La industria el automóvil en la Unión Europea emplea a 2,4 millones de trabaadores directos, y 18,8 millones indirectos, lo que supone que casi un 7% de los trabajadores en Europa lo hace en el sector. En 2023, se produjeron 14,8 millones de automóviles, lo que supone el 15,8% del total que se vendió en el mundo y el balance comercial fue positivo, con 106.700 millones de euros. En términos impositivos, se recaudaron 383.700 millones.
En la UE representa más del 7% del PIB y articula muchas de las cadenas de suministro intracomunitarias. Los países de la UE fabricaron en 2022 casi 11 millones de automóviles que proporcionaron 2,6 millones de empleos directos (el 8,5% del empleo europeo en el sector manufacturero) y 13,8 millones de empleos indirectos (el 6,1% del total de la UE). En España, por su parte, la facturación del sector supone el 8,1% del PIB, y aporta el 9% del empleo. En 2022, España fabricó 2,2 millones de automóviles, de los cuales 1,93 millones fueron exportados. Se trata, por lo tanto, de un sector estratégico.
Las marcas chinas están interesadas en instalarse en Europa para salvar las barreras arancelaria. La filial internacional de Chery, Shawn Xu, anunció que sus marcas Jaecoo y Omoda se fabricarán en España, en la Zona Franca de Barcelona, en donde Nissan fabricó sus vehículos hasta 2021. De los 3.200 trabajadores que quedaron en el paro entonces, 1.250 volverían a la fábrica para ensamblar modelos del grupo de Anhui, así como de la marca española Ebro, que ha sido recuoerada desde su desaparición en 1987. El objetivo es construir 50.000 coches al año en los próximos dos años y 150.000 en 2029.
Estos proyectos se financian con fondos Perte, que forman parte de los fondos europeos Next Generation. Con ellos se ha impulsado también la factoría de producción de baterías del Grupo Volkswagen en Sagunto. En su segunda convocatoria facilitó 300 millones de euros a Envision AESC para construir una planta de acumuladores en Navalmoral de la Mata (Cáceres) que podría llegar a una capacidad de 30 GWh anuales. Además de esta fábrica, la compañía de Shanghái anunció que desarrollará en España el primer parque industrial integrado de hidrógeno verde en Europa, con la intención de que tenga emisiones neutras en carbono.
En Andalucía se intenta revivir la antigua fábrica de Santana en Linares (Jaén). El último coche salió de sus líneas de montaje en 2009. Existen conversaciones con el fabricante de componentes para el coche eléctrico Anhui Coronet. Las negociaciones van de la mano de la marca Great Wall Motors.
Otro constructor que podría instalarse en España es SAIC, matriz de MG.
El interés de las marcas chinas no se limita a España. BYD, está erigiendo una planta en Hungría que estará operativa en 2025 y tiene proyectada una capacidad de 300.000 coches al año. Leapmotor, del grupo Stellantis, fabricará su T03 en Polonia. Zeekr, del Grupo Geely, está estudiando usar alguna fábrica de su matriz en Europa.
Si la bolsa es un termómetro de cómo va el negocio de las grandes multinacionales, hay varios gigantes del motor que no viven su mejor momento. Por un lado, Stellantis, el grupo matriz de marcas como Fiat, Peugeot, Citroën, Opel o Chrysler, que ha perdido más del 40% de su valor en el parqué desde el pasado 1 de enero. Por otro, los grupos alemanes BMW, Volkswagen y Mercedes Benz, que se han dejado cerca de un 24%, un 18% y un 7%, respectivamente, de su capitalización en bolsa. En cambio, a otras compañías les va bien, como le ocurre por ejemplo a la francesa Renault, que se revaloriza cerca de un 6% en lo que va de 2024.
No hay comentarios:
Publicar un comentario