aralla que ya quedaba a retaguardia del lugar donde hombres de temple, soldados españoles, bomba en mano y machete calado, esperaban a poder ir subiendo, gateando, gateando por aquellos colosales picachos cortados a veces como con una inmensa
cuchillada vertical.
- ¡Pero hombre! si de San
Pedro de Luna a Pola de Gordón hemos ido Fulano y yo en
una media hora...
Así discurren algunos sin
parar mientes que de Pola de
Gordón a La Robla se va en
cinco minutos y los rojos no
han podido entrar en La Robla
(y se lo han propuesto) en un año..
Si señores comodones que
pasáis a toda velocidad de un
buen coche por esos sitios sin
daros cuenta ¡ahora! de que las
"hoces'' leonesas, los desfiladeros de esta "arrugadísima" montaña son lo peor de España en
esta clase de guerras, no sólo
por sus alturas imponentes y escarpadas sino por la densidad
por la espesura de montes que
agrupados tan juntos no dejan
valles ni desfiladeros para moverse con holgura.
Por otra parte ¿cuantos caminos y carreteras hay por
aquí para hacer esas hábiles maniobras de "copos" de Vizcaya
y Santander, plagados de caminos.
EN ARALLA
Pero ya estamos cerca de Aralla. Ya nos alcanzan los tiros de la artillería roja, si tira.
, Y, un poco más allá nos alcanzan ametralladoras y fusiles. Y hasta un morterazo abolló el ala derecha de este auto de
Cantalapiedra, ya famoso en todos los pueblos que recorre. Un auto que ha resuelto la distribución del trabajo admirablemente; hay que empujarle desde Santo Domingo a Guzmán
para que vaya a la estación del Norte. La mitad del camino le
empujamos nosotros. La otra
mitad nos lleva él. ¡A ver si no se distribuye bien el trabajo y no resulta entretenido!...
Ya estamos al alcance de las
ametralladoras rojas. Tanto que una de la milagrosamente, porque se ye y no se cree, escasas bajas de la mañana, un chófer hablando conmigo, ha caído herido, allí mismo y me da una fuerte impresión porque no sé a que atender... Si al herido, si a mí, si a los soldados que me dicen que
me guarezca de lluvia y balas.
¡Perdone el chófer!... Me que
da como un remordimiento de
conciencia por haberme aturdido...
Ya estamos aquí; ya vemos
una fase de la lucha en este intrincado frente leonés. ¡Pasen
los señores comodones!... Ahí
detrás, señorea estrategas, están
Geras, Los Barrios de Gordón,
Pola, Villamauín... Todos los
pueblos que vosotros recorríais alegres en excursiones veraniegas o dominical, en buenos
coches, ¡Pasad ahora!...
No os importe ni la artillería roja, ni los fusiles, ni las
ametralladoras marxistas ¡Pasad!... Todavía, a estas horas,
podéis comer en el alto del
Puerto. ¡ Pasad !...; nosotros creemos que
"pesa" mucho un ejército moderno de miles de hombres y
centenares de vehículos que vemos aquí y allá en largos convoyes.
Nosotros creemos que estos
hombres a pesar de lo sufrido,
de lo robustos, de lo pacientes que son, necesitan comer, beber, dormir, protegerse contra
la lluvia y el frío, que aprieta
tanto que en la capital han salido los abrigos a la calle; creemos que necesitan disparar cantidades enormes de municiones, creemos que para transportar
hombres víveres y municiones
hacen falta estos centenares de
vehículos, y que éstos necesitan
gasolina, piezas de recambio,
etcétera.
Creemos que necesitan la carretera para andar, y alabamos a
estos soldados de Ingenieros
que arreglan los cortes y voladuras con sinfonía de disparos
rojos...
Creemos que las fuerzas necesitan comunicarse, alabamos
a quienes tendieron rápidos los
teléfonos de campaña.
Y alabamos al motorista que
sirve de enlace, y al de Intendencía que amasa el pan y lo sube
a primera línea, y el de Sanidad
que acude con la camilla y la
ambulancia rápidamente;.. Y
al artillero que espera la orden
para poner la certera granada
ea su sitio...
Y sobre todo alabamos a estos muchachos de Infantería, a
estos Regulares, falangistas y
requetés que, mal abrigados
con una manta, bajo la lluvia
el ojo al punto de mira del fusil esperan el momento de darle al gatillo para ahuyentar de
los riscos al marxista, como hacían en el momento en que regresábamos a León en éste "histórico" auto dé Cantalapiedra.
Al que no alabamos es a usted, señor comodón, que después de comer bien y puro en
boca entiende la guerra como
pescar truchas en el río Luna.
Lamparilla
Del frente de San Pedro
Una visita al valle de Aralla
Con el fin de recoger sobre
el terreno las impresiones de la
jornada del día, llegamos a San
Pedro a las tres de la tarde, y
poco después subimos por la
carretera de Aralla, basta hace
breves momentos cerrada al
tránsito y enclavada en zona
roja. Los macizos montañosos
de derecha a izquierda del valle
están ya desde hace horas en
poder de nuestras fuerzas, que han llevado a cabo una labor
nada fácil al desalojar al enemigo de sus posiciones, algunas
de ellas verdaderos atrincheramientos, como esta del monte
que domina la carretera de Luna y desde donde funcionaba
frecuentemente una ametralladora contra los vehículos o gentes que cruzaban aquélla, habiendo despertado muchos temores y hecho de aquel paso un
lugar de verdadero peligro. En
esta posición gastaron los rojos
buena cantidad de dinamita, y
horadado como verdaderos enemigos de la luz y de las granadas de nuestra Aviación. Hoy
quisieron defenderla con alguna resistencia, pero fueron rápidamente vencidos y duramente castigados.
Seguimos caminando hasta las proximidades de Aralla,
pueblo recientemente conquistado, desde donde dominamos todas las alturas que confinan el horizonte y presenciamos, el teatro de las operaciones. Es una extensión de varios
kilómetros de terreno dificilísimo caído en nuestro poder. En la famosa "Collada" no parece que el, enemigo haya ofrecido o trate de ofrecer nuevamente mayor resistencia, pues
apenas si se oye un tiro por esta
parte, perfectamenté dominada.
En el pueblo no ha quedado
un solo paisano, según nos manifiestan algunos soldados que
regresan del mismo, y ofrece
un aspecto lamentable y desolador. El mismo que presentan
los campos, cuyos prados y centenales no han sido aprovechados ni recogidos los frutos. De
todas suertes nuestros soldados
coronan todas las alturas próximas y avanzan imperturbables hacia adelante, y en el valle, hecho para la paz, la paz
renace entre gestos heroicos y gritos de triunfo.
Una brigada de Ingenieros reparan los tajos dados por el
enemigo en la carretera, cortada por cuatro, o cinco sitios, con
zanjas de gran anchura, y extraordinaria profundidad. Una
fila de camiones esperan el paso, que ha de ser inmediato, para seguir con su carga hacia el
pueblo. Es un convoy de víveres.
Cambiamos impresiones con
algunos oficiales. Están verdaderamente satisfechos de la operación, que continúa desarrollándose triunfalmente. Todo
el valle de Aralla es nuestro, y
el pueblo está rebasado en varios kilómetros, sonando algún que otro tiro, de nuestras
fuerzas por supuesto, en el último macizo del horizonte, camino de Pola de Gordón.
Floro de Luna
Agence Espagne, informations télégraphiques et téléphoniques de dernière heure,Número 240, 12 de septiembre de 1937
En el frente de León el enemigo ha hecho una gran presión sobre nuestras posiciones del túnel y de la carretera en construcción de Aralla a Villas, después de haber ocupado la altura de Castro, y las de Vega de Gordón y de Villas.
En el frente de León, prosiguen su avance los soldados de España
Algunos batallones enemigos quedaron destrozados
Se ha cogido mucho material y armamento
EJERCITO DEL NORTE
FRENTE DE LEÓN, — Continúan nuestras fuerzas avanzando en este frente y conquistando posiciones al enemigo, el cual en los combates de hoy ha sufrido gran quebranto, habiendo quedados destrozados algunos batallones y dejaron abandonados en su huida muchos muertos, entre ellos un jefe y un capitán. Se han hecho 51 prisioneros y cogido numeroso armamento y material, aun sin clasificar.
Victoria contundente en toda la línea astur-leonesa
(EXCLUSIVA PARA LA HOJA OFICIAL DE LA CORUÑA)
León 12.-El tiempo ha sido hoy bastante más sensato que en días anteriores, y con ello las operaciones marcaron un ritmo decisivo en esta lucha por las montañas leonesas, que dan paso a las turbas agónicas de Belarmino. Nuestra aviación pudo emplearse con buena actividad, lo que dio por resultado una amplia victoria en ambos sectores que se refleja en el avance profundo conseguido por las columnas.
Hoy se ha dado una doble batalla al enemigo. Por el ala izquierda, con objeto de desembocar en los valles de Cubillas y Casares, siendo ocupados estos pueblos tras una lucha bastante fuerte, toda vez que los rojos con objeto de impedir este avance, que ya se marca con caracteres decididos, habían reforzado sus batallones con otros traídos rápidamente de Gijón, entre ellos, con el célebre batallón “Mejico”, uno de los diezmados en Vizcaya, que, luego de reorganizarse, ha venido a sufrir un gran castigo en las rutas que conducen a Pajares.
La actuación de la Artillería y Aviación fue tan certera que el comandante del “Méjico” y un capitán que huían en un coche por la carretera de Paradillas, fueron alcanzados por nuestros disparos, que los dejaron tumbados a orillas del camino. Por el ala derecha se pudo cruzar la carretera de Casares a la
altura de Beberino, envolviéndose por el Norte la totalidad de las posiciones que batían la entrada por La Robla. Aquí fue donde la Aviación se empleó con mayor eficacia, bombardeando con violencia las posiciones enemigas, que fueron luego brillantemente conquistadas.
Sólo en el sector de Geras fueron batidos los batallones 232, 202 y 201, haciéndoles una verdadera carnicería, y siendo perseguidos después con ímpetu desatado por los soldaditos. Cuando huían en 20 camiones, más allá de Viadangos, la Aviación, en un alarde de técnica, y a poca altura, ametralló los restos desmoralizados de las famosas fuerzas de choque.
Todas nuestras unidades de tierra y aire han superado hoy su entusiasmo y su elevada acometividad, lográndose de manera clara los objetivos previstos. Así, la columna que partió de Monte Castro, ocupó Cubillas, Casares y un camino que va a este último, por Peña del Águila.
Las columnas de la derecha ocuparon Ballina, el pueblo de Buiza, Beberino, Vega de Gordón y las cuestas de los Llanos y Garma, ya situadas al Este de Pola de Gordón. Como va dijimos, por efecto de la hábil maniobra el enemigo abandonó la posición de Fontañán, que domina todo el camino de La Robla sobre el ferrocarril a Giión.
A pesar de haberse señalado la presencia de varias baterías del 10,05 en la linea fortísima que al Este y Oeste de la carretera del ferrocarril había situado el mando rojo, los milicianos hubieron de abandonar esta linea sobre el valle del Bernesga con una profundidad de varios kilómetros.
La victoria ha sido contundente en toda la línea, dejando abandonado el enemigo gran cantidad de material de guerra y fortificación, y vestuario, y se le cogieron medio centenar de prisioneros. Por todo ello, las bajas de nuestras fuerzas no han llegado a veinte, lo que supone apurar hasta el límite la economía de material humano, a pesar de ser el terreno de lo más abrupto de España y a pesar de esta tenacidad roja de defender a toda costa una situación que ya tienen perdida, mucho más aun, después de la jornada de hoy. Lo esencial es que el tiempo se mantenga firme en su bonanza, y entonces veremos de lo que son capaces estas fuerzas que con tanta suficiencia y estrategia manda el general
Aranda, por lo más intrincado de la cordillera Cantábrica.
J. A.
Justicia social, Órgano de la Federación Socialista Menorquina y de la Federación Obrera de Menorca, Epoca III, Año VII, Número 405, 13 de septiembre de 1937
Partes del Ministerio de Defensa
VALENCIA 11. El texto del parte facilitado a las 24 horas por la Sección de Información es como sigue:
EJERCITO DEL NORTE
En el frente de León varios ataques de los rebeldes contra Geras y Caldas de Luna fueron rechazados. Nuestras posiciones de Fontañán son fuertemente atacadas, pero las fuerzas propias resisten. Los facciosos han conseguido introducir una cuña entre Pola de Gordón y Geras. En el sector de Villamanín se ha rectificado ligeramente la línea.
Labor, Año IV, Número 287, 13 de septiembre de 1937, Soria
Crónica del frente de León
Pola de Gordón incendiado por los rojos
León 12. —Cuando esta mañana llegamos al pueblo de Aralla, un pueblo. triste, desolado, sin habitantes que le diesen normalidad de vida, conocimos la horrible noticia, la mala nueva de otra gran hazaña marxista, es decir, que los rojos antes de abandonarla habían prendido fuego a todas las casas de Pola de Gordón.
El auto vuela con ansia de información hacia las alturas de La Collada, pero el auto es un guiñapo inservible si no cuenta de antemano con la ayuda de una carretera bien conservada y como los rojos están perfectamente convencidos de esta verdad, se obstinan en poner un dique a la cordialidad, destruyendo todas las carreteras por las que piensa huir, al.emprender el último viaje de regreso a la meta de su ideal. Es preciso caminar a pie los últimos trozos de la Escalada.
La mañana es apacible y llueve con ganas en las cumbres, donde anoche mismo durmieron su reposo
heroico las unidades del ímpetu español. Hace frío. Un frío. de invierno adelantado que acorta los cuerpos y se adentra hacia el entusiasmo con furia de mal enemigo. Las tiendas individuales de campaña, con su alineación improvisada sobre el verde húmedo y espeso, parecen viviendas de un pueblo lacustre.
El paisaje tiene aspecto de épica grandeza, pero el paisaje de las azules cumbres, animadas por el movimiento de la guerra, se achica ante la actividad. de un paisaje de fuego en la llanura. Abajo, en los caminos que el progreso ha facilitado a la civilización, un pueblo está ardiendo, un pueblo que, como tantos otros, está en el tratado de las muestras "civilizadoras" en que la impotencia del marxismo acorralado lo destruye todo con saña.
Pola de Gordón es una continua hoguera en la que, a intervalos, asoman sus llames hacia el horizonte. El ferrocarril, la carretera, los puentes, todo va cayendo ante la potencia destructora de la dinamita.
A las puertas de Pola de Gordón esperan nuestras tropas el momento preciso para pasear la alegría de su triunfo por los pasillos de ascuas. La mirada baja e imprecisa de los morítos de la Mejala denotan su asombro ante los rojos. Acaso piensan igual que aquel otro ciudadano de
Quetama cuando en voz alta, ante la ruinosa catedral de Oviedo, dijo: “Nosotros hemos venido a civilizar".
Cuesta abajo. — Hoy los rojos han: ido cuesta abajo porque los nuestros se han empeñado en bajar de las cumbres. Era mucha la inclemencia y era mucho el granizo para soportar una noche más sobre las altitudes de los 2.000 metros, y los soldados que ayer conquistaron estas posiciones y que esta mañana
coronaron el macizo Muezca, clave de este éxito de las alturas, bajaron presurosos en busca de un albergue y un rincón con caricias de lumbre. Descendieron de Peña Castronera y La Collada y rebasaron los barrios de Pola y para detenerse ante las llanuras de Pola. Esta noche tendrán comida caliente y un lecho sin blandura, pero a cubierto de las iras del temporal.
El camino de Pajares, abierto.— Caminando despacio, han rebasado por el Norte Pola de Gordón, ocupando Cabornera y Paradilla, en el sector derecho aún tuvieron fuerzas para coronar las alturas de Fontañán, posición en la que los rojos cifraban el éxito de defensa del camino de La Robla hacia Pajares. Hoy ha quedado abierto este camino con la ocupación de Fontañán. Fue una gran jornada para la agilidad maniobrera de las fuerzas de Aranda. Como las fortificaciones de esta posición inexpugnable hacía imposible la embestida por La Robla, fue necesario realizar un movimiento de abanico que permitiese atacar por retaguardia. Las columnas tonaron sobre el terreno el mismo giro hecho en los planos por la destreza táctica del general y la posición cayó en nuestro poder con todas sus trincheras de cemento y con todo lo desafiante de sus alturas privilegiadas.
Nuestras tropas también cogieron mucho material y un camión cargado con municiones que, fiándose
más de la cuenta en la inexpugnabilidad de la posición, venía carretera adelante muy indiferente y llegó tarde. Un camión que ya no pudo regresar a Pola de Gordón.
La desgracia nuestra. Cuando regresábamos al atardecer camino de León, vimos un coche destrozado en la carretera y allí mismo conocimos la noticia fatal que nos consternó el ánimo alegrado con una jornada de triunfo. Varios compañeros periodistas reclutaban aquel coche y habían sido víctimas de un accidente grave, en el que encontró la muerte. don Fernando Martínez Morz, viejo periodista de Galicia y uno de los más entusiastas por esta senda de juventud guerrera y animosa. Apenas tuvimos tiempo de conocer al señor Martínez Mora, sólo unos días de trato nos dieron base para exteriorizar un juicio sólido de su caballerosidad, de su cultura y de su afabilidad de trato.
Con su entusiasmo juvenil cayó para siempre víctima del deber.
II AÑO TRIUNFAL
Parte Oficial DEL DOMINGO
Boletín de información con noticias llegadas a este Cuartel General del Generalísimo
hasta las 20 horas del día de hoy:
EJERCITO DEL NORTE. —
Frente de León — Continúan nuestras fuerzas avanzando en este frente y conquistando posiciones al enemigo, el cual en los combates de hoy, ha sufrido gran quebranto, habiendo quedado destrozados algunos batallones que dejaron abandonados en su huida muchos muertos, entre ellos un jefe y un capitán, Se han hecho 51 prisioneros y cogido numeroso armamento y material aún sin clasificar.
Salamanca, 10 de septiembre de 1997 —De orden de S. E. El General Jefe de Estado Mayor, Francisco Martín Moreno.
II AÑO TRIUNFAL
Parte Oficial DE ANOCHE
- Boletín de información con noticias llegadas a este Cuartel General del Generalísimo hasta las 20 horas del día de hoy:
EJERCITO DEL NORTE.—
FRENTE DE LEÓN—Ha continuado victoriosamente el avance de nuestras fuerzas que han arrollado al enemigo desalojándolo de sus posiciones, ocupándose El Cueto, Llombera, todas las posiciones enemigas entre estos puntos y Matallana, vértice Bregón, al Norte de Vega de Gordón, quedando restablecida completamente la comunicación por carretera y telegráfica entre La Robla y Pola de Gordón. También han sido ocupados Tella, Cueto, cota 1.749, al Noroeste de Geras; Peña de Muezca, Turrón, al Noroeste de Casares; Sierra de Chagos y Collada de Carrión. Se han cogido el enemigo dos ametralladoras, 100 fusiles, 40 mil cartuchos y gran cantidad de material de fortificación. En el resto de estos frentes tiroteos sin consecuencias. Presentados 11 milicianos con armamento.
ACTIVIDAD DE LA AVIACIÓN.—En el Norte nuestras baterías antiaéreas derribaron un caza tipo “Curtis”, cuyo piloto se arrojó en paracaídas, siendo hecho prisionero.
Salamanca, 13 de septiembre de 1937.—De orden de S. E. el General Jefe de Estado Mayor, Francisco Martín Moreno.
Justicia social, Órgano de la Federación Socialista Menorquina y..., Epoca III, Año VII, Número 406, 14 de septiembre de 1937
Partes del ministerio de defensa
VALENCIA 13. El texto del parte facilitado a las 24 horas por la Sección de Información en como sigue:
EJÉRCITO DEL NORTE
En el frente de León, el enemigo ocupó la loma de Turrón y atacó por Llombera, Huergas y sector de Pola de Gordón en dirección a Santa Lucía. Al Oeste de estas posiciones fueron ocupados por el enemigo el Valle de Casares y la Sierra de Chagos, al Norte del mismo.
Región, diario de la mañana, Año XV, Número 4273, 12 de septiembre de 1937, Oviedo
POLA DE GORDÓN HA SIDO DESTRUIDA POR LOS ROJOS
La carretera de este pueblo a San Pedro, está en nuestro poder. 150 kilómetros cuadrados han sido ocupados en tres días de ofensiva
Crónica oficial del cronista de guerra de la VIII División en los frentes leoneses.
MALLEZA, 11.— Han basta.do dos días de ofensiva para dar al traste con la resistencia que los rojos pretendían oponer en este frente. En estos dos días hemos podido observar como la curva de su moral combativa descendía casi verticalmente. Al principio había que ir a buscarlos a sus madrigueras, donde algunas veces aguantaban al amparo del terreno y en no pocas posiciones fue necesario desalojarlos a la bayoneta. Ahora es ya otro enemigo. Nada tiene eso de particular porque se confirmó una vez más la psicología del combatiente rojo que combate mientras se cree seguro, pero en cuanto se le toman las primeras posiciones y se rompen sus líneas, como ha sucedido en este caso que se ha abierto la brecha desbordándoles por las alas, quiebran su resistencia por temor a caer en nuestras manos y solo presentan combate lo imprescindible para obstaculizar y retrasar el avance, huyendo en cuanto nuestras tropas se les acercan.
Por eso la única preocupación del Mando en el día de hoy ha sido aminorar en lo posible las penalidades de la tropa, que en algunos lugares tuvo que soportar el temporal a 200 metros de altura, cosa que se ha logrado, pues con el avance de hoy se han rebasado la mayor parte de las alturas y se ha descendido al valle, con lo que las fuerzas quedan mejor defendidas y abrigadas contra las inclemencias del tiempo.
Así se llegó después a romper la línea enemiga del macizo de Santas Martas al ocupar Menza y avanzar hasta la línea de Pola de Gordón, Carbonera y Aradilla con lo que ha quedado completamente en nuestro poder la carretera de San Pedro a Pola de Gordón, continuando después al Norte de la carretera, llegando hasta Cubar y Fontaña, fuertes posiciones enemigas que solo la cobardía pudo perder, pues se trata de posiciones fortificadas tan perfectamente que pueden servir de modelo.
Un hecho vergonzoso, no por ser repetido por los rojos es menos indignante, debo registrar hoy. Lo mismo que han hecho con
Guernica y
Amoraviete impotentes para poder defenderlas han desahogado su rabia y su barbarie sobre Pola de Gordón, saqueándola e incendiándola.
He podido presenciar con tristeza desde el alto de la Collada cómo se sucedían las explosiones de la dinamita que habían colocado en lugares estratégicos para que al llegar a ellos el fuego fueran volando y destruyendo el simpático pueblo que siempre ha sido un sitio predilecto de los asturianos para pasar las temporadas de reposo en la montaña leonesa.
El Mando no ha permitido la entrada en el pueblo para evitar desgracias inútiles, ya que las explosiones se sucedían y era expuesto y de ninguna utilidad el hacerlo.
Sin embargo, en este momento en que por cierto caso la lluvia que durante el día no nos ha dejado en paz me dicen que se dirigen hacia allá algunas patrullas.
Al tercer día de ofensiva hemos ocupado 150 kilómetros cuadrados, no de terreno llano y fácil, sino abrupto, montañoso y difícil, lo que acrecienta el valor del avance realizado.
Me olvidaba deciros que entre el material cogido ha llegado a nuestro poder un camión cargado de municiones, y digo que ha llegado a nuestro poder, porque venían tranquilamente por la carretera ignorando su conductor que ya era nuestra, porque sus compañeros no se molestaron en darle cuenta del terreno que habían perdido.
FRENTE DE LEÓN, 11 DE SEPTIEMBRE DE 1987.
Región, diario de la mañana, Año XV, Número 4274, 14 de septiembre de 1937, Oviedo
Un convoy de veinte camiones ha sido destruido por nuestra aviación.
La iglesia, las escuelas y treinta casas de Pola de Gordón, incendiadas.
Cuatro batallones enemigos fueron totalmente aniquilados en los últimos combates
Noticias recibidas en este Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy.
EJERCITO DEL NORTE.
Frente de León.— Ha continuado el victorioso avance de nuestras fuerzas que, arrollando al enemigo, le han desalojado de las posiciones que ocupe en El Cueto, Llomberas, y las posiciones entre este lugar y Matallana, Vértice, Pregón, quedando establecidas las comunicaciones por carretera y telegráficas entre la Robla y Pola de Gordón, Cueto, Tella, cota 1.749 al N. O. de Deroso, Peñas Muesca, Turrón, Sierras de Chagos, Collada y Carrón.
Se han recogido dos ametralladoras, 100 fusiles, 40.000 cartuchos y gran cantidad de material de fortificación.
En los restantes sectores, sin novedad. Se han presentado en nuestras lineas 10 milicianos con armamento.
Salamanca, 13 de septiembre de 1937, II Año Triunfal.
FRANCISCO MARTÍN MORENO,
BOLETÍN INFORMATIVO DEL DOMINGO
SALAMANCA, 12.—Parte oficial de guerra del Cuartel General del Generalísimo,
EJERCITO DEL NORTE.
FRENTE DE LEÓN.—Continúan nuestras fuerza avanzando en ese frente y conquistando posiciones al enemigo, el cual en los combates de hoy ha sufrido gran quebranto, habiendo quedado destrozados algunos batallones y dejando abandonados en su huida muchos muertos, entre ellos un jefe y un capitán.
Se han hecho 51 prisioneros y cogido numeroso armamento y material, aún sin clasificar.
General Jefe de Estado Mayor. FRANCISCO MARTÍN MORENO.
II AÑO TRIUNFAL
Parte Oficial
Boletín de información con noticias llegadas a este Cuartel General del Generalísimo hasta las 20 horas del día de hoy:
EJERCITO DEL NORTE.—
FRENTE DE LEÓN —Las columnas que operan por este frente también han proseguido el avance, ocupándose la Altura de Cueto Negro, hasta las estribaciones de Celleros. También se han ocupado las
minas de Santa Lucía y los pueblos de Villar del Puerto y Valle de Vegacervera y la Sierra de la Corbata, con sus tres cotas de 1.500 y las dos de 1.520. En Pola de Gordón se normaliza la vida, así como los servicios de abastecimiento, agua, luz y comunicaciones, En el resto de los frentes tiroteos sin consecuencias.
Salamanca, 14 de septiembre de 1937.—De orden de S. E. el general jefe de Estado Mayor, Francisco Martín Moreno.
Crónica por SPECTATOR
Frente de Asturias
Por León las tropas han seguido avanzando en busca de los objetivos prefijados:por el mando, y después de dominar ayer los caminos de Pola de Gordón las sierras y montes que circundan esta región, han llegado hoy a otros lugares estratégicos bien definidos en el parte oficial y en los que nosotros no debemos insistir por obligación y discreción ineludibles.
Por si el resultado de la marcha de nuestras tropas no fuera motivo suficiente de satisfacción, hoy corren vientos de rendición y vientos de sometimiento. Porque no proceden de fuente autorizada me limito sólo a recoger el rumor y depositarlo en los oídos de los oyentes que me escuchan, con mucho escepticismo y bastante mal humor. Nos hemos habituado a este sendero victorioso y, aunque parezca monstruosidad, sentiríamos que el enemigo no nos dejase gustar las mieles del triunfo culminante que, en esta fecha y cada hora, se nos antoja más próximo.
Ellos tienen la obligación de resistir hasta la derrota, que coincide con la huida de los cabecillas, y nosotros estamos obligados a entrar en los pueblos con la bandera roja y gualda de la liberación muy alta, sin esperar nada de la rendición, sino del mérito y el valor extraordinario y del sacrificio de la mejor sangre generosa. Así se está reconquistando rápidamente Asturias, y así se llegará, cueste lo que cueste, a Gijón y a Avilés para liquidar este frente, este frente Norte que dentro de poco será el recuerdo histórico de uno de los dramas más atroces, el más atroz, pero el último de los que atormentaron a muestra Patria — (Recibido por la Estación
E. A.-8-A. S.)
La prensa, diario republicano, Año XXVII, Número 10249, 15 de septiembre de 1937, Santa Cruz de Tenerife
Dos magníficas jornadas de las tropas de Aranda
HACIA PAJARES
León, 14.—Hoy han quedado restablecidas las comunicaciones telegráficas y por carretera con Pola de Gordón y mañana se espera que puedan llegar los trenes.
Los ingenieros hacen esfuerzos desmesurados para que el material de municiones y víveres no pierda contacto con las infatigables columnas que marchan, para que el espíritu vibre a través de los hilos del teléfono. Todo ello servirá para animar el pulso vital de un pueblo reconquistado por la España Nacional, en el que hoy mismo el espíritu y la materia estaban inertes, porque Pola de Gordón es el esqueleto de un pueblo que ha quedado sin alma.
A uno y otro lado de la carretera vemos, bajo la claridad otoñal de esta tarde castellana, cómo no se ha extinguido todavía el humo de los incendios y cómo de los hogares sale un clamor de soledad que se extiende a todo el pueblo. Apenas dos o tres mujerucas suplican auxilio para salvar del fuego el poco trigo que, famélicas, pudieron librar de la rapacidad marxista. Unos niños arrastran, sin fuerzas, una mesa desvencijada en la que hacia mucho tiempo que no se compartía el pan familiar. Por todas partes hay dolor de ruina, de soledad; todo silencio y humo. Humo que sale de las escuelas, de la iglesia, de las casas, humo que oculta entre las cumbres toda la riqueza forestal de los bosques vecinos, también destruidos.
Aquel muchachote fornido de la Navarra fuerte y racial, aquel que en las calles de León, con sus jotas valientes, dejó una estela de alegría a su paso para el frente, está allí también en esta hora de las llamas. Toda la alegría de sus cánticos ha cesado y el tono vivo de sus jotas de tierra sana se hace silencio y meditación. Parece como si Navarra empezase a comprender de cerca al marxismo de Asturias.
DOS JORNADAS TRIUNFALES
De franco éxito fueron las jornadas del domingo y de hoy. Prosiguiendo su avance, las columnas que Aranda mueve con su fácil estrategia, por las dificultades de un terreno insuperable, han continuado reconquistando pueblos y escalando cumbres; sobre todo, han continuado escalando cumbres con suprema gallardía.
Ayer, después de desembocar en el valle de Cubillas y ocupar Casares, cruzaron la carretera de Pajares y envolvieron por el Norte todas las posiciones que batían al acceso a Pola por La Robla. Deshicieron varios batallones rojos, especialmente el “Méjico”, que perdió a su jefe y a un capitán y cogieron cerca de 100 prisioneros, al propio tiempo que la aviación cooperaba con el mayor éxito a esta operación y batía una concentración enemiga de más de 20 camiones.
Después de la jornada de ayer nuestras fuerzas siguieron avanzando en el día de hoy, extendiendo su avance por la derecha del ferrocarril y ocupando el Cueto y Llombera, lo que trajo como consecuencia la inmediata caída de todas las posiciones rojas situadas entre esta última posición y Matallana. Por el sector montañoso se ocupó Bregón, al Norte de Vega de Gordón, continuando el avance hacia Peña del
Pozo, otra altura inaccesible, que no pudo ser coronada esta tarde porque cuando nuestros bravos soldados se encontraban próximos al pico, los rojos incendiaron el bosque y hubo de suspenderse la conquista hasta mañana.
Por el ala izquierda, el avance ha tenido caracteres de gran victoria, ya que uno tras otro fueron cayendo en nuestro poder Peña de Cueto, cota 1.749, las Peñas de Muezca y Turrón. Por la tarde, y después de una mañana movidísima de subidas y bajadas impresionantes, fueron ocupándose brillantemente las dos fortísimas posiciones de Sierra de Chagos y Collada de Camín, al Norte y Noroeste de Casares. Aquí fue donde el enemigo intentó una resistencia seria, prodigando su fuego de artillería y armas automáticas; pero nuestros batallones no tienen ganas de perder el tiempo en sus marchas forzadas hacia Pajares, y bien escudados por la aviación desalojaron a los rojos de tan importantísimos reductos, poniéndoles en franca huida.
Abandonados, dejaron los marxistas 100 fusiles, dos ametralladoras y 40.000 cartuchos de fusil, pero especialmente han dejado en nuestro poder mucho material de fortificaciones, todo el material que les ha servido para construir las trincheras formidables y las alambradas que hacían inexpugnables las posiciones conquistadas por la bravura de los nuestros.
En su huida, los rojos han pegado fuego al pueblo de Santa Lucía. Mañana, como hoy Pola de Gordón, será un pueblo en esqueleto, sin el reemplazo espiritual de una vida ciudadana puesta en marcha. Mañana, también, será Santa Lucía humo, cenizas y silencio. (Recibido por la E.A.-8-A.S.)
Diario de la Marina, periódico oficial del apostadero de La Habana, Año CV, Número 220, 15 de septiembre de 1937, La Habana
Consolidándose los nacionalistas en la Pola de Gordón, podrán proseguir el avance.
SALAMANCA, septiembre 14, Havas.—El parte oficial del G. C. G. emitido a las 8 p. m. dice principalmente lo siguiente:
En el Frente de León, las columnas nacionalistas prosiguen el avance, ocupando las cumbres de Cueto Negro; llegaron a las proximidades de Los Celleros; también se han posesionado de las minas de
Santa Lucia, Villar del Puerto y los cerros que dominan a la Pola de Gordón. En esta última ciudad, tan
pronto como los nacionalistas entraron procedieron a consolidar las líneas de fluido, los acueductos y las acequias.
La resistencia roja en las cumbres leonesas.
FRENTE DE LEON, septiembre 14. (Por
Georges Bottó, Corresponsal especial de la Agencia Havas).—
La resistencia de los rojos en el frente leonés es muy fuerte. Nosotros recorrimos la línea León-Oviedo, examinando las posiciones que acaban de conquistarse y también asistimos al ataque de los nacionalistas a las alturas situadas al norte de la Pola de Gordón, sobre el camino de San Pedro de los Burros.
La línea en este sector es muy ondulada; ciertas cumbres están en manos de los rojos, mientras que otras han sido ya conquistadas por los nacionalistas. Para desalojar a los mineros, las huestes de Franco
se ven en la necesidad de emplear una violenta preparación de artillería, sobre cada trinchera, atacando después por ondas sucesivas, llegando algunas veces a los ataques cuerpo a cuerpo, violentísimos, realmente salvajes.
El general Mujica nos ha manifestado que jamás había encontrado resistencia tan intensa en los rojos, en este frente, al menos. Sin embargo, supone que con el avance lento que él realiza, las tropas del general Aranda pueden adelantar también por el norte, desde Oviedo.
La resistencia roja es comprensible, máxime cuando se sabe que los que allí se encuentran, cogidos dentro de la tenaza nacionalista,están decididos a perecer; la mayor parte de ellos tienen tales cuentas pendientes con la justicia, que no podrán someterse.
El Adelanto, Diario político de Salamanca, Año 53, Número 16379, 15 de septiembre de 1937
DISPOSICIONES OFICIALES
Orden de movilización de los soldados del reemplazo de 1929
La rapidez. de los avances de nuestro Ejército, que en breve tiempo ha conquistado una considerable extensión del territorio nacional, capturando a la par muy elevado número de prisioneros que se elevan a docenas de millares apresando crecida cantidad de armamento y material de guerra, crea la imperiosa necesidad de disponer de personal que atienda a los servicios de retaguardia, custodia y orden interior del territorio conquistado y el de las nuevas Provincias que sean liberadas; desarme, recogida de material de guerra y demás cometidos de la segunda línea, para lo que no pueden distraerse a las fuerzas combatientes, que son precisas para las operaciones de guerra.
Por todo ello, es necesaria la organización de batallones de reserva de segunda línea, que constituyan unidades especiales auxiliares de policía y servicios que afectarán a las nuevas zonas liberadas.
A este fin, S. E. el Generalísimo de los Ejércitos Nacionales, ha dispuesto sea llamado a filas el reemplazo de 1929, cuya concentración e incorporación se verificará con arreglo a las normas siguientes:
1.ª La incorporación a fijas del mencionado reemplazo se efectuará en las fechas que a continuación se expresan:
Cuarto trimestre, del 20 al 26 de Septiembre. Tercer trimestre, del 5 al 11 de Octubre. Segundo trimestre, del 20 al 26 de Octubre; y Primer trimestre, del 5 al 11 de Noviembre.
2.ª Quedará exceptuado de este llamamiento, el siguiente personal:
Los que se encuentren prestando servicios en la Milicia Nacional de primera o segunda linea, encuadrados en unidades.
Los .que sean padres de más de cuatro hijos.
Los que trabajen como obreros en las industrias militares, ferrocarriles o empresas militarizadas. Este personal quedará movilizado en sus centros respectivos.
Igualmente quedarán exceptuados, en las condiciones especificadas en los casos anteriores los mineros.
3.ª Los individuos pertenecientes a este reemplazo, comprendidos en alguno de los tres grupos del cuadro de inutilidades, se someterán a la revisión señalada en reemplazos actualmente en filas en la Orden de 7 de Agosto del año actual (“Boletín Oficial” número 291), verificándolo en igual forma y en los días marcados para incorporación de los trimestres a que cada uno pertenezca, según la fecha de su nacimiento.
4.ª Los individuos comprendidos en este llamamiento, efectuarán su concentración en las cajas de reclutas correspondientes, cuyo organismo procederá a destinarlos a cuerpo en la forma y cuantía que expongan los generales de los cuerpos de Ejército.
5.ª También se presentarán en las Cajas de Recluta más próximas al lugar de su residencia, los que pertenezcan a cuerpos cuyas Planas Mayores se encuentren en zona no liberada y su destino se regulará en igual forma que se expone en la norma anterior.
6.ª Los individuos a los que corresponda la incorporación que se hallen en caso de prórroga de primera clase, dentro de análogos periodos de nacimiento, cesarán en el disfrute de la mismas y su presentación y destino se efectuará conforme se expone en las normas cuarta y quinta.
7.ª Los generales de los cuerpos de Ejército, Comandantes generales de Baleares y Canarias y el Jefe Superior de las Fuerzas Militares de Marruecos, darán las órdenes oportunas para que con la mayor rapidez llegue esta disposición a conocimiento de las autoridades locales, las que inmediatamente dispondrán el cumplimiento de ella, dando todo género de facilidades, al objeto de no retrasar en lo más mínimo la incorporación de dichos individuos.
8.ª La falta o retraso en la incorporación, asi como la negligencia por parte de las autoridades, será castigado con arreglo a los preceptos del Código Militar.
9.ª Las dudas o dificultades que puedan surgir en éste llamamiento, serán resueltas por los gobernadores militares de las plazas respectivas, previa consulta, si conviniera, a los generales de los cuerpos de Ejército, comandantes generales de Baleares y Canarias y general jefe superior de las fuerzas militares de Marruecos.
10.ª Terminada la concentración y destino, las autoridades a que se refiere la norma anterior, manifestarán a esta Secretaria de Guerra el número de los incorporados. —
Burgos, 14 de Septiembre de 1937, II Año Triunfal—El secretario de Guerra, Germán Gil Yuste.
Aviones recibidos y perdidos por los rojos en el frente Norte
De toda la documentación de la Aviación roja del Frente Norte que ha sido encontrada al entrar en Santander nuestro glorioso Ejército, se deduce que han recibido y perdido .el siguiente. material de
aviación:
En el mes de Enero llegan embarcados 12 Curtis, que son montados en Santander por rusos, siendo
sus pilotos también rusos. En Marzo, les son enviados por Francia y en vuelo, doce más, de los que tres
son derribados cerca de San Sebastián por nuestros cazas, por lo que sólo les llegan nueve. El 21 de Mayo, llegan seis más, y el día 24 del mismo mes, Madrid les envía nueve de los que sólo les llegan cinco. En el mes de Junio reciben otros cuatro, y el 2 de Julio llegan de Madrid más y, por último, el 17 de Agosto, reciben otros dos. De estos 52 Curtis, el día 22 de Agosto, en que huyen a Asturias, solamente les quedan nueve utilizables. Uno, en perfecto estado, ha sido cogido en Santander.
El día: 2 de Julio, llegan a Santander nueve Boeing tripulados por rusos, y el día 17 de Agosto, les son enviados nueve más, de los que sólo reciben siete. El 22 de Agosto, sólo pueden huir a Asturias ocho de los 18 aviones que les habían sido enviados.
De estos aviones ingleses de caza, reciben ocho, desmontados, escondidos entre sacos de patatas en un barco, en el mes de Julio. El día 22 del mes siguiente, sólo les quedan dos de estos aviones.
De estos aviones de caza checos, les llegan entre Abril y Junio siete, de los que solo tres pueden escapar a Asturias el 22 de Agosto.
El invierno pasado llegaron de Sariñena tres Breguets de bombardeo, y en el mes de Marzo vuelven a enviarles nueve desde el mismo punto, de los que solo les quedan cuatro, desconociendo ellos mismos
la suerte de los otros cinco. De estos Breguets enviados al Frente Norte sólo les quedan dos (uno de
ellos averiado), el 22 de Agosto.
Estos aviones de bombardeo en picado, enviados en distintas fechas desde Francia para destruir la Flota Nacional, no sólo no consiguieron el menor éxito, sino que de los trece enviados desde el mes de Mayo al huir a Asturias, sólo les quedan tres utilizables.
De estos aviones holandeses de bombardeo, reciben cinco en el mes de Mayo. El 22 de Agosto sólo les
quedaban dos.
En el mes de Julio llegan desarmados en barco y procedentes de Francia, seis de estos aviones de bombardeo. El 22 del mes siguiente, al escapar a Asturias, sólo cuentan con uno en vuelo y dos averiados. Otro acabándose de armar, cayó en nuestro poder.
Hidros
En el mes de Septiembre del pasado año, recibieron cinco hidros (de los que ellos, por error, derribaron uno en el mes de Julio frente a Suances) pero el 22 de Agosto sólo les quedaban dos, que al huir, echaron a pique en la bahía de Santander.
Otros aviones
También habían recibido tres
Monospar un Nieuport, dos
Miller Falcon, tres Looked (dos tipos “
Sirius” y uno “
Vega”), una avioneta y un Vickers, todos perdidos antes del 22 de Agosto del presente año.
Resumen de los aviones recibidos y perdidos por los rojos en el Frente Norte
Caza CURTIS: Enviados a los rojos, 52; perdidos por los rojos, 43.
Caza BOEING: Enviados a los rojos, 18; perdidos por los rojos, 10.
Caza BRISTOL: Enviados a los rojos, 8; perdidos por los rojos, 6.
Caza LETOV: Enviados a los rojos, 7; perdidos por los rojos, 4.
Total de cazas: Enviados a los rojos 85; perdidos por los rojos, 63.
Bombardeo GORDOU: Enviados a los rojos, 13; perdidos por los rojos, 10.
Bombardeo KOOLHOVEN: Enviados a los rojos, 5; perdidos por los rojos, 3.
Bombardeo POTEZ: Enviados a los rojos 6, perdidos por los rojos, 3.
Bombardeo BREGUET: Enviados a los rojos, 12; perdidos por los rojos, 10.
Total de Bombarderos: Enviados a los rojos, 36; perdidos por los rojos, 26.
Reconocimientos HIDROS: Enviados a los rojos, 5; perdidos por los rojos, 5.
Reconocimiento varios: Enviados a los rojos, 11; perdidos por los rojos, 11.
Total de Reconocimiento: Enviados a los rojos, 16; perdidos por los rojos, 16.
Total general: Enviados a los rojos, 137; perdidos por los rojos, 105.
O sea, que han perdido el 76 por 100 del material de aviación.
Posteriormente se les han derribado un Curtis y un Boeing más.
Resumen por tipos de aviones enemigos derribados en el mes de Agosto:
DERRIBADOS
Martín Bomber, 4.
Natacha, 7.
Boeing, 20.
Curtis, 27.
Cazas sin determinar tipo, 23.
Marcel Bloch, 8.
Total, 89.
PROBABLES O TOCADOS
Martín Bomber, 2.
Curtis, 2.
Cazas sin determinar tipo, 7.
Sin determinar tipo, 6.
Total, 17.
Salamanca, 11 de Septiembre de 1937. — II Año Triunfal.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 256, 15 de septiembre de 1937, León
Otra brillante jornada de nuestras fuerzas en los frentes de León y Asturias
Se han ocupado las minas de Santa Lucía, Villar del Puerto, el Valle, de Vegacervera y la Sierra Corbeta
Nuevo triunfo nacional en el frente leonés
PATRIA, PAN Y JUSTICIA
(Crónica de nuestros enviados J. Cantalapiedra Barés y Álvarez Cosmen)
El día de hoy ha sido de verdadera alegría para nosotros. Nuestro “Andapoco” ya conocido por toda la muchachada de este frente leonés que ante su llegada se agolpa por los estribos y aletas para recoger la prensa que los llevamos ha tenido un día de verdadera brega, y más hubiera tenido si unos cortes dado por los rojillos nos hubieran dejado alcanzar con él el objetivo que nos habíamos señalado.
Día de alegría, porque a nuestro paso por los pueblos recién liberados observamos como toda la gente nos recibía con el saludo imperial, con nuestro saludo que bien saben ya, prácticamente que quiere decir Patria, Pan, Justicia, y en sus labios se rompía un ¡Arriba España! sincero un grito de liberación y rebeldía a la vez que a nosotros se nos antojaba los clarines de la victoria.
A la salida del pueblecito de Cabornera un grupo de rapazucos del lugar, brazo en alto, en posición de firmes elevaba al cielo las notas de nuestro himno de victoria y de nuestro ¡Cara al Sol!, ayudados por otro rapaz que aunque de la misma edad que sus acompañantes ya tenía los modos y rasgos de hombre, pero de hombre azul, rasgos y maneras que por su energía y sencillez nos sorprendieron y fueron las causas de que frenando les interrogáramos para saber quien era.
Y este bravo mozo de doce años de edad es nada menos que uno de los componentes de la columna de un teniente coronel ya famoso por su actuación al frente de sus hombres azules, de esos falangistas, para los cuales el único descanso es la pelea y para los que su mejor música son los cañonazos y las explosiones de tralla de las bombas de mano. Y este mozo que allá por tierras de Burgos se unió a la
columna famosa nos cuenta como hace dos días fue presentado por un compañero en la Prensa al General Aranda y como este, paternal siempre, al ver que en su muñeca lucia un reloj de pulsera de juguete le dijo: “Pero hombre, no se puede consentir que un valiente como tú lleve eso, yo te regalaré uno de verdad”.
Allá a lo lejos suena con bastante intensidad el fragor de la lucha; nos vamos aproximando y nos enteramos de que el enemigo, reforzado con numerosos elementos santanderinos, está haciendo una resistencia inútil y desesperada en el centro del frente, sobre todo en el sector comprendido entre Rozo y Peñaprieta, para proteger sin duda alguna el pueblo de Villamanín, al darse cuenta de la formidable posición estratégica que ocupa dicho punto, por ser un nudo formidable de comunicaciones y cuya posesión haría en extremo crítica la situación de las fuerzas rojas situadas en sectores próximos.
En vista de esto nuestros dos flancos iniciaron un movimiento de avance que por el izquierdo ha llegado hasta los Celleros, es decir que nuestras tropas de este flanco, respiran ya casi más aires asturianos que leoneses. Estas mismas fuerzas ocuparon antes la formidable posición roja de Cueto Negro.
Por su parte nuestra ala derecha, después de sostener un nutrido tiroteo, ocupó tras impresionante marcha, totalmente las minas de Santa Lucía, que eran la verdadera cuna de la barbarie roja. Ocuparon, también los pueblos de Villar del Puerto y Valle de Vegacervera, además de coronar las Cotas mil quinientos y mil quinientos veinte.
En el centro, a pesar de la resistencia que como dejamos dicho hizo el enemigo, se progresó, desde Vértice Bregón a Peña del Pozo.
Desde nuestro observatorio, situado a escasísima distancia del pueblo minero de Santa Lucia pudimos apreciar una vez mas hasta que punto llega la barbarie de estos desalmados, ya que en el pueblo no quedan en pie arriba de una docena de casas, puesto que todas las demás, han sido pasto de las llamas; es decir que también aquí al igual que en la Pola ante la impotencia de resistir, optaron por usar la gasolina para que no encontremos nada cuando el pueblo sea nuestro. En Santa Lucía no han quedado más que tres personas, aquí la orden de evacuación no se pudo burlar. Al parecer como se hizo en la Pola, según nos participó uno de los falangistas que esta mañana penetraron en él para evacuar dos mujeres enfermas, que según manifestaciones de un evadido había en el pueblo, el saqueo ha sido total.
En contraste con esto, al regresar a Pola de Gordón, nos encontramos con la vida en este pueblo está normalmente restablecida; en dicho punto se hallaba girando una visita de inspección el Excmo. Señor Gobernador civil de la provincia, acompañado del Presidente de la La Diputación.
Y aquí en una de las pocas casas que se conservan, amparado por la Bandera de la Patria y la de Falange, nuestro “Auxilio Social”, funcionando a la perfección, llevaba a los habitantes del pueblo, que ya habían empezado a descender de los montes próximos el consuelo del pan y de la protección.
A última hora una caravana de pasados entre los que figuraban varias mujeres y niños se presentó en las calles de Pola. Son todos ellos de Santander y según nos confiesan el número de bajas surgidas en estos dos días por el enemigo y la desmoralización entre él existentes es enorme. Vienen completamente extenuados y cuando por curiosidad abrimos una de sus bolsas de costado no encontramos en ella más que un pedazo de una cosa negra y de aspecto nauseabundo, que ellos nos juran que es pan, aunque nosotros, a pesar de su juramento, no se lo creemos; entre ellos viene un niño de unos 3 años, que al acercarnos a él, con una cara de espanto levanta su mano a la vez que crispa su
puño y nos saluda con un U. H. P. débil. Y aquí es donde por primera vez quizá ve saludar con la mano extendida, con nuestro saludo de benevolencia y de protección que poco a poco vamos enseñándole, y
ya cuando llega la hora de marchar con su carita sonriente ahora, nos saluda con el brazo extendido y de sus labios sale un ¡Arriba España! que un compañero nuestro le enseñó a balbucear.
Hasta mañana
El Día de Palencia, defensor de los intereses de Castilla, Año IIIL, Epoca SEGUNDA, Número 14680, 15 de septiembre de 1937
La última jornada en el frente de León
Continúan los mineros rojos su conocida táctica de destrucción por el incendio
Acabo de recorrer el terreno que ha sido liberado por las tropas del general Aranda, desde San Pedro de Luna hasta La Robla. La situación en esta zona montañosa de los pueblos y las posiciones que han sido arrancadas del poder enemigo en las operaciones de los días anteriores, y de la cual ya hice referencia y comunicación oficial, es verdaderamente trágica.
Los pueblos antes de llegar a Pola de Gordón, aparecen sin manifestar grandes deterioros, alguna que otra casa perteneciente a persona de derecha. destruida, pero el campo y los ganados han vuelto a la normalidad, gracias a una hábil maniobra llevada a cabo por los nacionales que no dieron tiempo a los rojos para cometer sus felonías.
A pesar de que los pueblos están siendo evacuados, se encuentran vecinos y algunos muebles de ellos, pues la mayoría son destruidos.
La carretera está cortada, y a cada paso las distintas voladuras se nacen notar, pero nuestros ingenieros van abriendo paso en su magnífica tarea de reconstrucción.
Al fin llegamos a Pola de Gordón; esta población pintoresca y veraniega, que tiene dos mil habitantes y que está totalmente destruida. Los rojos, antes de huir, la prendieron fuego, habiendo quedado en ruinas todas las casas de las calles principales de la villa. Así la calle de Fernando Merino y la Plaza Mayor, que también está destruida, en un total de treinta casas, que son las mejores y las únicas que podían llamarse casas.
Se han librado los hoteles veraniegos que constelan el valle de Gordón.
El puente sobre el ferrocarril de Asturias está volado y en la iglesia no quedan más que las paredes y tres cadáveres cerca del presbiterio. Solamente quedan en el pueblo tres mujeres ancianas, y después de haber sido ocupada la población por nuestros soldados se presentaron catorce paisanos que lograron burlar la evacuación roja escondiéndose entre unas peñas.
Preguntamos a uno de ellos si quiere decirnos algo de la vida roja y parece un poco contrariado, respondiéndonos: “No me pregunten, señores; yo sólo sé que en el período de dominación roja se cometieron infinidad de asesinatos, pues en Pola de Gordón no ha quedado una sola persona de orden; los mataban en el límite de la provincia de Asturias y solamente en el Concejo de Aller hay enterrados incontable número de cadáveres. Fíjense ustedes, a tres kilómetros de Relecuñosa están enterrados setenta y cinco guardias civiles que recogieron los marxistas en los puertos de esta comarca, y que estuvieron presos en la cárcel de Moreda”.
Los pueblos de Llombera y de Vega de Gordón no están tan desolados, pero también hay bastantes casas destruidas.
En el día de hoy ha continuado el avance, a pesar de la resistencia enemiga, especialmente en el centro; pero merced a una hábil maniobra, las fuerzas del general Aranda se han abierto paso, logrando avanzar por los flancos, dominando la resistencia roja, y tomándose a la izquierda el enorme macizo montañoso de Cueto Negro. A la derecha se ocuparon las minas de Santa Lucía.
Muchas de las cumbres que han sido escaladas lo han sido merced al entusiasmo de nuestros soldados, para quienes el cansancio no existe. Al llegar al pueblo de Pola, entre los escombros, pero con alegría, vi el entusiasmo de nuestros soldados que estaban deleitándose con el teatro ambulante de campaña, el cual consigue hacer pasar un rato agradable a nuestros valerosos defensores.
Desde el pueblo donde estamos se divisan algunos pueblos de la comarca, que han sido incendiados antes de ser evacuados. Esta es la infame táctica de los rojos, que antes de abandonar los pueblos persiguen su total destrucción. LOGOS.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 257, 16 de septiembre de 1937, León
Prosigue el avance de las legiones de España en el sector astur-leonés
Vértice Franja, proximidades de Villasimpliz y de La Vid y otras posiciones en nuestro poder
Duros combates en el frente leonés
Rastros de la barbarie roja
(Crónica de nuestros enviados J. Cantalapiedra Barés, Alvarez Cosmen)
Fue hace tiempo en Vizcaya, más tarde en Santander, ayer Pola de Gordón, hoy en Ciñera, Santa Lucía y La Vid, donde en nuestra carrera detrás de los bravos soldados de España, en su avance victorioso para arrancar trozos de tierra patria a aquellos que no pueden llamarse ni españoles, ni personas, nos encontramos con sangre, ruinas y lágrimas.
Después del incendio, casi total de Pola de Gordón, los mineros asturianos y leoneses, viendo perdida ya para siempre su supremacía de barbarie y crimen en lo poco que les queda de la provincia leonesa, echando mano de su arma favorita: gasolina y dinamita, arrasaron por completo el pueblo minero de Santa Lucía.
Nuestra entrada en este pueblo, no puede ser más triste. Lo que no voló la dinamita, las fábricas Hidroeléctrica y Gotera, lo quemó totalmente la gasolina; no siendo la casa del pueblo, — que quizá quisieron regalarnos y tres o cuatro casas más— el resto del lugar, no son sino, paredes calcinadas, monumentales montones de escombros y desolación.
En una casita en su totalidad quemada y del todo saqueada, sobre un pobre jergón atravesado en una postura verdaderamente trágica, nos encontramos con un cadáver; no tiene heridas de ninguna clase.
Su fallecimiento mas bien creemos, fuera debido al hambre o al terror porque lo hubo en los últimos momentos rojos, al querer estos obligar a la evacuación total del pueblo, hacia tierras asturianas, cosa que consiguieron pistola en mano, entre amenazas, blasfemias y golpes.
Una sola mujer se pudo librar, casi sin explicarse como, de esta orden y con lágrimas en los ojos nos cuenta la estampa trágica de aquel tren que a primera hora de la noche partió para Asturias cargado de
miserias y dolores.
A Ciñera, también llegamos. También aquí tuvieron su cometido la gasolina y la dinamita, aunque en menor proporción que en Santa Lucía. Nuestra estancia en este pueblo fue breve, por que algunos “pacos” suicidas buscaban con ahínco, carne de cronista.
Pero a pesar de la brevedad hablamos con dos o tres mujeres, que acompañadas de unos chiquillos, allí habían quedado y las que al ver a nuestros camisas azules entrar en el lugar, de rodillas en la carretera y llenas de angustia, pedían que no las mataran.
Y esta muchachada azul, que por que sabe morir, no sabe asesinar, esta muchachada que solo lucha por una Patria en la que haya Pan y Justicia para todo, levantándolas del suelo, buscando en sus bolsas de costado sacaron pan blanco y chocolate que repartieron pródigamente.
Al salir del pueblo íbamos contentos porque ya habíamos cumplido parte de nuestro lema: PAN PARA TODOS.
El pueblecito de La Vid ha sido más afortunado. Aunque el saqueo es total los incendios y destrozos, son escasos. Aquí hablamos breves momentos con la madre del que fue nuestro querido compañero en la Prensa Adolfo Lavandera (q e.p d) siendo testigos de la doble emoción que embargaba a esta mujer.
Atrás en la Pola, la alegría de nuestras camaradas de la Sección Femenina, iba inundado en azul el pueblo todo.
En la Pola funcionan ya con toda normalidad los comedores de “Auxilio Social”, y las camaradas de León llegadas para este fin levantan con su fe el espíritu de esta pobre gente, que según nos confesaban ingenuamente, aún no saben si todo esto, es un sueño o una realidad.
Más de DOS MIL raciones, han repartido nuestros camaradas de la Segunda Linea de la capital en este local de “Auxilio Social” de Pola de Gordón. Y en el comedor del mismo, la actividad característica de la Falange, encarnada en nuestras camaradas, dio de comer a más de cien personas, Después de diez meses de comer pan negro y cebada molida, se extasiaban ante unas exquisitas patatas guisadas con carne, filetes con patatas fritas y plátanos de postre, que este fue el menú en los comedores de “Auxilio Social”.
Mientras, las fuerzas del heroico general Aranda, seguían formando la bolsa en la que ha de quedar seguramente lo más granado del ejército rojo.
El enemigo al darse cuenta de lo que para él significaba la toma de Villamanín por las tropas nacionales trata de oponer una resistencia tenaz a nuestro avance. Ayer, fue el contraataque suyo en el centro de nuestro frente y al ver la respuesta adecuada que se les dio al avanzar victoriosamente nuestras alas, cambió de táctica y contraatacó con inusitada violencia éstas. Para este contraataque había recibido un considerable número de refuerzos, pues solamente en Villamanín fueron siete los trenes que le llegaron, y por la derecha grandes concentraciones de refuerzo divisadas por nuestro Mando fueron batidas durísimamente por la artillería.
En el ala izquierda y solamente en la posición de Cueto Negro atacaron con gran contingente de hombres casi todos Santanderinos, pero nuestros muchachos, dejándolos acercarse hasta tenerlos a tiro fijo los hicieron tal carnicería que van recogidos, más de cien muertos, entre los que se cuentan un comandante, dos capitanes y cinco tenientes.
Al ataque rojo respondieron los nuestros con un fuerte contraataque y al tiempo de retirarnos de allí, se empezaban a escalar los Felledos. Entre tanto en nuestro ala derecha se libraba un brillantísimo combate en La Corbeta, posición que atacó el enemigo y de la que fue rechazado con un número elevado de bajas.
Nuestras fuerzas del centro, aprovecharon estos contraataques del enemigo en Las Salas cuparon en un avance arrollador el pueblo de Chaza, llegando a últimas horas de la tarde a las primeras casas de Villasimpliz.
Nuestros zapadores trabajan incansablemente y así, ayer ya pudimos llegar con nuestro “Andapoco” a lo que fue Santa Lucia y la comunicación por vía férrea está ya normalizada basta las cercanías de Pola de Gordón.
Hasta mañana.
Crónica del frente de Asturias
Mensaje de la noche, por EL TEBIB ARRUMI
Los rojos asturianos quieren despedirse de la guerra haciendo un supremo esfuerzo. Hoy ha sido día de combates duros en todos los frentes de nuestro ejército en la región asturiana.
Pocas veces como hoy, se han batido nuestras fuerzas, empleando a fondo todo su coraje. Pocas veces también la victoria ha coronado como hoy su bravura y esfuerzo. En el sector de La Pola de Gordón, continuaron las fuerzas leonesas y gallegas sus avances raudos por la montaña. El nuevo coraje con que combaten, se debe, sin duda a haber presenciado la bárbara destrucción de Pola de Gordón. Allí lo han comprobado y relatarán al mundo los corresponsales extranjeros que entraron en este pueblo cuando todavía era un verdadero brasero y vieron las atrocidades cometidas por los rojos al abandonar el pueblo y escucharon de labios de unas pobres mujeres que allí habían quedado, las monstruosidades de que habían sido objeto.
Como detalle diré que la central eléctrica de la Duro Felguera ha sido volada con dinamita.
El enemigo recibió durante las últimas 24 horas importantes refuerzos, tan importantes, que solo por ferrocarril se vieron llegar siete trenes completos de milicianos, que acudían a defender el sector de Pajares y la Sierra de Cueto Negro, donde la lucha ha sido tenacísima, teniendo que emplearse nuestros bravos muchachos repetidamente al arma blanca y conquistando picacho por picacho, a fuerza de heroísmo.
El final de la jornada, tras un episodio verdaderamente duro, fue el que todas esas montañas quedasen por completo en nuestro poder. La alegría de las unidades es extraordinaria por la victoria conseguida y después han continuado avanzando, ocupando la cota 1.394 al Este de La Vid y tomando también el importante pueblo de Villasimpliz.
Lucha, diario de Teruel al servicio de España, Año II, Número 242, 16 de septiembre de 1937, Teruel
Crónica de guerra del frente de León
Parte de las fuerzas de Aranda luchan ya en la divisoria de Asturias
San Sebastián.—Una chica de Buiza, pueblo conquistado ayer por nuestras tropas, nos decía hoy con toda la ingenuidad de una mujercita asomada a un mundo olvidado:
Cuando vimos a las tropas nacionales ocupar las alturas que dominan el pueblo, nuestra alegría no tuvo límites, pero esta alegría no pudimos desbordarla porque la presencia de los rojos, dispuestos y preparados para incendiar todo, constituía aún una poderosa razón que nos obligaba a enmudecer. A la vista de los soldados empezaron a correr los milicianos, y empezamos nosotros a dar gritos de júbilo, flameando con tesón sábanas blancas que era lo único y más significativo que podíamos flamear. Nuestro gozo sin embargo, pronto se hizo mutismo de inquietud; los soldados no nos hacían caso, de una cumbre pasaban a otra sin parar, mientras en el pueblecito estaban ansiosos de triunfales emociones. En aquel momento yo pensé que la táctica militar no tenia sentido. Al atardecer bajaron unos soldados con su oficial y todos éramos a reprocharles su inexplicable tardanza. Entonces el oficial nos aclaró. Cuando | las poblaciones están rodeadas de cumbres, a la táctica militar le interesan estas en primer término, pero cuando ocurren lo que en este frente, donde las infinitas alturas dan a sus pies algún pueblo, quizás para salpicar de color la monotonía del verde tenaz, la táctica ya no le hace caso a los pueblos y se dirige principalmente, a la conquista de las cumbres. Si el enemigo nos espera abajo peor para él.
Es casi seguro que después de oír al oficial, la chica de Buiza comience a ver claro el sentido común de la estrategia, de está estrategia que va ganando objetivos por tierra, collados, cotas y picos, cada día en mayor número y escala, Cada jornada va salpicada de dificultades que son siempre vencidas.
Por eso el Parte Oficial de este frente es una lección de Orografía, explicada a punta de machete por
los valientes soldaditos sobre una topografía de dificultades que se hace heróica y nacional en lo más alto de las cumbres gigantes desde donde se admira al sol y se dice adiós a los pueblecitos que van quedando atrás.
Conquista de Cueto Negro
Como todas las alturas conquistadas y como las que aun faltan por conquistar, para llegar a la divisoria de Asturias a donde es posible que se llegue mañana ésta de Cueto Negro tiene una cota superior en mucho a los mil metros; si'a esto añadimos sus laderas escarpadas, enormemente pronunciadas y difíciles, podrá comprenderse muy bien el esfuerzo sin medidas que hubieron de prodigar nuestros soldados para llegar arriba, allá donde el enemigo oponía una resistencia tozuda, bien protegido en sus trincheras.
Toda la mañana se concentró la artillería sobre el Cueto Negro. El cono del picacho parecía un volcán. Las explosiones se producían con precisión matemática. Paso a paso por los collados y senderos, camisas azules, boinas rojas y platos metálicos que relucían al sol, después de la artillería, inició
su aparición las bombas de mano. Las explosiones marcan la ruta dificultosa de los nuestros.
No obstante, las explosiones son cada vez más cerca al pico. De pronto una bandera bicolor, un soldado que trepa y muchas boinas al aire. Ya llegaron—dijo a mi lado no se quien—. Para cerciorarme aparté la vista de los prismáticos. Sobre la loma de nuestra observación, la sonrisa del general Aranda me trajo al mundo de la realidad. En el lugar casi inaccesible, una bandera minúscula agitábase orgullosa en la cumbre.
Avances por las flancos
El enemigo, como la chica de Buiza, tiene una táctica militar que pudiéramos llamar pueblerina. Su preocupación más importante son los pueblos que escalonan la ruta del ferrocarril y así hoy se han concentrado los rojos en gran número en las posiciones que defienden Villamanín, creyéndolo objetivo inmediato y primordial.
En las primeras horas de la mañana, esta resistencia se acentuaba, por ello la columna del centro hubo de emplearse a fondo para vencerla. Al mediodía el tiempo mejoró y volaron los aviones, lo que trajo inmediatamente un debilitamiento en el esfuerzo de los marxistas.
Se avanzó desde Peña del Pozo
Mientras la lucha era fuerte en el centro la lógica de la estrategia imponía sus consecuencias por los flancos. ocupando las fuerzas de la izquierda las estribaciones de Los Selleros, desde las cuales se domina Valgrande, punto culminante de Pajares, refugio de los alpinistas asturianos y cuyo hotel, según me dicen hoy, ha sido incendiado por los bolcheviques.
En el flanco derecho se avanzó sin grandes dificultades, ocupando totalmente las minas de Santa Lucía, el poblado inmediato de Corbeta, cotas 1.500 y 1.529, pueblo de Villar y Puerto de Vega Cervera. Es decir, las fuerzas que se mueven en el sector izquierdo luchan ya sobre la divisoria de Asturias y miran de frente los colosos de la cordillera Cántabra.
(Logos).
Diario de la Marina, periódico oficial del apostadero de La Habana, Año CV, Número 221, 16 de septiembre de 1937, La Habana
Están en fuga los jefes rusos de la milicia asturiana
Se han refugiado en los montes y tendrán que rendirse. Sigue el avance en el frente de León
(Por Georges Bottó) Corresponsal Especial de la Agencia Havas.
FRENTE DE LEON, septiembre 15. (Havas) .— Después de haber tomado los nacionalistas la importante cumbre de Monte Cellero, han continuado su avance durante el día; en vista de la imposibilidad de tomar sus vertientes mediante un ataque frontal, el comandante nacionalista ordenó que se ejecutase una acción envolvente por la sierra del Cueto Negro.
Las columnas nacionales, tras de maniobrar durante toda la noche, tomaron por la mañana las primeras alturas, que dominan el puerto de Pajares, con lo cual pronto habrán de desembarcar en una tierra más llana, más propicia a los avances.
La parte más elevada del Monte Cellero, que tiene por allí 1.853 metros de altitud, fue tomada en un ataque en masa; los rojos no pudieron resistir mucho tiempo y más tarde, cuando con los refuerzos que recibieron intentaron el contraataque, fueron batidos en línea.
A la una de la tarde, tras de hacer entrar en acción toda la artillería, los nacionalistas se adueñaron de las cumbres más importantes de esa zona. Los asturianos se han replegado confusamente hacia el norte, hostigando los nacionalistas su retaguardia.
Más tarde, Turrón caía también en manos de los nacionales, con lo cual es ya muy difícil que se les haga resistencia en el puerto de Pajares.
El general Mujica. que está al mando de este sector, nos ha dicho que las operaciones que se están efectuando en esta zona le han demostrado que los rojos no poseen artillería de montaña, lo que facilita considerablemente el avance de los nacionalistas, ejecutado con poquísimas bajas. Las bajas de ayer fueron 22 y las de hoy 36. Tampoco hemos visto aviones rojos en este frente. Hoy interrogamos al general Aranda, que mantiene la defensa de Oviedo, y que se encuentra en el sector de la Pola de Gordón. Manifestó que está satisfecho de los resultados que se han alcanzado hasta ahora y que a despacho de las dificultades del terreno, las tropas nacionales siguen progresando. Tiene el convencimiento de que los asturianos no podrán resistir mucho tiempo, ya que en esa zona solo poseen 72 batallones, que ocupan un frente demasiado extenso, quedando así muchos vanos que no pueden cubrir y por los cuales penetrarán las columnas nacionales. Nos agrega que llegará el momento en que los atacantes pondrán a los milicianos entre la espada y la pared, no quedándoles más remedio que rendirse o morir.
Nos dijo también el general que los oficiales rusos que se hallaban en Gijón han huido con el cónsul soviético hacia las montañas, en donde tendrán que someterse cuando llegue el momento.
—Entonces, dijo, se sabrá lo que sucede.
En la Vega de Gordón se han refugiado tantos fugitivos, que ha sido preciso crear un servicio especial de retaguardia. La mayor parte de los que llegan ofrecen un aspecto calamitoso, muertos de hambre, enfermos, malvestidos con una única esperanza antes de que llegaran los nacionalistas: la muerte.
Diario de Burgos, de avisos y noticias, Año XLVII, Número 19461, 17 de septiembre de 1937
De los frentes del Norte
Santa Lucía la mártir
LEON 16.- El horror de Pola de Gordón, Saqueado e incendiado, parecía como si se hubiese proyectado sobre Santa Lucía. Descansamos en el pueblo para resarcirnos de las fatigas pasadas a través de un canino cada cien metros con un puente volado, una montaña derruida sobre la carretera con dinamita, o ya, en el colmo del refinamiento, con el soporte de un puente de madera aferrado con sigilo para que se derrumbase al paso del camión más inocente. Los marxistas no se han parado en medios para impedir nuestro avance por lomas y lomas de angosturas por donde marchan paralela la carretera y la línea férrea, línea que se ha convertido (definitivamente en montañas de verdor. Camino adelante hacia Pajares, cada vez es mayor la dificultad del terreno, salvando, a fuerza de técnico alarde, entre otros; el famoso túnel de la Perruca, que ya escucha de cerca los disparos de nuestros soldados. Las únicas comunicaciones ferroviarias de Asturias a Castilla, a través de la cordillera, será bien pronto la más irrefutable prueba del salvajismo rojo. El horror de Santa Lucía es el mismo horror de Pola de Gordón.
De esta villa de primer orden, con más de 300 almas de población; sólo quedan dos casas en pie: la Casa del Pueblo y otra casucha salvada del incendio a caso por su insignificancia. Todas las demás, son un montón de escombros humeantes incluyendo la magnífica Central eléctrica que suministraba fluido al coto minero ocupado ayer...
Santa Lucía, pueblo de Castilla la adusta, coto minero de importancia, sede del marxismo, que se nutría de odiosos ideales llegados de Asturias, llave de Pajares, ha pasado a ser una zona geográfica sin la menor importancia material de su pasada existencia. Santa Lucía pasará a ocupar un recuerdo más en el martirologio de esta guerra de reconquista.
La gran maniobra de Aranda está muy cerca de obtener objetivos primordiales sobre un difícil escenario de montañas, pero el mando rojo no ignora que su resistencia en tierras de Castilla pende sólo de un hilo y ayer concentraron todas las fuerzas del sector del centro para oponerse a nuestro avance, y hoy han traído de Asturias refuerzos importantes, con el fin de cortar la progresión sobre Pajares.
A Villamanín llegaron siete trenes precedentes de Mieres, dirigiéndose al sector de la derecha. Otros núcleos numerosos se concentraron dispuestos a defender el pueblo, que es tanto como defender sus vidas en tierras de León, y al mediodía de hoy se simultanearon con varios contraataques, enfrentándose en las tierras de Cueto Negro, con las tropas españolas. Hubo necesidad de luchar fuerte y el enemigo se empleó con furia; no obstante, no consiguió nada, los nuestros rechazaron con ímpetu sus ataques, haciendo en las filas rojas una verdadera carnicería, pues en la posición quedaron los cadáveres de dos capitanes y dos oficiales y se recogieron más de 100 muertos de las fuerzas marxistas.
La posición quedó en nuestro poder iniciándose esta noche la escalada al pico mayor de los dos Celleros, últimas estribaciones montañosas de la ruta hacia Pajares. En el extremo derecho, el contraataque también fue de importancia, y, al igual que en Cueto Negro, nuestras fuerzas se cubrieron de gloria. No sólo consiguieron rechazarlos, sino que les persiguieron y ocuparon la cota 1.394, al Este de la Vid.
El número de bajas enemigas en el combate de hoy, pasa, desde luego, de 300. A última hora de la tarde, las fuerzas del centro, que habían ocupado Chanza, llegaron a las primeras casas de Villasimpliz, que ya estará totalmente ocupado, dominando asimismo el pueblo de La Vid, cuya conquista no se hará esperar. Por este lado derecho del ferrocarril, los incendios y destrucciones, son, si cabe, más absolutos y totales que en el otro. La hermosa Central eléctrica de Vegacervera, que servía de energía a Villamanín y pueblos cercanos, ha sido volada con dinamita. En La Vid y en Celleros, aparecieron grandes humaredas, cuyo significado no es difícil comprender, viendo antes Pola de Gordón y
Santa Lucía.
Nota. Nos ruegan las familias de Oviedo que se encontraban veraneando en Pola de Gordón, digamos que se hallan sin novedad, pues pudieron escapar de la persecución de los marxistas, apelando a diversos procedimientos. —-LOGOS,
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 258, 17 de septiembre de 1937, León
Las operaciones en el frente de León
Á pesar del mal tiempo y de la fuerte resistencia del enemigo, continuó el avance
Villamanín, Viadangos, Poladura y Rodiezmo, han sido incendiados por la bestia roja
Le habian asesinado cuatro. hermanos...» :
(Crónica de nuestros enviados J. Cantalapiedra Barés, Alvarez Cosmen)
Se conoce que nos vamos aproximando hacia Asturias.
Al tiempo espléndido que gozamos estos días de atrás, le sustituyó un verdadero temporal de viento y de agua-nieve que fue el factor peor contra el que tuvieron que luchar nuestros muchachos.
La artillería y la aviación, no pudieron actuar como días pasados, aunque la primera, ya mediada la tarde, y por haber mejorado el día, se empleó con el acierto en ella acostumbradao.
Pero en contra del día, teniamos la alegría y la decisión de estos hombres de España, que sin importarles un bledo el viento ni el agua avanzaban con la copla en los labios, hacia los objetivos por el Mando señalados.
El día anterior habíamos llegado en una escapada furtiva hasta el pueblecito de La Vid. que es quizá el más afortunado de cuantos llevamos visitados. En él, no siendo los destrozos causados en las dos fábricas de luz allí existentes, una de las cuales surte de fluido a León, y en las que los rojos almacenaban una cantidad tan considerable de dinamita que han quedado al hacerla estallar, totalmente deshechas, todo está intacto.
El aspecto que presentan es verdaderamente lo más triste que dar se puede. La primera, ha llenado al volar, toda la carretera de escombros y pedazos de su maquinaria, aparecen sembrados por doquier.
El pueblecito de Villasimpliz situado a tres kilómetros de distancia de La Vid, ha sido también afortunado. Por él, pasaron los rojos perseguidos ya de cerca por nuestras tropas, que aunque no habían
ocupado el pueblo, si tomaron todas las alturas que por la parte izquierda de la carretera dominan el pueblo.
Los primeros que en Villasimpliz entraron fueron el teniente coronel de la Guardia Civil, D. Pedro Romero Basart acompañado de su escolta; el camarada Juan Carbajal, Jefe Local de Falange de León y varios camaradas más, que formando un equipo de propaganda avanzan con las tropas victoriosas, camino de Asturias.
Al verlos los vecinos que en el pueblo había, obsesionados sin duda por la propaganda que los rojos nos hacían de criminales y asesinos, corrieron hacia el monte huyendo de ellos, pero ante los Arribas a España vibrantes y emocionados y al no verse apuntados como tenían por costumbre, por pistola ni por fusil, cambiaron de aptitud y entre sollozos y vivas entrecortados se echaron materialmente en los brazos de esta gente azul que venía a traerlos liberación, tranquilidad, pan y justicia.
Cuando por la tarde llegamos nosotros al pueblecito fuimos aun asediados por sus preguntas y sus brazos. Y entre toda esta alegría, surgió fuerte un contraste; el de un hombre joven que víctima de un ataque de nervios pronunciaba con pasión incontenida los nombres de cuatro hermanos asesinados vilmente por la canalla roja.
Una mujeruca, que a toda costa quiere que nos quedemos allí para contarle como está León, creyendo que vivimos entre escombros, pues así se lo decían a diario los milicianos confiesa ingenuamente que ella, que viviendo en Santa Lucía fue obligada a evacuar, lo hizo por carretera y que al llegar a este pueblo, pudo esconderse entre la paja de un pajar y allí permaneció tres días sin probar bocado y dispuesta a morir antes que a seguirles.
En todos. los rostros hay huellas de hambre y terror, hambre, porque allí no comían más que los milicianos y terror, porque la amenaza constante del fusilamiento, pesaba siempre sobre sus cabezas.
Como decimos ayer, el enemigo, aunque tarde, se ha dado cuenta de que nuestro rapidísimo avance hacia Asturias, tal como ha sido llevado era de fatales consecuencias para su causa.
Ayer, al igual que el día anterior, había recibido numerosos contingentes de refuerzos que los empleó en su totalidad para contraatacar durísimamente a nuestras dos alas, sobre todo a la izquierda que tuvo que sufrir varios intentos de asalto precedidos de una intensa preparación artillera. Es el primer día que la artillería roja ha aparecido por estos frentes, pero a pesar de ello, nuestros infantes, no solo rechazaron con la energía en ellos característica los ataques enemigos, sino que conquistó totalmente el alto de Los Folledos, cuya posición altamente estratégica nos asegura un objetivo de una importancia vital y que la discreción más elemental nos obliga a silenciar por ahora.
Por su parte, nuestras fuerzas de la derecha no se mostraron inactivas, pues venciendo toda resistencia enemiga inició el desbordamiento de las posiciones rojas frente a la Corbeta, obligando al enemigo a abandonarlas.
Nuestras fuerzas de Matallana, atacaron igualmente las posiciones marxistas de aquel sector, ocupando la importante posición de La Estrella, que era la que cerraba el acceso a las Hoces de Vegacervera.
Por el centro, se ha roto la línea enemiga frente al Cueto, ocupando das fuertes posiciones de El Rozo, Canga y El Rubio, en la ocupación de estas posiciones se han cogido al enemigo 26 prisioneros, de
ellos, diez y seis con armamento, y numeroso material no clasificado aun pero entre los que se cuenta una camioneta y dos coches ligeros.
Lo que nos temíamos ha sucedido, al igual que La Pola de Gordón, y Santa Lucía, el enemigo al ver el avance irrefrenable de nuestras fuerzas, impotente para luchar contra el coraje de esta muchachada de España se ha vengado incendiando los pueblos de Villamanín, Rodiezmo, Viadangos y Poladura, incendios que se aprecian a última hora de la tarde perfectamente desde nuestras posiciones de vanguardia.
Hasta mañana.
Crónica del frente de Asturias
Del frente de León, tengo noticias, de que el día ha sido de ataques duros, afortunadamente las fuerzas que por allí combaten están poseídas por el más alto espíritu y marchan genialmente conducidas. El enemigo, que como ayer dijo, ha recibido considerables refuerzos, empezó anoche mismo sus contraataques en las posiciones que perdió en la jornada última y esta mañana, al ver desplegadas nuestras unidades presentó combate en toda la línea.
Una afortunadísima maniobra, permitió a nuestras unidades desbordar por frente a
Carreta, las posiciones enemigas desalojándole de ellas. Y exactamente lo mismo ocurre
por Matallana, donde se tomó la base de la Estrella y los Folledos.
El enemigo ha hecho hoy, durante todo el día intenso fuego de artillería, que apoyaba contraataques que singularmente durante la mañana hizo contra nuestras líneas. A pesar de toda esta resistencia y de los numerosos contingentes que tenemos enfrente han ocupado también Longo y Rubio y en este pueblo y desde todas nuestras posiciones del Puerto de Pajares, se ha visto como incendiaban los rojos los pueblos de Viadangos, Rodiezmo, Poladura y Villamanín.
Según mis noticias, se han hecho unos cincuenta prisioneros y se ha cogido abundante material entre el que figuran varias camionetas y coches de carga.
Hay que destacar la actuación brillantísima de todas estas fuerzas del sector de León, donde por cierto abundan los soldados gallegos, que están una vez escribiendo ya verdadera página de gloria que debe enorgullecer extraordinariamente a la madre Galicia.
Termino volviendo a decir, como ayer que estas jornadas están siendo de máximo provecho para nuestra causa, porque siendo la resistencia enemiga extraordinaria, quizás llevada al límite, la vencemos briosamente y sin ningún género de dudas, por lo que es innegable que la resistencia que pueden oponer los mineros, está tocando a su fin.
Imperio, diario de Falange Española Tradicionalista y de las JONS, Año II, Número 280, 17 de septiembre de 1937, Toledo
Frente de León
Se normaliza la vida en Pola de Gordón
A pesar del tiempo, la aviación castiga al enemigo
Pola de Gordón.—Se va regularizando la vida por momentos. Si no fuera por las quemaduras y voladuras, el pueblo presentaría otro aspecto muy distinto. El tren llega hasta las proximidades del pueblo y hoy ya podrá circular libremente debido al incesante trabajo de nuestros ingenieros.
Ayer amaneció lloviendo, pero esto no impidió que nuestros aviones bombardeasen las posiciones rojas hasta primeras horas de la tarde. Los marxistas construyeron nuevos abrigos muy bien disimulados, que creían que la aviación no los iba a encontrar. Nuestros cazas, en vuelos bajos, les ametrallaron, señalando a nuestros trimotores dónde debían dejar su carga.
Los batallones rojos que ayer defendían las posiciones estaban compuestos por las primeras levas reclutadas por Belarmino Tomás.
Terminada la ocupación de la Serrana, nuestros soldados descendieron e hicieron su entrada triunfal en Villasimpliz, donde fueron recibidos con grandes muestras de entusiasmo por los aldeanos.
...En el frente de León ayer continuó el avance con un enemigo superior en número y armamento. Se ocupó Cueto de Matallana...
La prensa, diario republicano, Año XXVII, Número 10252, 18 de septiembre de 1937, Santa Cruz de Tenerife
Impresiones del frente de Oviedo
Oviedo, 17.—En estos momentos—es la una de la tarde—nuestras baterías disparan sin cesar sobre las posiciones rojas del cerco de Oviedo. Parapetos, nidos de ametralladoras, puestos de mando, etc., van desapareciendo por la acción continuada de los artilleros nacionales. De allá, no hay quien se atreva a contestar. Si acaso, por la noche, y desde mucha distancia los moscovitas descargarán sus iras contra la población civil. Parece que las amenazas de González Peña, “El Tempranillo”, se van cumpliendo; los mineros arrasan todos los pueblos, antes de que entren en ellos las tropas del Generalísimo Franco.
Ayer han sido Pola de Gordón y Santa Lucía. No sabemos si ocurrirá lo mismo en la cuenca minera, donde la canalla moscovita tiene sus intereses. Porque es el caso que los hay tan cándidos que aspiran el perdón por el solo hecho de entregarse “por las buenas”, cuando su pueblo se incorpore a la Nueva España y repitan el cuento de la revolución del 34: “Yo no he sido”. Naturalmente, si así ocurriera, el miliciano podía luego ocupar su vivienda libremente, después de haber dejado a muchos españoles sin ella, y es de esperar que los incendios terminen cuando las tropas sigan avanzando y den con el famoso Lucinio, capitán Ayudante del Batallón “Rosa de Luxemburgo”, que llevó a cabo el incendio y destrucción de Amorebieta. De este Lucinio pueden esperarse cosas más horribles todavía. Sobre su
conciencia pesan algunos crímenes cometidos en la revolución de 1934. (Recibido por la estación E.A.-8-A.S.).
SEGUNDO AÑO TRIUNFAL
Comunicado oficial DEL GENERALÍSIMO
Boletín de información con noticias llegadas a este Cuartel General del Generalísimo hasta las 20 horas del día de hoy:
EJERCITO DEL NORTE.
FRENTE DE LEÓN.—Mediante brillante y victorioso ataque y a pesar del frío y la lluvia, se ha completado hoy la ocupación de Peñero, llegando nuestras fuerzas a La Perruca, Puerto de Pajares y dominando las alturas que conducen a la carretera general a Oviedo y Gijón. También se ha ocupado Villamanín. Entre Matallana y La Vecilla se han conquistado importantes posiciones enemigas.
Las tropas nacionales ocupan el Puerto de Pajares, a 1.364 metros sobre el nivel del mar
La Robla, 17. (Urgente).—A las cuatro de la tarde de hoy, las tropas nacionales ocuparon el Puerto de Pajares, el más elevado de todo el territorio de Asturias, con Estación ferroviaria. Está situado a 1.364 metros sobre el nivel del mar. Desde el Puerto de Pajares a Oviedo se inicia el descenso en cuestas pronunciadas, que alcanzan hasta un 15 por ciento de desnivel.
Toda la carretera desde Villamanín hasta Pajares puede considerarse ya en poder del Ejército.
El avance de hoy en este frente de León alcanzó una profundidad de 16 kilómetros, marchando las columnas por el terreno más difícil de Europa, comparable sólo a los Alpes suizos.
En seis días de ofensiva se ha conseguido un avance de 34 kilómetros, a partir de La Robla, donde se iniciaron las operaciones. Desde el Puerto de Pajares hasta Oviedo hay una distancia de 61 kilómetros, cuesta abajo.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Año II, Número 261, 21 de septiembre de 1937
Crónica del frente de León
Ni los contraataques enemigos, ni el fuerte temporal pueden impedir el avance de las tropas de España
Los rojos siguen incendiando pueblos
(Crónica de nuestros enviados espaciales J. Cantalapiedra Barés y Alyarez Cosmen)
Este pueblecito de Rodiezmo al que en nuestro caminar rápido e incesante detrás de las tropas victoriosas de España hemos llegado en el día de ayer con cierto retraso involuntario, no volverá en bastante tiempo a sonreír como lo hacía cuando en él no se sabía de guerra, sino cuando solo anidaba en sus habitantes el cariño al terruño que los vio nacer. Rodiezmo, aunque en menor proporción que Santa Lucía y Villamanín, también supo, lo que era la gasolina y el trueno horroroso de la dinamita. También aquí la "cultura" roja dejó prueba fehaciente de su valer.
La estampa, tiene el mismo tono trágico que en los demás pueblos que hemos liberado. Casas incendiadas, saqueo, destrucción caprichosa y cruel, y ante todo y sobre todo, este silencio, esta carencia de vida en que le dejaron los rojos al obligar a evacuar a todos sus habitantes, en una procesión trágica e interminable, en esa cadena humana que a pie, carretera arriba, traspasó quizás con lágrimas en los ojos, y quizá también en muchos labios una plegaria, el Puerto de Pajares, seguramente, pocas horas antes de haber llegado allí los nuestros, pero diferencia esa, de horas que les condenó por una fatalidad del destino a hacer más largo aún su cautiverio.
En este pueblecito de Rodiezmo solo hay tres mujeres ancianas ya, y una familia, compuesta del matrimonio, y cinco hijos, cuatro hembras y un varón, el más pequeño. Esta familia, al ver el intento de evacuación total, huyeron al monte, y escondidos en una cueva permanecieron dos días enteros, y desde ella, sufrieron el horror de ver como las llamas prendían en su hogar. El cabeza de familia, jugándose el todo por el todo, imposible contenerse al ver arder aquel hogar, en el que tantos ratos bien alegres o tristes, pero familiares al fin había pasado, salió como una fiera de su escondite verdaderamente alucinado bajó al pueblo y aún pudo librar del fuego una parte de él, los rojos aún le tirotearon, pero como ya iban en franca huida lo hicieron sin la precisión necesaria para herirle; y hoy, allí, en ese pedazo de hogar liberado del fuego, a costa de su propia vida habita esa familia. Y en una casa cercana, mejor dicho, en los restos de una casa, entre montones de vigas y cascotes calcinados, casi intacto, aparece el cadáver de una pobre anciana, que según nos dicen era una pobre enferma a la que nadie se cuidó de salvar en aquellos trágicos momentos. Parece más que nada que murió por asfixia.
En una de nuestras crónicas anteriores comunicábamos nuestro presentimiento, de que lo mismo que habían hecho con Santa Lucía y Villamanín, harán con todos los demás pueblos, en retirada fatal, esto nos lo vienen a confirmar. Los incendios, de Fontún, de Rodiezmo, y ahora a última hora de la tarde, nos llegaba a Villamanín la triste nueva, no confirmada aún, de que también Cármenes estaba ardiendo.
Y por si esto fuera poco, un evadido de las líneas marxistas, nos aseguraba esta misma tarde, que Belarmino Tomás había ordenado, recoger toda la dinamita existente en Asturias para volar todos los
pueblos en peligro de caer en manos de los "facciosos" y que según manifestaciones hechas en Sama, no hace aún mucho, estaba dispuesto a hacer volar Gijón antes de que caiga en nuestras manos.
El día de ayer, fue duro de verdad; por una parte el temporal que fue de lo mas duro que darse pueda.
La niebla impidió casi totalmente la actuación de la artillería y de la aviación, que precisamente en el día de ayer nos hubiera sido precisa. Y por la otra el enemigo, que dándose cuenta de lo que para ellos valen las posiciones que están perdiendo día tras día, recibe sin cesar refuerzos y mas refuerzos, que
con una tenacidad que cada día se va haciendo más suicida gracias a la pericia del mando nacional trata de resistir, sin darse cuenta de lo que se le avecina.
En Cueto Negro, verdadero dardo clavado en las entrañas rojas, efectuó un duro contraataque, pero si duro fue este, la replica dada por los nuestros les superó en dureza, dejando el campo sembrado materialmente, de cadáveres. Nuestra ala izquierda esa ala izquierda que está ya respirando los aromas sidreros de Asturias, a pesar de la muralla humana que aliada con el tiempo, trataba de desalojar de sus posiciones a sus componentes, se dio a pesar de todo como digo, el lujo de atacar y a fuerza de corazón
y empuje conquistar Peña Lasa y los macizos de Busdel.
Por su parte el ala derecha va también victoriosamente cerrando con su garfio de acero, toda la extensión de terreno necesaria para quedar en línea con el centro. Ayer a pesar de los fuertes núcleos enemigos que a toda prisa, con esas prisas de remedios de última hora, había acumulado el mando rojo en la región de Valporquero, atacó y ocupó como se lo había propuesto la altura denominada Marzal, y, se avanzó rápidamente para maniobrar debidamente sobre ese formidable macizo montañoso del Machacao, Machamedio y Cerro del Gallo, habiendo quedado ayer ya, completamente envuelta esta última, siendo ocupada la Peña del Aguila; por lo tanto el enemigo ya va bajando en su retroceso fulminante hacia el Valle de Cármenes ya amplio y espléndido.
Y mientras, el centro, agarrado firmemente a las posiciones últimamente conquistadas, aguarda impaciente el momento de avanzar.
Como decimos antes, el tiempo es infame, pero a pesar de eso nuestros soldaditos, tan duros como estas peñas enormes que solo a fuerza de corazón y dureza se pueden conquistar, siguen avanzando con la sonrisa en sus labios y sus ilusiones puestas en esta España Imperial que con sangre y sacrificios están forjando.
Tres héroes más
En el cementerio de esta capital recibieron el pasado domingo cristiana sepultura, los jóvenes requetés Esteban Diez Barragán, Manuel González González y Maudilio Martínez García, todos del Requeté de León, que encontraron gloriosa muerte en el frente leonés, sector de La Vecilla, durante las operaciones que en este frente se vienen realizando. Al acto del entierro asistieron el comandante Sr. Bertrán de Lis, el teniente señor Marcos, el secretario provincial camarada Clérigo y el camarada Regueral, además de numerosos boinas rojas, una escuadra de los cuales hacía guardia de honor a sus compañeros caídos en el cumplimiento de su deber. El comandante Sr. Bertrán de Lis y el camarada Clérigo en el acto de dar tierra a los tres caídos por la Patria, en breves palabras, hicieron el presente debido a estos tres héroes.
Importante detención
Por fuerzas de la Guardia Civil, con la colaboración entusiasta de un grupo de montañeses, han sido detenidos en el Monte de La Devesa, en término de Corniero (Crémenes), seis dinamiteros procedentes
de campo rojo asturiano, que, al parecer, tenían el propósito de cometer actos de vandalismo en las proximidades de nuestra retaguardia. Se trata de especializados en el manejo de la trilita y substancias explosivas, y todos ellos eran portadores de elementos y materias para cometer sus criminales propósitos. Han sido puestos a disposicion del Auditor de Guerra.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 262, 22 de septiembre de 1937
En el frente leonés se conquistaron Vegacervera, Felmín, Velilla y otras posiciones
de importancia
CUARTEL GENERAL DEL GENERALÍSIMO
Sección de información.- Estado Mayor
Boletín de información, con noticias recibidas en este
Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 21 de
septiembre de 1937.
EJÉRCITO DEL NORTE Frente de León,—Ha sido ocupada la posición principal
del macizo del Gallo y sigue rodeado el resto del mismo.
También se ha ocupado el cerro alto de Villamanín y los pueblos de Felmín, Velilla y Vegacervera.
CAMARADAS
Ricardo Aguado García
CABO DE REQUETES
de 19 años de edad, natural de Corullón.
José Hermida Rodríguez
de 25 años de edad, natural de Román (Lugo)
¡presentes!
Murieron por Dios y por la Patria en el Hospital
de la Cruz Roja y Hospital de Falange, respectivamente.
IN PACE
«Haz que la sangre de los nuestros, Señor,
sea el brote primero de la redención de esta
España en la unidad nacional de sus tierras,
en la unidad nacional de sus clases, en la
unidad espiritual en el hombre y entre los
hombres, y haz también que la victoria final
sea en nosotros una entera estrofa española
del canto universal de tu gloria.»
A pesar del mal tiempo se han ocupado Vegacervera, Felmín y Velilla
El enemigo, ante el empuje de nuestros soldados, desciende a los valles, que serán su muerte
(Crónica de nuestros enviados espaciales J. Cantalapiedra Barés y Alyarez Cosmen)
¿Han visto ustedes alguna
vez hacer instrucción de campaña a la tropa? Pues estos muchachos que
en este frente leonés están poniendo tan alto el pabellón español actúan en el campo de batalla con la misma precisión y
serenidad que si estuvieran en
los altos de la carretera de Asturias haciendo prácticas ante
un enemigo imaginario; ayer pudimos apreciar perfectamente todo esto al ver como nuestra muchachada ocupaba unas
alturas desde las que el enemigo hostilizaba seriamente al
pueblo de Villamanín.
Y claro es, ante la táctica insuperable de nuestros muchachos, aprendida entre el silbar
de las balas, a través de todo
el Norte de España, los rojillos
que se hacían fuertes al principio, optaron por "retirarse
estratégicamente", no sin dejar
varías bajas en nuestro poder,
convencidos sin duda de nuestro piadoso proceder.
Y aquí en este montón de escombros que antes era un pueblo que se llamó Villamanín
encontramos, en nuestro buscar incesante, que es la verdadera labor del cronista, más
tranquilos ya, por la ausencia
de morterazos y "pacos" traidores, gracias a la operación de
limpieza llevada a cabo como
decimos por nuestras tropas,
una muestra de la feminidad
y delicadeza de la hembra roja.
Una tarjeta, escrita a un miliciano, por una "rojilla" de
Bilbao en la que textualmente
dice:
"Estoy contenta, porque ya
veo que cumpliste la promesa que me hiciste de cargart a
cuatro requetés, aunque no lo
estoy mucho porque no los
mataste a cuchillo".
Y ante esto ¿qué dicen ustedes?
Por nuestra parte nos abstenemos de hacer comentarios
de ninguna especie ¿para
qué ? ante la crudeza bárbara
de estas palabras huelgan los comentarios todos. Y en contraste con esto vemos ya, en nuestro paso diario
por los pueblos que no hace
aún quince días eran rojos y
en los que el hambre y la miseria más espantosa unidas en
estrecho abrazo con el terror
campeaban por sus respetos como funciona admirablemente
la obra cumbre de la Falange
ese "Auxilio Social" que con su
lema hermoso y justo de "Pan
para todos" ha llevado la alegría y la confianza de sentirse
en su patria a toda la gente
que sufrió durante un año la
tiranía marxista.
Nuestras camaradas de
León han dejado ya en su paso valiente por estas tierras
la semilla fecunda de su espíritu nacional-sindicalista.
Entre las ruinas de Pola de
Gordón, brilla la alegría de estas camaradas del pueblo que
ya, con su comedor infantil impregnado de nuestro estilo de austeridad y sacrificio, trabajan incansablemente para dar de comer a estos pobres pequeñuelos cuyos brazos extendidos
al final en nuestro saludo de
Imperio, nos aseguran la Patria que hace ya tiempo soñamos por la que desde hace
ya tiempo, también luchamos. Esa España de Patria, Pan y Justicia, que asombrará al mundo entero haciéndose admirar y temer a la vez.
"No todo el monte es orégano". Ese refrán popular lo podemos aplicar perfectamente al día de hoy.
Salimos de León con alegría verdadera por el día claro que
amanecía, pero señores, allá,
lejos de la capital, el tiempo,
no nos ayudó nada, y por esto,
nuestro ala izquierda tuvo que
permanecer inactiva, a pesar
de los deseos de avanzar de
sus componentes.
En cambio el ala derecha,
aprovechando, la bonanza de la
tarde, se puso en movimiento
para rodear el Gallo, un formidable macizo montañoso,
cuya posición principal, la cota 1557, de difícil subida, tuvo
que ser nuestra después de una
brava escalada por nuestros
muchachos. Con esto ya van
abandonando sus madrigueras de
las montañas imponentes de
esta región y van deslizándose
en contra de su voluntad hacia el Valle de Cármenes, que
por ser ya amplio, va a ser de
muerte para ellos.
Y en la extrema derecha, se
dio un empujón potente ocupándose el pueblo de Vegacervera, en el que el saqueo es
verdaderamente espantoso.
Por su parte en el Centro se
ocupó el Cerro Alto de Villamanín, por lo que queda limpio
ya de "pacos" todo el pueblo,
y se ocuparon los pueblos de
Velilla y Fontún; en este último también dejaron sus muestras bárbaras los incendiarios
rojos.
La Gaceta de Tenerife, diario católico de información, Año II, Año Triunfal, Número 8951, 25 de septiembre de 1937
En el frente de León tampoco nuestras fuerzas han descansado un momento. Se ha asegurado el paso de la carretera desde el túnel de la Perruca hasta Pola de Gordón y La Robla, y, además, se prosigue la limpieza de algunas montañas situadas al Oeste de la línea férrea, a la vez que se conquistaron los pueblos de la carretera transversal que se dirige a Cármenes y enlaza con la que une Matallana con. Pola de Laviana. Todo el frente Sur de Asturias ha ascendido de una manera notable, que puede precisarse con sólo mirar la cartografía y parece buscar una linea recta desde Peña Ubiña hasta el Puerto del Pontón.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 272, 5 de octubre de 1937, León
Da la Montaña de Luna
Ferias y mercados
Los pueblos de estas latitudes que estaban amenazados por los marxistas eran, entre otros, Santiago de las Villas, Carrocera, Cuevas y Piedrasecha. Más al noroeste estaban: Portilla de Luna, Sagüera, Mirantes, Miñera, Aralla, Oblanca, La Vega, Robledo y Caldas de Luna.
(El camino vecinal que va a La Vega está un tanto averiado por las aguas. Vea la Diputación (señor Del Valle) si es posible mandar por aquí un “observador”.
Pero el jueves 9 de septiembre, el Ejército y Milicias de la invencible España se lanzaron al ataque. En el sector de Miñera empezó el fuego a las siete de la mañana y al cabo de tres horas ya ondeaba majestuosa la bandera nacional sobre Salceo o Monte Cónico. Desde este punto hostilizaron la carretera y pueblo de Miñera, los rojos, durante varios meses.
Habrá que repetir una vez más que las posiciones comunistas se hallan tan sólidamente fortificadas que parece imposible poder conquistarlas. Pero el Ejército y Milicia que dirige el providencial Caudillo, Franco, arrollan cuantos obstáculos se oponen a su impetuoso avance y las alambradas y trincheras mejor dispuestas—así como los "cinturones" —son para nuestros aguerridos muchachos juguetes de cartón.
Después de un año de sacrificio y penalidades constantes, estos lugareños del Río de Luna resucitan, vuelven a la vida, con la paciencia y resignación de buenos cristianos y con el decidido y firme propósito de poner otra vez en marcha sus modestos hogares.
A tal efecto se restablecen las renombradas ferias e interesantes mercados del Molinón, entre Miñera y San Pedro de Luna.
Las ferias de agosto y setiembre ya pasaron, pero falta la de octubre que se celebrará (D m) el próximo día nueve del mes actual. Después del día 9, ya citado se celebran mercados todos los “jueves”, durante los meses de octubre y noviembre. Los mercados y ferias del Molinón son para toda clase de ganados, cereales, legumbres, frutos del país, aperos de labranza, madreñas, etc. Gozan merecida fama las ferias y mercados del Molinón, muy renombrados en toda España, según afirma la comisión.
Ahora, ganaderos y tratantes, a la feria y a los mercados, poseídos todos de lo mejor voluntad, a fin de trabajar en la retaguardia con toda decisión y patriotismo, como lo hace la juventud en los frentes para
conseguir en plazo breve que España sea Una, Grande y Libre.
Así lo desea y espera,
Juan de. Luna
Delegación Nacional de Servicios Técnicos-Servicios de Trabajo
Se está formando una segunda Centuria del Servicio de Trabajo en el Ejército del Norte. Para ingresar en ella hay que reunir las siguientes condiciones:
a) Pertenecer a F. E. T. de las JONS—1.ª línea—o si es de oficio, pedir el pase de segunda línea a la primera linea, una vez ser admitido.
b) Tener buenas referencias profesionales con certificado de la C. N. S. respectiva y de casas donde haya trabajado.
c) Comprometerse a acatar el Reglamento del Servicio de Trabajo, además de las inherentes obligaciones militares de la primera línea.
d) Reunir condiciones físicas para el Servicio de Trabajo.
e) Los haberes son las tres pesetas de la primera línea (de donde se descuenta la comida) y la subvención a la familia que disfruta el personal de primera línea. Si tiene cargo con asimilación de mando, devengan lo que a éste corresponde; si ocupan plaza de maestro, de las gratificadas, y no están en la edad de ser movilizados y servir en filas, cobrarán una gratificación que complete su sueldo militar.
Se admiten maestros y peones albañiles, maestros y ayudantes electricistas, maestros fontaneros, herreros-cerrajeros, maestros y ayudantes carpinteros, maestros y ayudantes pintores, peones ordinarios, dos barberos, un zapatero guarnicionero, un sastre y ayudante de sastre, conductores y mecánicos conductores, cornetas, tambores, cocineros, rancheros. mecanógrafos, un químico experto
en análisis de agua y alimentos, uno que sepa topografía, delineación y fotografía y un contable mecanógrafo.
Los que deseen inscribirse se presentarán desde la publicación de este anuncio hasta el 15 de octubre, en que fina el plazo de inserción, en la Jefatura Provincial de Milicias, donde el Jefe Provincial de ella procederá a filiarlos y esperarán después ser llamados, si resultan elegidos, designándoles punto y fecha de concentración.
Santander, 21 de setiembre de 1937. Segundo Año Triunfal.— El Delegado Nacional de Servicios Técnicos.
Saludo a Franco: ¡Arriba España!
Parque de Intendencia
ANUNCIO
Necesitando este Parque para cubrir sus necesidades la adquisición de los artículos que a continuación se relacionan, se admiten ofertas, que deberán ser dirigidas al señor Director del Establecimiento,
antes del próximo día 10.
Artículos: Alubias con chorizo; cocido riojano; cebón en salsa de perdiz; carne en su jugo, carne asada; carne de buey; guisado de vaca; guisado de lomo; lomo con tomate; chorizos; tocino; atún en trozos.
Atún en aceite; bacalao; bacalao a la vizcaína; bonito; sardinas, arroz, lentejas; judías, garbanzos, manteca, leche; centeno.
Chocolate; azúcar; mermelada; membrillo; café crudo, café tostado; the; higos; tomate, pimentón; cebollas; patatas.
Sal; vinagre; vino; harina; aceite; fideos: cebada; paja para pienso; paja larga; leña; carbón vegetal.
León, 2 de octubre de 1937. Segundo Año Triunfal.—
El Secretario.
Jefatura de Obras Públicas.-Provincia de León
CONCURSO DE DESTAJO
Esta Jefatura abre un concurso de destajo para la construcción de un puente de hormigón armado en el kilómetro 364,338 de la carretera de Adanero a Gijón, entre los constructores de esta clase de obra.
Presupuesto de la obra, Pesetas 16.697,02.
Fianza provisional, pesetas 1.000 00.
Fianza definitiva, pesetas 2.000,00.
Plazo de ejecución 30 días
Puede examinarse el Proyecto y presentarse proposiciones en las oficinas de esta Jefatura (Ordoño II- 27) en horas hábiles dentro de los cinco días siguientes al del anuncio en Boletín Oficial. .
León, 27 de septiembre de 1937 —Segundo Año Triunfal
El Ingeniero Jefe, Manuel Echevarria Roncal.
CUARTEL GENERAL DEL GENERALÍSIMO
Sección de información.- Estado Mayor, Boletín de información con noticias recibidas en este
Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 3 de
Octubre de 1937.
Frente de León.—La columna de Tolibia ha ocupado el
vértice Mallecina, y en el sector de Riaño también han quedado ea nuestro poder las posiciones enemigas de Granja
y Sierra Ruación.
Frente de León.—Aunque ha continuado el temporal con la misma intensidad que ayer, nuestras tropas han desplegado alguna actividad, ocupando una columna las alturas al noroeste de Valdelugueros. Otra ha rebasado Peña Agujas, situándose delante de Loma Ajo y quedando una fracción frente al Puerto de San Justo y otra columna ha llegado a dicho puerto ocupándolo.
Sorpresas sumamente agradables
(Crónica de nuestros enviados espaciales J. Cantalapiedra Barés y Alyarez Cosmen)
El mal tiempo sigue dificultando el avance de nuestras
tuerzas en este frente asturleonés, pero a pesar de ello, la columna que hace poco
ocupó el pueblecito de Tolibia alcanzó, sobreponiéndose a la intensa niebla y lluvia,
el vértice de Muyerena, y no
conforme con eso, aprovechando magníficamente algunos momentos en que cesó el
temporal, hizo para España el pueblo se Isoba.
A él no pudimos llegar por
premura de tiempo, pero suponemos que a estas horas ocupará su lugar la virgencita de aquella iglesia que un día del pasado año encontraron los camisas azules de guarnición en Lillo, en una descubierta hasta las cercanías de
dicho lugar en plena carretera y los que nos aseguraban
había salido de su iglesia a
recibir a las tuerzas de España cuando las sintió cerca.
Esta virgencita de Isoba desde aquel día tuvo un lugar
preferente en el Hospital de Sangre de la Falange de Lillo,
y la que mutilada y todo servirá de guía y protección a aquellos que la recogieron.
Después de la ocupación de este pueblo, siguieron
nuestras fuerzas hasta el puerto de San Justo, el que ocuparon totalmente sin tener
apenas resistencia enemiga. Si el tiempo mejora, el problema de Asturías seria resuelto en brevísimos días.
Quizá mañana podremos
anunciar sorpresas sumamente agradables.
Diario de Burgos, de avisos y noticias, Año XLVII, Número 19477, 6 de octubre de 1937
De los frentes del Norte
Cómo se conquistó el puerto de Vegarada y el vértice Buñerina
LEÓN 5 (2 m.).—Ayer y hoy las columnas de todo este frente montañoso han tenido necesidad de moverse en un verdadero mar de niebla. No era solo el furioso temporal de agua y granizo, ni la ventisca fría que azotaba los cuerpos, era sobre todos los entusiasmos y sobre tedas las montañas
una niebla espesa, apretada, inacabable, por entre la cual avanzaban los heroicos batallones que no pudieron estarse quietos.
Porque si es verdad que los avances fueron de profundidad menor y de intensidad maniobrera en pequeña escala y el fango de los caminos anula por completo el movimiento de grandes núcleos de fuerzas y las columnas no han permanecido inactivas y soportando toda clase de penalidades, han sabido lograr dos objetivos de suma importancia, el Puerto de Vegarada ayer, y el de San Justo hoy.
Para conquistar el Puerto de Vegarada, hacía falta ocupar primero el vértice Bullerina, de cuyo dominio dependía el éxito total de la operación. El vértice citado, en su parte más alta, precisamente donde los rojos se atrincheraron y escondieron sus armas automáticas, estaba totalmente cubierto de niebla. No se veía nada más arriba de los 800 metros y en situación tal la artillería se vio obligada a enmudecer.
En esta cadena interminable de obstáculos y toda clase de ellos, los bravos navarros y los gallegos invencibles y los moritos de gesto distraído, emprendieron todos la escalada y llegaron arriba atacando las posiciones rojas de frente y de retaguardia, porque la niebla permitía toda clase de filigranas y de sorpresas. Una vez arriba a los heliógrafos les faltaba la vida que arrancan al sol en rayos de luz, los soldados esperaban a uno que fue a comunicar la nueva noticia. Y la nueva noticia tardaba en llegar cerca de tres horas. Después otras tres horas para recibir una nueva orden y para continuar el avance que había de realizarse con valor, paciencia y derroche de explosivos.
Así se conquistó el Puerto de Vegarada que sitúa a nuestras tropas en la divisoria de Asturias y así se conquistó hoy el Puerto de San Justo, también sobre la vertiente asturiana, y como tal oscurecido por la niebla, una niebla mucho mayor que la de ayer, una niebla como las del Océano, donde a diez metros, no se ve nada absolutamente y donde la orientación hay que hacerla a tiros.
Como los buques cuando navegan sin visibilidad hacen sonar continuamente la sirena, así nuestras tropas hacen sonar sin interrupción sus fusiles, pegando tiros a derecha y a izquierda, tiros a un enemigo invisible. Salieron unos batallones a ocupar el pueblo de Isoba. El fusil del enemigo, al igual que las sirenas de los buques que no quieren ser vistos, estaban mudos. Llegaron a Isoba los soldados disparando tiros y marchando sobre un terreno sin horizontes y sin rojos. Cuando más embebidos estaban, en la empresa se encontraron en la cumbre del puerto de San Justo. Al otro lado unas jotas
navarras y algunos gritos africanos anunciaron el enlace con las columnas de la izquierda. El puerto quedaba ocupado por completo.
Los rojos imitaron a los buques que se filtran en los puertos, habían sabido sortear el bloqueo de nuestras fuerzas, sin tocar las sirenas de sus fusiles.
La columna de la izquierda, que ayer ocupó el vértice Buñerina, había de alcanzar la altura de Pico de Ajo y otra fracción de esta columna se situó asimismo en las alturas al noroeste de Valdeluceros.
Por el sector de Tarna descargó ayer con gran intensidad el temporal y no hubo posibilidad material de dar un paso. Baste decir como ejemplo, que para abastecer a las fuerzas que guarnecen a 1.700 metros de altura la cumbre de Picón, hubo necesidad de hacer un rancho, caliente en el valle, subirlo después en mulos hasta los mil metros y desde allí a hombros de los soldados. Desde que las calderas repletas salieron de la lumbre, hasta que llegaron habían transcurrido cuatro horas. Es natural que la comida
estuviese fría. Pero con las calderas fueron subidas cargas de leña y se encendieron nuevas hogueras y otra vez a calentar el rancho. Todo ello parece muy fácil, pero tardan cuatro horas los hombres y los mulos.
Y estos días crudos hay que dar rancho caliente a todo el mundo y hay pues que realizar esta operación en casi todas las poblaciones.
Ello supone un esfuerzo que no es posible esquivar, pero de lo que se da uno cuenta viendo como los rojos escapan a través de la niebla al escuchar de cerca los primeros tiros.
Y es que el rancho caliente no llega hasta las rojos. —LOGOS.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 276, 10 de octubre de 1937, León
Continúa la penetración victoriosa de nuestras
columnas en Asturias
Se ocuparon ocho pueblos y varias alturas de importancia, aniquilando un batallón enemigo que dejó en
nuestro poder ciento veinte cadáveres
CUARTEL GENERAL DEL GENERALÍSIMO
Sección de información.-Estado Mayor, Boletín de información con noticias recibidas en este
Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 9 de
Octubre de 1937.
Frente de León.—Ha sido batido el enemigo, concentrado al norte y noroeste de Peña Agujas, rechazándole sobre la vertiente asturiana en el puerto de Vegarada y causándole gran número de bajas.
Otras fuerzas han seguido penetrando en Asturias, desde las peñas del Viento, ignorándose su situación exacta en el momento de dar este parte.
También se ha completado, partiendo del alto de Las Arenas, la ocupación de Canto del Oso, avanzando por la de Lago a Foz.
Se han cogido al enemigo más de 100 muertos con armamento y se han presentado 13 milicianos.
Otro gran triunfo de nuestra aviación
CONTINUA EL AVANCE
Hoy nos toca descubrirnos ante la actuación de los bravos
pilotos azules que cabalgando en sus pájaros de acero surcan
el espacio día tras día para llevar la confianza y la alegría a las tropas que risco tras risco
y palmo a palmo van conquistando la tierra patria a costa
de sacrificios, de sangre y de vidas.
Muy de mañana el ronco trepidar de los motores potentes
de la aviación llevó la alegría
a nuestros pechos y pronto nuestros ojos surcaron con
afán el límpido cielo de esta
mañanita de Octubre para buscar las figuras conocidas ya de nuestros "pájaros".
Y en efecto. Uno, dos, diez,
quince, en perfecta formación
pasaron por encima de nuestras cabezas, dieron una vuelta de saludo sobre las posiciones azules de esta sierra y de pronto como flechas disparadas por un buen arquero se dirigieron raudos y veloces hacia
las posiciones enemigas.
Primero, los trimotores evolucionaron con esa pesadez elegante en ellos característica, haciendo sus clásicos pases sobre las trincheras rojas y una vez fijado el objetivo, vomitaban la metralla sobre ellas, que al caer habían de levantar a una altura, que nos parece inverosímil, pedazos enormes de piedras, tierra y hombres.
Y de pronto, una escuadrilla de ágiles cazas, al divisar a los rojillos que espantados buscaban su salvación en la velocidad de sus piernas, con una habilidad y un arrojo insuperables, jugándose la vida a cada instante, en un picado impresionante, barrieron completamente con sus ametralladoras
al enemigo que huía.
Sin embargo, cierto número
de ellos, se mantenía tercamente en un parapeto magníficamente encuadrado y desde el que hostilizaban seriamente a nuestros infantes, y entonces un caza, separándose del grupo, en un descenso suicida, sin
importarle las descargas cerradas que le hacían, se metió materialmente en la trinchera y
también materialmente sembró
la muerte en ella. El enemigo acuciado sin duda por los deseos de venganza y acosado a la vez por las amenazas y las coacciones de sus dirigentes, no conformes con el descalabro tan enorme sufrido el viernes en su descabellado contraataque, volvió ayer de nuevo a concentrar hombres en este sector de Lillo, pero esta vez, nuestro Mando, no quiso esperar el contraataque y
dio orden de batirle.
Para ello, nuestros muchachos de Peña de las Agujas, atacaron violentamente las concentraciones rojas y en un asalto impresionante los lanzaron
a la vertiente asturiana ya del
Puerto de Vegarada.
Fue de tal violencia este ataque que los marxistas no intentaron resistir y en una carrera desenfrenada se lanzaron hacia Asturias, no sin antes dejar muchos muertos en nuestro poder.
El ala derecha de este sector también penetró en Asturias,
para lo cual partió desde las
Peñas del Viento, últimamente
conquistadas y tras un duro
batallar, derrotó primero y persiguió más tarde al enemigo.
Su avance fue tan rápido y
tan extenso que nos fue imposible el seguirlo y a la hora de
abandonar el campo ignorábamos su situación exacta.
Si en el sector de Lillo, cosechamos victorias, en el sector de Tarna, no fueron menos
pues esta agrupación, partiendo del alto de las Arenas, efectuó la total ocupación del Canto del Oso, en parte conquistado el día anterior y que era como vulgarmente se dice: "un verdadero hueso", pero para estos leones que son nuestros
soldaditos, no hay "huesos",
que valgan, pues no conformes
con liquidarlo, siguieron por
la Sierra del Lago hasta el pueblo de La Foz, el que ocuparon
totalmente y que se encontraron evacuado en su totalidad
por una orden del mando rojo
y víctima del saqueo que ustedes pueden comprender, por haber posado allí su huella esta
bestia de Moscú.
El castigo inflingido ayer al
enemigo, ha alcanzado proporciones catastróficas. Solamente por donde anduvimos nosotros, contamos más de cien cadáveres que a última hora de la tarde se dedicaban nuestros
soldados a darlos sepultura.
Nueve de octubre de mil novecientos treinta y siete. Día
de nueva gloría para España. ¡Arriba Franco! ¡Arriba España!
Letras de luto
En el frente de La Uña (León)
peleando como bueno, cayó por
Dios y por la Patria el día 6 del
actual, el camarada Mariano
Blanco Pérez, natural de Villarroañe, soldado del regimiento
de Burgos, de guarnición en
León.
Contaba el fallecido 24 años
de edad.
Por su eterno descanso se celebrarán solemnes funerales en
su pueblo natal mañana lunes, 11 ; a las nueve de la mañana .
A la familia, nuestro pésame
sentido, de modo especial a su
hermano Serafín, falangista de Primera Línea en León.
Una
oración por el finado.
Camarada Mariano Blanco
Pérez. ¡Presente!
Del frente de León
Formaré junto a los compañeros...
Salimos de La Uña a las dos de la mañana. Para empezar a romper las fortificaciones que tienen los rojos frente a nuestras lineas. Falangistas, soldados y requetés, caminamos alegres y contentos bajo el manto amigo de la noche.
A las diez de la mañana, empezamos nuestro ataque a las posiciones de junto a Ten.
«Soplan” los cañones; tabletean las ametralladoras y avanzan las fuerzas en medio de una lluvia de balas, Falangistas y demás fuerzas coronan las alturas.
En medio de un entusiasmo indescriptible, llega la bandera a lo más alto de la montaña; la lleva un falangista de la centuria de Soto de Sajambre. Va al frente de ellos Valdés, que gatea montaña arriba cual si fuera un chico de quince años. Todas las fortificaciones de esta montaña han sido tomadas con sólo 3 heridos por nuestra parte.
Los rojos se defienden denodadamente. Al llegar a sus trincheras lanzamos bombas de mano por las entradas de las mismas. Sin acudir nuestra aviación hemos tomado una montaña de 1.600 metros de altura. Los rojos han hecho en ziz zag modernas veredas para abastecer posiciones. Termina así el primer día de nuestro avance.
Para el segundo, tenemos otras posiciones con grandes galerías subterráneas que se yerguen imponentes ante nosotros. Avanza en vanguardia la centuria de Onésimo Redondo.
Después de dejarnos avanzar hasta una loma a 200 metros de la posición el enemigo, abre un fuego horrible de fusiles, ametralladoras y morteros.
Caen heridos cuatro camaradas de la primera falange, el capitán de le bandera y un alférez. La primera y segunda falanges baten en descargas de fusilería los parapetos rojos. Cuerpo en tierra, continuamos haciendo fuego mientras nuestras ametralladoras y cañones siguen batiendo aquella montaña gigantesca. Aunque no pensamos retroceder, comprendemos que avanzar es una temeridad y sacrificio tal vez de muchas vidas. Pasan así unas horas. Tenemos mucha sed, yo pego mis labios a una piedra fresca para hacerme la ilusión de que es un pedazo de hielo...
Continúa el fragor del combate. De pronto, un grito de alegría sale de todos los pechos. ¡la aviación! ¡la aviación! Se ponen las señales para que nuestras guerrillas no se confundan con los rojos. Los aparatos llegan en número de 18; hacen el vuelo de reconocimiento y, después de cerciorarse, vuelan bajos sobre nosotros. Nos saludan sacando el brazo y les oímos cantar “Cara al Sol”.
Un camarada levanta el brazo en toda su extensión y una bala le atraviesa la manga de su camisa; los aparatos dejan caer sobre los rojos su carga y el espacio queda rasgado por el efecto de las ráfagas de sus ametralladoras. Pero los rojos siguen disparando sin cesar. Un aparato marca el sitio por donde deben avanzar unos batallones que tienen como objetivo unos refugios subterráneos. En este momento, oímos la voz del alférez que nos dice: ¡avanzar! Avanzamos en medio de las balas que silban a nuestro alrededor. Un camarada grita: ¡Adelante! ¡Aquí, Falange!
Por un precipicio enorme empezamos el asalto la primera y segunda falange. El camarada Eumenio Rubio, de La Bañeza, llega el primero arriba, seguido de un alférez que viste camisa azul. El camarada Eumenio y Castor, otro camarada de “la caza”. Un rojo, cae peñas abajo desde una altura de 900 metros. Por la falda de la montaña hay sembrados varios cadáveres rojos. De una trinchera salen dos con fusil y correaje gritando con los brazos en alto ¡ria Franco! Castor y Eumenio les apuntan, pero no tiran porque se entregan...
De pronto, dan medía vuelta para huir y nuestras balas los rodean y caen dando volteretas montaña abajo. Cuando más tarde revisamos aquello, vemos a uno muerto; el otro iba dejando un rastro de sangre y no sé donde iría a morir, porque cerca hay bosque.
Mientras esto ocurre, otro rojo viene hacia nosotros con los brazos en alto; trae cara de miedo. Dice que era enlace y que no había disparado un tiro... ¡Ya! ¡Ya!...
Va ante el mando para prestar declaración.
Montaña adelante entramos en una trinchera donde un herido rojo está sangrando por cuatro heridas. Nos mira suplicante y nos dice: “Soy de derechas, no me maten”. Debajo de él tiene un muerto. Yo le hablo así: ¿Qué tal, amigo. Se van convenciendo ya de su comunismo?, —No, señor, yo soy de derechas. No me he pasado a vosotros porque me mataban mí familia, Hay, además “checas” encargadas de vigilar a los sospechosos. ¿Cómo puedes vivir con tantas heridas? Cuando la aviación empezó a bombardear, yo rezaba a la Virgen. Quiero confesarme y luego hagan conmigo lo que les plazca. Mientras habla sus heridas siguen manando sangre. Aviso al capellán y éste le confiesa.
Antonio Casado. Ventaniella octubre de 1937.
(Continuará)
Montañas de León
Huellas de la bestia roja
Después de un alejamiento forzado de los míos, por espacio de trece meses, vuelvo a juntarme a ellos con el alma y la vida llenas de satisfacción.
Toda esta estampa desoladora y repugnarte de mi patria chica, de estos rincones de la montaña de León, que fueron en tiempos dulces y apacibles, presenta a los ojos del caminante toda la cultura, toda la educación de estos infelices rojillos, que luchan como borregos, en una guerra condenada al fracaso más rotundo desde su nacimiento, porque no se puede sostener una guerra en beneficio de unos cuantos asesinos y maleantes, vividores del pueblo.
Es sencillamente doloroso
el aspecto que ofrecen estos pueblos; en muchos de ellos obedeciendo a no sé qué táctica suicida, se han llevado
toda la gente por delante, en una peregrinación desconsoladora; ¿dónde irá esa pobre gente? Hace unos días estuve
escuchando palabras de un asturiano que vio la caravana
interminable, de personas,
enseres y ganado, que cruzó
Puerto de Pajares, poco antes de ser tomado por nuestros soldados; este hombre
decía que la gente lloraba su desconsuelo, en medio de lo
empellones y amenazas de sus verdugos, que, cuchillo en
mano, el mismo cuchillo con que hicieron salir a todos los habitantes de la Pola de Gordón les hacían caminar por senderos fatídicos de desolación, ruina, hambre, miseria
y muerte.
He visitado detenidamente
algún pueblo, poco después de ser tomado, y en él no
pude ver ni un triste gato, y
para dar más tristeza al ambiente, pueden creerme que mi vista buscó algo que diera señales de vida en el lugar,
no viendo, durante todo el tiempo que permanecí en él,
ni un solo pájaro. Todo, entonces, era tristeza de muerte.
Allá en una habitación maloliente, tirados en el suelo y cerca de excrementos humanos, unos cuantos librajos
pornográficos rusos y catecismos modernos, titulados "La Religión del Porvenir", literatura cancerosa, que corroe fácilmente cerebros poco habituados a pensar.
En Pola de Gordón, aquel pueblo que poco tiempo atrás era la villa clueca y orgullo de la provincia, nos quemaron 48 casas y nos las quemaron quienes no habían nacido en ella, ¡forasteros tenían que ser!, y si alguno del pueblo participó en estos macabros espectáculos, macabros por haber aparecido en
alguna casa cadáveres calcinados, estamos seguros que fueron conducidos por manos extrañas. Los hijos de Pola, aquellos que hemos vivido y pasado la juventud en ella, los que nos hemos alimentado y constituido sanos y fuertes, merced al aire purísimo de su
clima y al agua pura y cristalina de sus fuentes, estos hijos no la pueden quemar; estos hijos, en medio de tanto dolor por la ruina temporal
de su ser, continúan inconmovibles en el puesto de siembre, prometiendo ser fieles a su tradición gloriosa y trabajar con ahínco por su pronta reconstrucción, para que en poco tiempo vuelva a ser lo que siempre fue. ¡La villa más hermosa y mimada de la provincia. Eso lo dicen los hombres de hoy, los del nuevo Estado, aquellos que antes de que vuelvan a malearse sus costumbres en perjuicio de la Patria, están dispuestos a dejar la piel y las entrañas, como ha dicho nuestro llorado ausente José Antonio.
MA
Jefe Local de F. E. T. y de las J. O. N. S.
Mansilla Mayor. Segundo Año Triunfal.
Escuelas y maestros
El Rectorado de Oviedo
ha concedido la licencia de tres meses, para asuntos propios, que tenía solicitada, la
maestra del Plan Profesional
y provisional de Cifuentes de
Rueda, D.ª María Coquerde Eguiagaray. Por lo tanto, la vacante durante los tres meses será provista en la forma
que determina la disposición
de la Comisión de Cultura y
Enseñanza de 31 de agosto
último.
—La misma autoridad comunica a la Sección que sea
pedido a D. Angel Aller,
maestro de Vegas de Gordón,
una declaración jurada de adhesión al Movimiento y de
no haber pertenecido a ningún partido del Frente Popular ni separatista, para unir al
expediente que tiene incoado.
La mencionada autoridad
ha resuelto la solicitud de licencia que tenia solicitada la
maestra interina de Fabero,
D.ª Sebastiana Mielgo, y que
era de quince días, para atender a un hijo enfermo, concediéndole siete días con todo
el sueldo y lo restante sin el,
siendo de cuenta de ella dejar atendida la enseñanza.
—Comunica a la Sección el Rectorado que se participa a
doña Benigna Baños, maestra interina de Llamazares, la
obligatoriedad de todo maestro de reintegrarse a su escuela en el plazo de diez días,
a partir de su liberación, si no
está enclavada en zona peligrosa.
—Ha sido también concedida la licencia reglamentaria para alumbramiento a doña Bernardina Alvarez, maestra de
Castrocontrigo, asi como también los cuarenta días posteriores.
— El Rectorado desestima la
petición hecha por D.ª María
de las Victorias Fernández,
maestra de Huerga de Frailes,
que solicitaba autorización
para el nombramiento de una
sustituta, alegando motivos
de salud.
—La Sección Administrativa de Oviedo comunica que
se participe a D. Constantino
Alvarez del Puerto, que no se
han recibido en aquella Sección las hojas a que alude en
su escrito dirigido al maestro
nacional D. Andrés Diez, cuyos titulos obran allí, debiendo por tanto remitir lo antes
posible las indicadas hojas.
Han de venir bien hechas, y
sobre todo bien encabezadas,
a fin de no perder el tiempo
debiendo acompañar para
reintegros de hojas, etc., la
cantidad de una peseta con
noventa céntimos.
—D.ª María de la Encarnación Menéndez, maestra de
La Pola de Gordón, solicita
autorización para reintegrarse
a su cargo, lo que no pudo
hacer hasta la fecha por encontrarse en zona roja.
D.ª María de la Asunción
Ruano, maestra de Chozas de
Arriba, solicita un mes de licencia por enfermedad justificada.
Boletín del Norte : órgano del Buró del Norte de España, Viernes 15 de octubre de 1937
"AGRUPACIÓN DE PUERTOS
El combate más fuerte de ayer se produjo al suroeste de Busdongo.
Los pajarracos extranjeros, en número de veinticinco, bombardearon intensamente la cota 1783 denominada Peña Lasa. Toneladas de explosivos en sucesivas incursiones arrojaron los pilotos teutones al servicio de los cabecillas sublevados. Un cañoneo ininterrumpido de piezas de grueso calibre hicieron llover obuses en la cima del monte. Las características topográficas de Peña Lasa, desnuda y rocosa, dificultaban enormemente su defensa, puesto que el estallido de las granadas enemigas desmenuzaban los peñascales convirtiendo en verdadera metralla pétrea.
No se amilanaron los defensores de la posición amiga. Estoicamente soportaron cuanta metralla quisieron enviarles los enemigos. Ninguno retrocedió. Esperaron ansiosos y enérgicos la segura avalancha de las fuerzas fascistas que no se hizo aguardar. Moros en su inmensa mayoría. En cantidad notoriamente superior a los nuestros, fiados en su número y la fenomenal preparación que les precediera, los "mojamés" que guerrean por el reinado de Cristo Rey, embistieron seguros de lograr una fácil victoria.
Verdaderamente magnífica fue la resistencia opuesta. Allí se lucho con un denuedo y una valentía pocas veces igualada.
La Brigada montañesa que guarnecía Peña Lasa se cubrió de gloria. Tras ataques porfiadísimos, llegando en todos a la lucha cuerpo a cuerpo; empleándose los cuchillos, los fusiles a guisa de maza, hasta las piedras como rompecabezas. Lucha de titanes antifascistas. ¿Cuantos hombres perdió el enemigo? ¡Quien lo sabe! Peña Lasa quedó en sus manos, pero su defensa constituirá una de las páginas más brillantes de la epopeya asturiana."
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 281, 16 de octubre de 1937, León
Por los frentes de León
¿Cómo han pasado?
Tengo como un axioma para andar por casa esta frase que se me ocurrió, en vista del modo de triunfar el Movimiento Nacional: «La guerra no puede ir mejor, porque si pudiese ir mejor, "¡¡¡iría!!!"
Y, sobre el terreno que poco antes fuera campo de batalla, confirmo, un día y otro, la verdad de lo dicho. No creo que la marcha de nuestros ejércitos pueda ir mejor. Porque, aun viéndolo, casi no se cree que hayan podido realizar estas empresas de gigantesco aliento.
Se encuentra uno en Villamanín, y se ven los montes que hay antes de llegar a las ruinas de la que fue risueña villa montañesa, Y no se cree.
Se va uno a Vegacervera; pasa por las hoces; contempla los montes de Serrilla y Villalfeide donde, estaban los muchachos leoneses en guardia constante y dura, y hace falta casi tocar aquellas piedras, como un apóstol Santo Tomás las llagas de Jesús, para convencerse de que hemos pasado por donde no se podía pasar, que hemos cruzado aquel puente entre las dos posiciones y que estamos en Vegacervera, rodeados también de escombros...
Más que en una guerra, pudiera creerse que estamos en una romería, si no fuera por la serie de barbaridades marxistas que me relata el secretario, un falangista de la vieja guardia de Valderas, la veterana Falange leonesa...
Brilla el sol; juegan los soldados entre las peñas, pasa algún camión con jóvenes de La Vecilla y otros pueblos, que parece van de fiesta... ¡la fiesta de la liberación, de la paz, del triunfo de España! La tarde es alegre y hermosa.
¿Pero cómo se ha hecho esto?... ¿Cómo han llegado hasta aquí estos muchachos intrépidos y sufridos? ¿como rompieron el cerco de hierro puesto a La Vecilla, donde ya no se escuchan los morterazos rojos, donde ya son inútiles las bonitas fortificaciones y refugios, que debiera el Ayuntamiento, sin embargo,
conservar como cosa interesante, sobre todo aquel bar subterráneo a seis metros bajo el suelo?
¿Como?... He aquí la pregunta que surge a cada paso. Porque aquí están esas hoces de Nocedo, escalofriantes y temerosas por sus picachos y sus revueltas, aquí están sus túneles excavados en la roca,
aquí esos caminos que facilitan el acceso a Valdorria, al huevo de Nocedo, a mil gigantes de piedra más, aquí esos enredijos de trincheras y parapetos; aquí esas alambradas que se extendían nada menos
que de Montuerto a Matallana... ¡Quince kilómetros!...
Aquí está la Montaña, formidable parapeto natural, aquí las obras de fortificación rojas. Pero dentro de esos colosales callejones de piedra no hay marxistas. Los ocupan los pistolos del 31 de linea que hemos, visto mil veces desfilar a la instrucción por la capital leonesa, los falangistas y requetés de León y otros soldados, otros requetés y otros falangistas de las demás regiones de la inmortal España.
Aquí están. Uno les ve, uno les nabla. Uno, les ha visto kilómetros más acá hace dos meses, por Riaño, por Vegacervera, por La Robla. Mira uno a estas montanas que se alzan desafiadoras, como si fuesen a ocultar el sol, y repite entre incrédulo y asombrado la misma frase de pregunta que a este simpático capitán Marquina: —¿Pero cómo?... ¿Cómo han pasado?... ¿Como?... —
De Soto y Amío
Un caballero y dos Camaradas
Son las siete de la mañana; el regreso sera a las cuatro de la tarde. Camino de los pueblos del alto, dos camaradas de la Sección Femenina de esta J. O. N. S. se las ve marchar, Trechero arriba. Seis kilómetros de camino para llegar al pueblo donde tienen que postular. Alegría y cantos de guerra salen del corazón. Solo Robles las rinde pleitesía en el trayecto.
La llegada al pueblo se hace anunciar con el aldabonazo a la primera casa que encuentran.
Sale la dueña a recibir al que interrumpe el silencio de la morada.
—Señora: la ponemos un emblema y solamente treinta céntimos la cuesta, (Palabras sencillas para su comprensión.
—No tengo dinero, para daros limosna, contesta.
—No la pedimos limosna; pedimos justicia nada mas. Usted es católica, porque el Sagrado Corazón que preside su morada así nos lo hace creer, y ¿como ha de negarse a contribuir para que la Justicia Social, que nuestro Caudillo desea ver realizada: ni un hogar sin lumbre ni pan, siendo usted católica?
Es tanta la emoción que las palabras de las camaradas la producen que, al no tener dinero, las ofrece huevos, y nuestras camaradas, después de un momento de silencio, evacuan la consulta de esta manera: Tiene que dar tres huevos, porque dos no cubren los treinta céntimos.
La señora les da cuatro en justificación de no haber mentido al decirlas que no tenía dinero. La despedida fue noble, cual corresponde a los que así proceden. No tenía dinero, pero si corazón.
Y así continuaron postulando nuestras heroínas de la Falange, hasta que clavaron todos los emblemas menos uno.
Regreso al pueblo. Cansancio. Hambre. Nada importa cuando en el camino se encuentra un caballero. Este caballero es D. Manuel de Dios, medico de Riello. El Saludo y luego... —¡D. Manuel, solamente este emblema nos queda! ¿Se lo prendemos? El caballero inclina la cabeza y quedó prendido el emblema y una moneda de 5 pesetas al fondo de la hucha.
Que Dios, con igual largueza, premie tu desprendimiento. Y para vosotras, heroínas de la Falange, la mejor rosa del jardín de la Justicia Social.
EL SECRE
Diario de Burgos, de avisos y noticias, Año XLVII, Número 19487, 18 de octubre de 1937
El Ejército rojo de Asturias se encuentra a la deriva
(Crónica del enviado especial de la Agencia “Faro” en el frente Meridional de Asturias).
— LA ROBLA.— Poco a poco y con paso firme, nuestros soldados van avanzando y se va estrechando al circulo en que se desenvuelve la horda roja en Asturias, cada vez más desmoralizada por los enormes reveses que las huestes de Belarmino Tomás, sufren en el campo de combate y las disensiones que continuamente hay en la retaguardia roja.
Entre las numerosas pruebas que confirman este hecho, figura la de que hoy se han presentado a una de nuestras columnas del sector meridional de Asturias numerosos evadidos, que no obstante estar comprendidos entre las quintas que han movilizado los rojos, habían logrado pasar desapercibidos y de pueblo en pueblo se han venido escondiendo hasta que las tropas nacionales se han acercado a ellos, liberándolos.
Manifiestan estos evadidos que en Asturias reina el desorden. Las últimas derrotas sufridas y la certeza que tienen los marxistas de la pérdida inminente de esta hermosa región, ha producido en ellos tal estado de ánimo capaz solamente para ir destruyendo todo cuanto se les ponga por delante.
Todos los presentados tienen un semblante escuálido y de hambre, habiendo solicitado de nuestro mando les permita incorporarse al Ejército salvador, para librar del látigo rojo a los que aún sufren en Asturias la Roja.
También por el sector de Villamanín, se presentaron a nuestros soldados un teniente y 18 milicianos que estaban defendiendo una posición, la que dejaron abandonada.
En cuanto a la actividad de hoy, nada nuevo puedo señalar, en lo que aún es frente de León; pero en cambio la jornada ha sido fructífera en el sector meridional de Asturias, a lo largo de todo el Norte, que comprende el Puerto de Vegarada, pasando por el de San Isidro y Tarna, hasta Oseja de Sajambre.
Una de las agrupaciones del sector de Tarna que ayer llegó al río Nalón, muy cerca de su nacimiento, ha proseguido hoy su avance por el Norte de Campo de Caso, situándose al Norte del mismo pueblo y efectuando desde aquí un ligero movimiento que dio por resultado la ocupación del pueblo de Orle, la cota 1.000 y sus inmediaciones, tras encontrar escasa resistencia vencida con bastante facilidad y continuando su precipitada marcha hacia el macizo montañoso de Peña Rebollo, que ya en la jornada de ayer, había sido alcanzado por nuestros soldados y que hoy, después de limpiar la montaña de enemigos, se llegó hasta el pueblo de Moraleda, en donde entraron nuestros soldados por la tarde.
Todos estos avances se llevaron a cabo al mismo tiempo que otras fuerzas que habían salido de La Foz, avanzaban sobre los pueblos de Tanes y Lavines.
Su marcha era rápida y apenas si encontraban enemigo, tan rápida que no sé hasta ahora los puntos que hayan alcanzado; pera desde luego puedo afirmar, sin temor a equivocarme, que ha cruzado todo el río Nalón. Esta agrupación iba protegida por otras fuerzas que por el flanco derecho habían salido de Ventaniella, rebasando el pueblo de Sobrefoz, y en su marcha sobre Beleño, se le incorporaron numerosos hombres que están comprendidos dentro del servicio militar y que pidieron un puesto en las files nacionales para combatir al marxista destructor. Desde un puesto que guarnece Oseja de Sajambre, pico montañoso cerca de los picos de Europa, en lo que es provincia de León, se efectuó una marcha por la carretera que conduce a Cangas de Onís. Esta marcha no tiene otro objeto que ver la situación de los Puentes de Conielles que se ha comprobado están totalmente destruidos.
Aparte de los numerosos evadidos que se presentaron a nuestras fuerzas, son muchos los milicianos que lo han hecho también, lo que da idea de la desmoralización que reina entre el Ejercito marxista. El número es tan elevado que hasta este momento no he podido precisar, pero si diré que entre ellos figura un cuerpo completo de telégrafos con sus servidores entre los que se encuentra también el jefe que les mandaba, que es un oficial de telégrafos.
Termino esta crónica y quiero reflejar en ella la menor impresión y optimismo para les lectores. Pocas veces y con tanta justeza como ahora, se puede afirmar que el Ejército rojo de Asturias se encuentra a la deriva y le auguramos pocos días de «xistencia.
¡Lástima de las energías que los asturianos han empleado en defensa de un ideal, que ni ellos mismos conocen, pues si lo conocieran bien, hubieran renegado de él y las hubieran puesto a disposición de la España de Franco!
ALAIZ,
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 285, 21 de octubre de 1937, León
Cuartel General del Generalísimo
Sección de Información, - Estado Mayor, Boletín de información con noticias recibidas en este Cuartel General hasta las 20 horas del día de hoy, 20 de octubre de 1937.
Frente de León. Se han ocupado Garba, Alto de Corri, Alto de Golpejar y Peña
Cruz y los pueblos de Cármenes, Barrio de la Tercia, Vilianueva de la Tercia y Golpejar,
habiendo incendiado el enemigo en su huida los pueblos de Campo, Piornedo y Piedrafita.
Se han presentado 41 milicianos y 147 mujeres y niños.
Avances de nuestras fuerzas y
nuevos crímenes de los rojos en el
trente de León
(Por teléfono). De nuestros enviados especiales J. Cantalapiedra Barés y Alvarez Cosmen)
Hoy ha sido corto el viaje,
pero nuestro coche, cansado
por la gran jornada de ayer se
ha dormido y no podemos llegar a León.
Ahí van unas notas.
Desde las primeras horas de
la mañana hasta la mitad del
día hemos permanecido en Villamanín. Después nos hemos dedicado a recorrer varias posiciones
por que la animación de "paqueos" de cañón era intensa y
como es natural, presumíamos que detrás del cañón vendrán
los fusiles y las ametralladoras.
Y no nos confundimos. Desde las primeras horas y tras
una preparación artillera, nuestros infantes, haciendo una vez
más patente su gran heroísmo
y amor a España, partieron de sus posiciones y han ocupado Garta, Alto de Gorri, Alto de Golpejar, Peña Cruz y los Pueblos de Cármenes, Golpejar, Villanueva y Barrio de la Tercia.
La horda ha incendiado los pueblecitos de Campo, Piedrafita y Campo Piornedo. Mucho tenemos que contar de la gran hoguera de estos tres pueblos. Los datos que tenemos, confirmados por manifestaciones de evadidos son de lo más interesante. Quizá mañana les podremos dar a la luz pública.
Mientras tanto, por lo que se
refiere a la destrucción y la barbarie, pensemos en Santa Lucía,
Pola, Villamanín. etc. Hemos visto como se han pasado a nuestras filas cuarenta
y un miliciano con armamento, un médico de milicias y ciento cuarenta y siete mujeres y niños. Esta escena no es para ser
descrita. La emoción les embargaba y no tenían palabras
para elogiar la labor altruista
de nuestro Caudillo. Gritaban,
gritaban todos. Los vivas se sucedían. Los abrazos unidos a la confianza que los producía el
verse entre nosotros de nuevo
han sido el colofón de esta jornada memorable para la conquista de España.
Ecos del frente leonés
De Vegacervera a Getino
(Conclusión)
El virulento sadismo asiático ha respetado aparentemente los templos, cuyas torres continúan cubiertas, elevándose a los cielos purísimos y tranquilos de esta querida montaña en muda
y fervorosa ofrenda de amor y
espiritualidad. Sin embargo, la iglesia de Llombera ha sido utilizada como matadero, y en la de Rodillazo, las "honorabilísimas" hijas de la Pasionaria organizaron animados bailes, destacándose por su inusitada brillantez, el celebrado con motivo de la pasada fecha de Navidad, al que asistieron ebrias
de entusiasmó señoritas de Correcillas. El templo de Tabanedo fue bárbaramente profanado; las imágenes sagradas,
previamente colocadas en fila,
ofrecieron los divinos semblantes a la hedionda ferocidad bolchevique, que ejecutó su macabro fusilamiento en un acto de
refinado vandalismo.
La tea incendiaria al servicio
del Kremlim no ha cesado en
su negativa obra de exterminio.
Podemos asegurar que si determinados pueblos se han salvado
de ella, obedece a que el miedo
vuelve alados los ligeros pies de
la mesnada moscovita. Idea aproximada de las alarmantes proporciones que ha adquirido nos da la vertiginosa carrera emprendida por cuatro milicianos
en Genicera, poco antes de comenzar el incendio, que, confundiendo el chirrido de unos
goznes enmohecidos con el ruido producido por la incomparable Aviación española, huyeron
aterrados a campo traviesa.
Rodillazo, una vez retirados
los aventajados discípulos de
Belarmino, ardió en parte, prendido por rezagados del país. Se
distinguen sobremanera los mineros leoneses en la científica
confección de proyectos criminales. Ni los asturianos les superan.
Una serena noche del pretérito agosto, los rojos, arma en
ristre, rodearon las viviendas de Genicera, alarmando a los pacíficos labradores que no comprendían la finalidad de tan singular medida, pues se llevaron a efecto minuciosos registros en arcas y baúles. Después se supo que andaban a caza de curas. Las mujeres del citado pueblo recibieron últimamente terminante orden de evacuación,
que cumplieron a medias, saliendo en dirección Norte, pero, una
vez en los montes, redimidas de
la torturante pesadilla vivida volvieron sobre sus pasos, acogiéndose al amparo de los soldados de Franco. Los rusófilos, entretenidos en la vil tarea de saquear casas, perdieron la pista de los evacuados, que, aprovecharon bien el tiempo, guareciéndose a favor de los matorrales. Varias ancianas de más de
setenta años llegaron en deplorable estado, perfectamente explicable, teniendo en cuenta que
tuvieron que pasar bastantes
días a la intemperie. Transidas
de dolor evocan las repugnantes infamias de la rabiosa jauría
que empañó la alegría montañesa, asolando la próspera Mediana.
Nuestra más ardiente admiración y simpatía para los valientes compañeros que en verdaderos nidos de águilas juegan la vida por una España mejor. A través de fragosidades inhospitalarias, resistiendo impávida
el cansancio físico y las inclemencias del tiempo, cosecha eternos laureles la gloriosa Infantería, a cuyos heroicos soldados
sonríe la victoria. Las antiguas
virtudes inherentes a la raza
florecen de nuevo en las juventudes hispanas, que cual bravas
legiones triunfales luchan y vencen por Dios y por España, la
España Nueva que como un
Nuevo Mundo asoma al horizonte latino, rescatada a las heladas hordas amarillas por el espléndido Ejercito azul. ¡Víva España!
Manuel González,
Canto Collado 16 octubre de 1937
San Juan de Luz.—Ha sido difundida la noticia de que Belarmino Tomás, el sanguinario cabecilla asturiano, acompañado de otros dirigentes, han abandonado Asturias, refugiándose en Francia. Esta noticia ha causado profunda desorientación en los medios rojos.
SE VA A PONER EN CLARO LA CRIMINALIDAD DE LOS ROJOS
— Marsella. A su paso por Marsella, de regreso de Valencia, el ex consejero de la Generalidad,
Martí Esteve, ha afirmado que en la España republicana se están realizando estudios muy completas sobre los asesinatos cometidos en la zona
roja. Según dicho ex consejero,
los cálculos realizados hasta ahora, dan una cifra de siete mil asesinatos cometidos en Cataluña y de treinta mil en Madrid.
Imperio, Diario de Zamora de Falange Española de las J.O.N.S., Año III, Número 381, 22 de enero de 1938, Zamora
La justicia en nuestra España
JOSE LOPEZ IGNITO (a) El Gallego, condenado en Consejo de Guerra número 3, reunido en Oviedo, a la pena de muerte, por razón de los siguientes hechos:
Sujeto de mala conducta, procesado y preso por los sucesos de octubre de 1934, el cual, hallándose al iniciarse el Glorioso Movimiento Nacional, en la provincia de León, se pasó al campo enemigo de Asturias presentándose en el Comité de Guerra de Moreda. Actuó como miliciano en un Batallón rojo y después se trasladó a Mieres y otros pueblos, algunos de la citada provincia de León, en los que, fingiéndose derechista se ofreció e invitó a varias personas de este carácter para pasarse a la zona Nacional mediante determinadas cantidades, algunas de quinientas pesetas; dichas personas confiando en aquella promesa se prestaron a lo que deseaba el procesado, el cual las asesinó en el camino, figurando entre ellas Bautista Suárez Fernández, Guillermo González, José María García, y Próspero de la Fuente, cuyos cadáveres fueron arrojados a una cueva en Hoces de Vegacervera (León). Para la realización de estos hechos se hallaba en relación con otros milicianos que le auxiliaban en los crímenes llevados a efecto por el procesado en la forma expuesta.
A pesar de sus monstruosos crímenes, el sujeto objeto de la pena a que hace referencia la noticia anterior, fue juzgado con todas las garantías legales, aplicándosele la pena que la Justicia, serena, pero inflexible, señala a los que enturbiada su conciencia por la reiteración en el crimen, constituyen un ejemplo de perversidad, incompatible con una sociedad limpia, como la que está formando esta Revolución redentora.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 357, 22 de enero de 1938, León
FICHA AZUL PARA LAS
"HURDES LEONESAS"
(Conclusión de la conferencia dada por Radio León-"Ondas Azules", por el Delegado
de "Auxilio Social".)
Realmente yo no debiera decir ya más. Hemos convenido
en que se han terminado los
tiempos del verbalismo y la palabrería, y mi pensamiento queda ya, a mi entender, suficientemente claro, y no creo que
haya argumentos con qué combatirlo, como alguien no se los
pida a esa mujer andrajosa que
hemos dado en llamar doña Tacañería.
Pero, por ser justo, me permitiréis un recuerdo para los
pocos que se han ocupado de
nuestras "Hurdes" con verdadero anhelo de redención: para
esos ingenieros, ayudantes, etcétera, de Obras Públicas y de
la Diputación, que han estudiado con verdadero sacrificio las vías de comunicación para esa
comarca irredenta; para esos
ingenieros de Montes que tienen hechos benedictinos estudios en orden a la repoblación
forestal; para esos médicos que
han ido a estudiar el medio de
regenerar aquella raza depauperada; para los pocos sacerdotes que hay en aquella comarca; para los pocos médicos que
ahí se sostienen; para los pocos maestros que allí paran, entre los cuales tengo ya buenos
amigos.
Para todos ellos, y para
todos los demás que se hayan
escapado en esta rápida enumeración, mi cariño y mi admiración sincera. Para todos mi
ruego de que me ayuden en esta empresa que hoy se acomete: la de dar de comer a tanto
hambriento, propagando en sus
círculos esta idea de la ficha azul. Todos unidos vamos a emprender la redención de aquellos pueblos. Unidos en la santa fraternidad que debe ser, como predica Falange, un noble ideal de todos los españoles.
Pero hemos de suscribir esa
ficha azul, sin disminuir ni regatear la corriente.
Si ésta disminuye, nos anularían la otra;
y yo he dicho que los leoneses harán un sacrificio para dar de
comer a los hambrientos hurdanos; pero que no lo harán a
cuenta de los pobres del resto
de la provincia. Y si, al establecer esta ficha azul, disminuye
la corriente, lo que haríamos seria quitar el pan a un pobre
para dárselo a otro.
Si estuvierais, como tengo
que estar yo, en contacto con esa enorme cantidad de pueblos que piden comedores o víveres, no sentíais la tentación
de rebajar la ficha azul.
En un ayuntamiento minero se estableció hace ya tiempo un comedor; hay que instalar ahora cuatro, donde acudirán a comer 140 niños, en lugar de los 50 con que se empezó. Y allí no
hay "emboscados", como parece que se han colado en otros
comedores. Ya les estamos buscando el bulto.
En la cuenca minera de Laceana tiene "Auxilio Social" ya
tres comedores y va a montar
otros dos, uno de ellos reclamado urgentemente por el mismo teniente del destacamento.
Sería interminable si hubiera
de seguir refiriendo casos. Basta con que penséis, cuando os
asalte la tentación de ser amigos de doña Tacañería en perjuicio de "Auxilio Social", en
cómo están, sobre todo, los
ayuntamientos de Rediezmo o
Villamanín, Pola de Gordón, Cármenes, Vegacervera, Valdelugueros, Valdepiélago, Valdeón y algo del de Lillo.
Vosotros, los que me estáis
escuchando, habéis cenado ya seguramente casi todos, estáis
al lado de un buen aparato de
radio, en una habitación confortable, quizá fumando un
buen puro. Yo no condeno los
progresos humanos. Pero tengo
en estos momentos que recordaros que hay quien no ha cenado ni cenará, ni tiene radio, ni tiene habitación confortable, ni
tiene buen abrigo, ni casi tiene cama.
Pensad en los soldados
que están en los frentes y pensad en ese ejército de los necesitados de retaguardia. Lo más
grande quizá de este Movimiento es que mientras más gastamos en la guerra más atendemos también a los necesitados.
Ello demuestra lo inagotables
que son los recursos de esta
España inmortal.
COMIENZA LA SUSCRIPCIÓN
Aunque me cueste una reprimenda, quiero terminar dándoos una noticia: la suscripción
de la ficha azul para las "Hurdes" ya ha comenzado. Fui a
indicarle al Gobernador Civil
interino, Sr. Rodríguez del Valle, el proyecto y con esa sencillez que pone en todos sus actos me dijo:
—Pues dé por suscrita mi ficha azul especial con cien pesetas al mes; quinientas en los
cinco meses. Pero conste que
es a mi particular, no al Gobernador interino, ni al Presidente de la Diputación, es al que menos tiene y menos puede
y nada vale, a Raimundo Rodríguez del Valle.
Yo me retiré pensando: Así
son los leoneses; como Rodríguez del Valle.
Ya no me queda más que una cosa: preguntaros a los restantes: ¿Somos o
no somos? Los radioescuchas todos tienen la palabra.
¡Viva Franco! ¡Arriba España!
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 361, 27 de enero de 1938, León
Gobierno Militar de León
ANUNCIO OFICIAL
La Comandancia General de Artillería ordena se disponga el envío urgente a «Autógena Martinez», de Valladolid, de todos los envases vacíos de oxígeno, acetileno y aire, que existen en Fábricas y Talleres y que sean propiedad de la citada Casa. Haciendo presente a los industriales, que la Comisión Reguladora del Ejército del Norte ha ordenado a las Compañías de Ferrocarriles, consideren a las referidas botellas como material de guerra a los efectos del rápido transporte.
León, 24 de enero de 1938.
Segundo Año Triunfal.
Para los explotadores de minas
Se recuerda a los explotadores de minas sitas en loa
Ayuntamientos de Albares,
Bembibre, Boca de Huérgano, Boñar, Fabero, Folgoso,
Igüeña, La Ercina, Lillo, Matallana, Noceda, Páramo del
Sil, Prado de la Guzpeña, Pola de Gordón, Renedo de Valdetuéjar, Toreno, Valderrueda, Vegacervera, Villablino y
Villagatón, la obligación de
presentar en la Administración de Rentas Públicas las declaraciones trimestrales de
productos explotados, y se les advierte que transcurrido
el primero de febrero próximo, y sin perjuicio de la instrucción de expediente de defraudación, serán impuestas multas máximas a los que no
hayan cumplido esta obligación.
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 432, 23 de abril de 1938, León
Fueron trasladados al Cementerio de León los restos de nueve camaradas
Fue allá en los primeros días del Movimiento Nacional cuando como un trallazo seco y doloroso, restalló en León la noticia.
"En Valdeteja han sucumbido unos cuantos falangistas sorprendidos por una masa desproporcionada de enemigos durante una descubierta."
Fue en una emboscada. Cayó el teniente que los mandaba y nuestros camaradas en una retirada ordenada lograron alcanzar una casa del pueblo de Valdeteja, y allí como unos bravos se dispusieron a defenderse hasta la muerte. Una masa superior a trescientos rojos atacó con toda clase de material, en la que abundaban cartuchos de dinamita. Durante todo el día fueron varios los asaltos que la horda marxista llevó a cabo, pero allí, en aquella casa, convertida en fortín, había nueve hombres, nueve camisas azules, acostumbrados a sufrir persecuciones, enseñados a la lucha cruel y sin cuartel de los tiempos heroicos de la Falange, que con nuestro himno de guerra y de muerte, nuestro "Cara al Sol" prendido en sus labios y con el corazón prendido en las puntas de sus bayonetas, rechazaban uno a uno todos aquellos ataques. Y solo a las primeras horas de la madrugada, cuando las municiones se habían agotado entraron los rojos en la casa, saturada toda ella del heroísmo y de la alegría de Falange.
Y allí encontraron nueve hombres, nueve camaradas, que con la cabeza altiva y en posición de firmes, dijeron a los que entraban:
"Ya sabemos que vamos a morir, pero esto en Falange no es sino un mero acto de servicio. ¡Arriba España!"
De allí fueron conducidos a Carmenes, donde fueron interrogados y maltratados, y más tarde llevados a Busdongo, donde el 27 de agosto fueron fusilados a la puerta del cementerio.
El trayecto desde el pueblo hasta el cementerio fue un verdadero calvario. La horda, con ganas de sangre, los golpeaba e insultaba, pero por encima de toda esta algarabía de gritos e insultos soeces, se elevaba la magnífica serenidad de nuestros camaradas, que luciendo orgullosos los jirones de sus camisas azules, el pecho saliente, la frente alta, se enfrentaron con el pelotón de ejecución y nueve brazos, tensos como flechas salieron disparados al cielo en busca del lucero que allá arriba les esperaba.
Y allí, en el mismo lugar de la ejecución fueron enterrados.
SUS RESTOS SON TRASLADADOS A LEÓN
El jueves por la tarde se trasladaron a Busdongo el Delegado Provincial de Sanidad, camarada Enrique Vega, acompañado del gestor de este Ayuntamiento, camarada Francisco Diez, encargados por las jerarquías de FET y de las JONS del traslado de los restos a este cementerio.
Una vez en León se dispuso que el acto de darles cristiana sepultura fuera ayer tarde. Al cementerio acudieron numérosos familiares de los camaradas caídos.
También acudieron el Delegado Provincial de nuestra organización, camada Reinerio Gago; el Jefe Provincial de Milicias, teniente coronel López Roda, Asesor Político de Milicias, camarada Pérez Alonso; Delegado Provincial de Sanidad, camarada Enrique Vega; de Justicia y Derecho, camarada Brugada; Jefe de Tercio, camarada Valdés; Presidente de la Excma. Diputación, camarada Rodríguez del Valle y algunos camaradas del SEU.
Una escuadra de primera línea dio guardia al féretro donde se guardaban los restos de nuestros camaradas.
Después de leída la Oración de los Caídos, nuestro Jefe Provincial, camarada Gago, dio los gritos rituales de presente.
Camaradas caídos en el cumplimiento del deber:
Nicanor Diez González, de Matallana
Manuel Martinez Brugos, de León.
Alfredo Alvarez Fierros, de Matallana
José Laiz Diez, de La Valcueva.
Agustín Suárez González, de Garrafe.
Santiago García Tascón, de Pedrún.
Federico Rodriguez Tabernero, de Matallana.
Fidel González Robles, de Pardavé.
Un camarada desconocido perteneciente a una Centuria de Galicia.
¡¡ PRESENTES!!
Proa, diario de Falange Española de las J.O.N.S., Número 1.185, 1 de octubre de 1940, León
NECROLÓGICA
Hoy hace cuatro años que un distinguido joven leonés, querido camarada. aventajadísimo alumno del 2.° Curso de la Escuela de Ingenieros de Caminos, modelo» de Jóvenes cristianos, flor prometedora de sanos y copiosos frutos, Antonio Manuel, Zapico Arrióla, entregó generosamente su vida por Dios y por España, víctima de traidora emboscada de los rojos en Puerto Ventana.
Tan conocido y querido era en León Antoñito Zapico Arrióla, que nos releva de enumerar las muchas y buenas cualidades de que estaba adornado. Al evocar hoy el día de su triunfo muriendo-por Dios y por España reiteramos nuestra condolencia a la distinguida familia Arriola-Chicarro, y lanzamos nuestro grito de ritual que es también consigna.
Antonio Manuel Zapico Arriola: ¡¡Presente!!
Importante detención de un “capitán” del ejército rojo
Desde hace algunos días tenía la policía sospechas fundadas de que en el barrio del Matadero, de nuestra ciudad, se encontraba escondido un destacado elemento rojo.
Por el Sr. Comisario Jefe, Sr. Justo Fernández que con tanto celo se viene laborando en cuantos servicios le están encomendados, se dispuso que el agente don Moisés Pérez y el auxiliar don Modesto
Artajo de la Brigada Social, realizaran las necesarias indagaciones para localizar al sujeto en cuestión, y caso de ser hallado, proceder a la detención del mismo.
En la mañana del domingo, los citados agentes se personaron en la calle de la Presa de los Cantos número 1, piso primero centro, por abrigar sospechas de que en el citado piso se encontraba el elemento a quien se buscaba. Aunque la inquilina del piso, Trinidad González García, viuda de 36 años, negó rotundamente que en su domicilio se ocultase persona alguna, los agentes de justicia notaron cierto nerviosismo que les hizo suponer que las sospechas no eran infundadas.
En efecto, hecho un detenido registro encontraron en una habitación, acostado en la cama, a Luis
Prada Macía de 28 años, soltero, natural de Valderas, y repartidor de Telégrafos al iniciarse el Glorioso Movimiento Nacional.
Al notar la presencia de la policia, Luis echó mano al cajón de la mesilla de noche de donde sacó una bomba de “piña” sin duda con intención de lanzarla contra los agentes, pero la enérgica y rápida actuación del agente Sr, Pérez, que le echó mano y le encañonó con la pistola, impidió que el Luis lanzara la bomba. El sujeto en cuestión quedó detenido.
Por los informes que hasta ahora hemos podido obtener, puede asegurarse que se trata de una importante detención.
Luis Prada fue dirigente de las juventudes libertarias y destacado y peligroso elemento anarco-sindicalista. En 1932 fue detenido y procesado por repartir hojas clandestinas, excitando a la indisciplina y a la rebelión militar.
Al surgir el Glorioso Movimiento y ser movilizada su quinta fue destinado a la Compañía de Ametralladoras del Regimiento de Infantería, número 31, desertando de las filas nacionales y pasando a las rojas por el frente de La Robla. Prestó servicios de armas en los frentes rojos de La Robla, Pola de Gordón, Matallana y otros alcanzando la graduación de “capitán”. Al derrumbarse el frente de Asturias se encontraba en Campomanes, llegando por los montes a León y ocultándose en el domicilio de su madre en la Travesía del Conde de Rebolledo, número 1, piso 1, donde permaneció un año, aproximadamente, trasladándose después a la casa donde fue detenido por creer que en ella podía ocultarse mejor.
El detenido ha sido puesto a disposición de la autoridad militar.
(
EN UN CUARTEL DE LEÓN SON ARROJADAS POR UNA VENTANA, AL INTERIOR, ALGUNAS PROCLAMAS COMUNISTAS
LEÓN.—En el cuartel del Cid fueron arrojadas esta noche por una ventana algunas hojas, comunistas.
Percatados los centinelas de lo que ocurría dieron aviso al oficial de guardia, el cual dispuso que saliera una patrulla a realizar una inspección por los alrededores del cuartel con objeto de detener a los propagandistas, pero éstos no pudieron ser habidos.
Posteriormente ha sido detenido un individuo llamado Luis Prada, a cuyo nombre había sido enviado el paquete de hojas que, al parecer, procedían de Madrid.
)
Los inicios de la guerra
La tarde del 18 de julio dos columnas con cerca de 5.000 trabajadores y algunos oficiales y guardias de asalto dejaron Oviedo con rumbo a Madrid, para defender el gobierno de La República, a petición de Indalecio Prieto. Habían conseguido 200 fusiles y munición del general Aranda, además de abundante provisión de dinamita. Una de las columnas partió por ferrocarril con 3.000 hombres y al mando del socialista Otero, la otra con el resto, unos 2.000 hombres y al mando del comunista Damián Fernández partió en camiones y vehículos requisados. Ambas columnas dependían del mando del dirigente minero Francisco Martínez Dutor, que había sido suboficial del ejército y luchó en la revolución del 34.
A las 10 de la mañana del día 19 ambas columnas llegan a León, en dónde el general Caminero ordenó que les fueran entregadas más armas. El coronel del regimiento, que tenía intención de sublevarse en cuanto las columnas partieran, apenas les entregó otro centenar de fusiles en no muy buen estado y unas pocas ametralladoras y munición. Ese mismo día, ya de noche, los asturianos alcanzan Benavente en donde se enfrentan a una compañía de guardias civiles, a la que logran reducir.
En Benavente tienen noticia de la sublevación del general Aranda y deciden volver a Asturias en camiones y forman los primeros grupos armados que cercan a Aranda en Oviedo y a Pinilla en Gijón.
Los guardias civiles del cuartel del Barrio de la Estación (Matallana), al igual que los de otros cuarteles de la zona se habían desplazado a León en la mañana del día 20 de julio obedeciendo órdenes de la superioridad.
Entre los días 20 y el 30 de julio de 1936 Robles de la Valcueva estuvo bajo el control de los milicianos republicanos. Estos milicianos eran civiles armados pertenecientes a los partidos y sindicatos de izquierdas. Es durante esos días cuando se saquea la ermita de Boínas (Que posteriormente es incendiada), la iglesia de San Martín de Robles, y la iglesia de San Martín de Palazuelo de la Valcueva.
En la ciudad de león, a las 14 horas del día 20 de julio, salen a la calle las tropas del Cuartel del Cid, así como los Guardias civiles y los Guardias de asalto que se habían sumado a la rebelión, y ocupan los puntos estratégicos de la ciudad proclamando el Estado de Guerra.
En la medianoche del día 23 de julio, grupos de milicianos de Sabero, Olleros, Matallana y Pola de Gordón atacaron la capital por la avenida del Padre Isla, forzando el repliegue de los militares sublevados hasta el centro de la ciudad, sitiando incluso la Comandancia Militar. Hasta que se les acabaron las municiones, los mineros controlaron la situación en una parte importante de la ciudad. Cuando ya no pudieron disparar las fuerzas sublevadas pasaron a la ofensiva, apoyados por la aviación.
El 26 de julio de 1936 los sublevados toman el control de la ciudad de León después de cinco días de lucha en las calles. Los mineros se defendieron con valor, algunos perdieron la vida en los combates y los que cayeron en manos de los nacionales sufrieron la misma suerte; no se hicieron prisioneros. (L’Humanité 27 – 7 – 36)
Una vez asegurado el control de la ciudad de León por los nacionales, en los días sucesivos tratan de controlar el norte de la provincia de León. Durante los últimos días de julio de 1936 el coronel Vicente Lafuente Baleztena al mando de tres columnas avanza hacia La Magdalena, La Robla y La Estación de Matallana.
El 1 de agosto de 1936 queda consolidando el frente a la altura de la línea Posada de Valdeón - Soto de Sajambre - Puerto de Tarna - Puebla de Lillo - Boñar - La Vecilla - Estación de Matallana - La Robla - La Magdalena - San Pedro de Luna (localidad hoy desaparecida bajo las aguas del pantano de Luna)- San Emiliano. Queda de esta forma dividida en dos zonas la provincia de León, la mayor parte bajo el control de los nacionales, y una pequeña franja al norte centrada en la montaña central leonesa bajo el control de la República.
Tras la sublevación de julio de 1936, los valles de la zona norte de León, con amplia presencia obrera y sindical -especialmente anarquista- quedaron controlados por el gobierno republicano y pronto pasaron a depender del posteriormente llamado Consejo de Asturias y León, el gobierno regional republicano con sede en Gijón. La línea del frente queda estabilizada en agosto de 1936 pasando en su punto más meridional por las últimas estribaciones de la Cordillera Cantábrica a tan sólo unos treinta kilómetros al norte de León capital. Testigo de estos hechos podemos encontrar toda una serie de fortificaciones militares que defendían estos valles leoneses. Una de las más notorias se encuentra en el Pico Fontañán (1629 m.) y en la vecina Peña Muezca (1651 s.), al suroeste de Pola de Gordón y dominando desde la altura el importante centro industrial y nudo de comunicaciones de La Robla.
En 1936 la línea de frente pasaba justamente por aquí, estando Pola de Gordón en poder republicano y La Robla controlada por los nacionales.
El 15 de agosto de 1936, con la iglesia quemada, se celebró una misa de campaña con un altar improvisado en la pradera del templo de Boínas.
Aunque inicialmente en el bando nacional se continuó usando como bandera la tricolor republicana, el 29 de agosto de 1936 se restableció oficialmente el uso de la bandera rojigualda anterior a 1931. A propósito de este hecho, y referida al Barrio de la Estación, en el Diario de León del 5 de septiembre de 1936 se publicó la siguiente nota de prensa:
El nido de ametralladoras que se está excavando está construido con hormigón armado, toda una hazaña logística por situarse a una cota elevada (a 1.520 metros). Tiene planta circular, de 4 metros de diámetro. El acceso se sitúa hacia el Norte y en la parte Sur-Oeste posee dos troneras rectangulares abocinadas hacia el exterior.
1 comentario:
Muy buenas, enhorabuena por este extraordinario trabajo de documentación. Llevo un tiempo pasando temporadas en la montaña leonesa, cerca de Boñar, y gracias a esta entrada he encontrado algunas respuestas a dudas y cosas de las que no tenía la menor idea. Muchas gracias por compartir todo este material. Un cordial saludo.
Florentino Areneros.
GEFREMA (Grupo de Estudios del Frente de Madrid)
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